cap, 3.

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Un año atrás.

Pov; hyunjin.

Todo su cuerpo estaba algo tensado, estaba tan cansado y frustrado por todo. No sabía que hacer ni como reaccionar, otra vez tendría otro maestro el cual le enseñaría.

Era sencillo ir a la escuela pero simplemente para el era complicado, tenía un serio caso de ansiedad social y depresión que hacía cambiar sus emociones haciéndolo algo bipolar y menos afectivo con todos, esto había comenzando exactamente hace años.

Su psicólogo le había dicho que era por el trauma que su madre le habían causado, al igual que el abandonamiento de su padre. La madre de hyunjin se había desquitado con el durante 5 años, pues le hacía creer muy constantemente al pelinegro que por su culpa su papá los había abandonado, motivo por el cual vivía con su abuela.

Un sentimiento de enojo lo consumía, su ridícula madre le había conseguido un maestro de su edad.

Cómo mierda trataría eso?.

Era tan fácil hacer enojar a sus antiguos maestros, eran viejos y mayores por ende se enojaba fácil, siendole de ventaja para que se salieran o renunciando. ¿ahora como tendría que tratar a un estudiante de su edad?

Resoplo enojado escuchando a la vez un "click". Observando como su puerta había sido abierta.

- Cariño?, el maestro ya está acá, no tardes mucho, ¿Si?.. - Esas fueron las palabras de su abuela antes de verla salir otra vez.

Hyunjin tenía una gran necesidad de hacer lo que su querida abuela le decía, pues era prácticamente la única persona que tenía con el. Su madre no estaba, no la había visto en 3 años y sabía que aún seguía vida por los regalos que le enviaban cada año o cada fiestas.
Aquella casa eran tan grande que solo vivía hyunjin y su abuela, se sentía tan vacío, solitario y helado por las noches.

Pero eso era algo a lo cual el pelinegro ya están acostumbrado.

Salió de su habitación observando a lo lejos el caminar de su abuela, así que comenzó a caminar hacia aquella habitación que sería su salón donde estudiaría.
Llevaba bastante tiempo sin interactuar con alguien más, y muchísimo menos de su edad. No mentiría.. Tenía miedo, el terror y nerviosismo le recorría el cuerpo a hyunjin, no sabría cómo actuar, así que simplemente se obligó a controlarse y entrar a la habitación.

Sorprendido quedó al notar a su.. "maestro"
De cierta forma parecía muchísimo menor que el, era algo enano, su pelo castaño, con una piel pálida y tonalidades rosadas, esos lentes redondos y su vestimenta infantil es lo que le hizo a hyunjin dar seguridad.
De alguna extraña razón, sentía que podría tener el control todo.

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Mentiría si dijera que hyunjin no pudo controlarse en ese instante, ya que se llevó una clara imagen de su profesor.

Aún sabiendo que era 2 años mayor que el algo lo hacía querer tocarlo.

Eso estaba mal, ¿Verdad?

Amaba la sensación que su cuerpo sentía al verlo enojado e irritado.
Mentiría si dijera que no se sentía atraído, física y mentalmente por aquel pequeño chico de baja estatura.

Para su defensa hyunjin tenía una fijación por las cosas bonitas y lindas, pues en todo este tiempo compartido había sembrado un sentimiento cálido en su pecho, seungmin le transmitía seguridad y tranquilidad aunque el probablemente jamás se lo dijera, amaba cada pequeña cosa de el, era inevitable no hacerlo. Simplemente se merecía todo el cariño de este grande mundo.

Mientras Nadie Nos Vea.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora