Cinq

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Regresó y se sintió un verdadero genio después de tomar correctamente cada autobús sin tener que preguntar y también, cuando vio las marcas que había dejado en cada árbol del lado izquierdo, yendo entre medio de los árboles marcados y los que no. Esta vez se había asegurado de esconder bien su barra de cereal y sin tantos nervios como el día anterior Jungkook pudo usar su celular para tomar algunas fotos del lindo paisaje mientras avanzaba, e incluso lo hizo cuando llego de nuevo a esa bonita cabaña.

Ni siquiera lo notó, pero estaba sonriendo por la emoción que le cosquilleaba el estómago por haber encontrado esa cabaña sin mucho problema y estar cerca de ese increíble chico de nuevo. Tenía tantas ganas de volver a verlo que se cuestionaba porque, pero enseguida recordaba cosas como su valentía, su capacidad, su habilidad y sobre todo, su belleza.

Pero claro, él nunca le iba a dejar las cosas tan fáciles.

Y le confirmó eso después de que Jungkook busco por la cabaña desde afuera, golpeando la puerta y algunas ventanas bien cubiertas por cortinas, proseguir con el lago e incluso subiendo el desnivel sin alejarse de la montaña de rocas.

Ah, ese chico era tan misterioso que solo le daba más ganas de encontrarlo.


Entonces pensó en como lo había logrado el día anterior.

El intentando encontrarlo, muchos árboles iguales, un puma amenazado y un chico tigre llegando a protegerlo.

Así que... ¿Por que no volverlo a intentar de esa manera?

De nuevo inicio ese camino sin rumbo, solo que ahora caminando con una sonrisita traviesa en el rostro y pasos seguros. Llegó esa parte en la que no supo que camino elegir pero para hacer las cosas más rápidas hizo un poco de ruido, lo que significo ponerse en pose de vieja jorobada y empezar a decir "¡Mishi, mishi, mishi~!"

Sí, eso no le funcionó demasiado bien en un principio.

Ayer no había sido el único que se había llevado un susto y seguro después de eso el gatito ya no quería volver a intentar jugar con el ratón.

Pero Jungkook no se rindió.

Como no funcionó en ese punto se introdujo más en ese bosque en el que ya estaba perdido, pero seguro de que su Ángel llegaría de nuevo para salvarlo. Y fue gracias a esa tenaz perseverancia que lo consiguió.

De nuevo vio a ese puma, aunque no tenía idea de si era el mismo pero vio las mismas ganas de atacar que tenía el de ayer. Eso lo hizo sonreír.

Su Angelito rayado vendría por el.

No se confío cuando tuvo a ese animal tan cerca y aunque creía en ese Ángel, temió un poco y por sí acaso se quedo muy quieto. De nuevo fue fijado como una presa y escaneado por esos peligrosos ojos felinos. Jungkook apretó los labios cuando el puma empezó a avanzar hacia el y todavía no había señales de un salvador. Ojeo sin moverse a los alrededores que sus ojos alcanzaron y nada.

Ok, eso lo preocupó.

Dio un pasito hacia atrás con cuidado. Al menos ahora después de haber superado la primera supervivencia su cuerpo no estaba paralizado. De nuevo esperó, esta vez se pellizco el labio. Todavía nada.

¿Sera que golpeo la puerta demasiado despacio y en realidad él esta durmiendo en su casa?

Oh, mierda... Ahora sí era su fin.

De nuevo esa resignación a la muerte en menos de un día. Jungkook se tapó el rostro con ambos brazos cuando ya sentía esos colmillos en su cuello al ver a ese puma dirigirse velozmente hacia el después de rugirle.

⌱ Lágrima de Tigre. |  𝑱. 𝑱𝒌 • 𝑲. 𝑻𝒉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora