sortilegio de amor

23

Naruto y Deidara se encontraban desayunando algo en el comedor del hotel.

-que hiciste que?!- pregunto Deidara a su hermano quien respiro profundo

-le conté todo a Sasuke

Deidara no podía creerlo, frunció el ceño y miro a su hermano más de cercas –y que te dijo?

El rostro de Naruto se ilumino y sonrió –entendió y dijo que no iba a hacer nada contra nosotros

Una gotita resbalo por la cien de Deidara –haber déjame ver si entiendo, le contaste a Sasuke que Itachi uso su nombre y falsifico su firma para casarse contigo y quedarse con todo, Sasuke te entiendo y dijo que no aria nada contra nosotros, te compraba ropa, te trataba como un príncipe y tú te largaste?!

Naruto bajo su rostro –si pero tu ya sabes porque lo hice
Deidara respiro profundo –pero tu eres un tonto!

-basta Dei, no importa lo que Sasuke hubiera hecho sabes que Itachi amenazo con meter a la cárcel a papá y yo haré todo para que eso no suceda

-pero papá no aria nada malo

Naruto agarro la mano de su hermano –lo sé pero ya sabes cómo es Itachi, pudo falsificar pruebas para culparlo

Deidara hizo un puchero –que mala suerte, pudimos tenerlo todo y mira ahora estamos en un asqueroso lugar comiendo esta cochina comida!

Jiraiya quien había estado escondido escuchando la conversación de sus hijos se retiró a la habitación; lamentaba que sus hijos estuvieran pasándolo mal todo por su culpa, tenía que ser un buen padre por una vez en su vida y sabía de qué forma hacerlo.

Escribió una carta en la que se disculpaba por lo malo que había hecho, si, había permitido que su compadre vendiera cosas malas sin embargo ahora se arrepentía de ello, es por eso que no iba a dejar que destruyeran su vida sus hijo y se despedía porque iba a desaparecer de la vida de ambos rubios, al menos si lo metían a la cárcel seria solo a él.

Jiraiya tomo su mochila y bajo a recepción donde dejo la carta para que la entregaran a Naruto Uzumaki, después de esto con gran dolor en su corazón y lágrimas en sus ojos huyo.

En la mansión Uchiha, Sasuke después de calmarse un poco y hacerse a la idea de que Sai mentía bajo de su habitación, tenía que irse a trabajar para despejar su mente.

Al bajar se encontró con Mikoto quien rápido se le acerco.

-Sasuke...tú crees que sea verdad lo que dijo Sai?

Sasuke miro triste a su madre –tú crees en lo que te dije?

Mikoto pensó un poco más –yo a ti te creo todo pero pienso que Naruto invento que Itachi intento matarte y todo lo demás

El Uchiha sonrió tristemente –entonces dices que por un lado lo acusa de hecho criminales y por otro lo besa ¿Por qué madre?

La mujer bajo el rostro –no tengo idea

El azabache se despidió de su madre y se retiró a la empresa.

Más tarde Mikoto fue a regañar a Sai diciéndole que no le creía nada de lo que había dicho que era mejor que tuviera cuidado no quería otro escándalo que manchara el buen nombre de la familia.

Cuando la madre de Sai se fue, este miro a su esposo Gaara quien sonrió.

-tu madre tiene razón

-bueno si la tiene entonces porque no dejas de beber, te consigues un trabajo y me haces un hijo?!

Gaara se cruzó de brazos y se rio –no hay trabajos para mí, no pienso dejar de beber hasta que tú lo hagas y sobre tener un hijo créeme que no me interesa tener relaciones con alguien como tú, así que mi vida busca por tu lado- Gaara se dio media vuelta pero antes de irse se giró –procura que tus galanes usen condón porque no me gustaría darle mi apellido a un bastardo o al menos que me guste el tipo- dicho esto se fue riéndose.