⌱ Lágrima de Tigre. | 𝑱. 𝑱𝒌 • 𝑲. 𝑻𝒉

Vingt-Quatre

Aunque no fue en el primer puesto de bebidas que pararon, Jungkook consiguió comprar la bebida que ambos necesitaban después de tanta diversión y después de divertirse un rato más, Taehyung le recordó que tenia una vejiga con un límite. Jungkook lo llevó a los baños y Taehyung le pidió que esperase afuera. Como en todo baño público cuando entro no estuvo solo, de los cinco cubículos que había dos estaban ocupados, aunque uno se libero apenas el entró.

Taehyung fue al último de todos y se tomo su tiempo para hacer sus necesidades. Cuando quito la traba para salir y abrió la puerta se dirigió al lavabo en el que otro chico se lavaba las manos, en quien no se había fijado... Hasta que le hablo.

— Oh, vaya. El Hyung de Jungkook. ¿También bebiste mucho?

Taehyung sintió sus pelos ponerse de punto cuando ese mal sentimiento le revolvió el estómago y lo vio en el reflejo del espejo frente a ambos. Hanbin, ese chico que molestaba a Jungkook le sonreía de una manera que no le agradaba, y ahora veía su rostro de una manera más clara al no tener su antifaz.

Vaya.

Jungkook se juntaba con pura gente atractiva como él.   

Queriendo calmar esa mala sensación que lo había estado atormentando durante días Taehyung solo volvió a mirar sus manos, las cuales comenzó a lavar, ignorándolo. Eso le molesto al entrometido.

— ¿Eres muy callado o muy estúpido? — Escupió queriendo rebajarlo.

Taehyung cerró la canilla brusco y tensiono la mandíbula, habiendo tenido una mala elección de palabras con alguien de carácter fuerte.  

— ¿Y tu eres muy atrevido o demasiado interesado? — Lo atacó tanto como él.

— Oye. — Gruñó enojado por su elevación de tono.

Como de costumbre, Taehyung alzó la guardia frente a un humano. Ese chico que se le acercó peligroso haciéndolo añicos con la mirada, pero Taehyung también tenía una mirada peligrosa que podría matar.

— Para tener un tamaño tan pequeño eres valiente.

De nuevo le jodian la existencia con eso de la altura.

Media 1.78, no era para nada enano solo que ellos eran muy altos.

— No me dejo pisotear por bravucones. — Siguió con su postura firme. — Tengo mi propio carácter.

— ¿Ah, si? — Sonrió hipócrita. — ¿Te crees muy rudo, flacucho?

Taehyung quiso reírse por ese adjetivo. El podía ser más alto pero estaba muy seguro de que un niñato de ciudad no podría igualar su fuerza. 

— Entonces defiéndete.

Tomándolo como un don nadie por su pinta, ese confiando chico lo atacó tomándolo por el cuello. A lo que Taehyung reaccionó al instante. Con sus ojos resaltando en los huecos del antifaz al volverse más claros, Taehyung se conectó con ese animal que se sentía imponente en su interior y levantó la mano, esa en la que sus peligrosas garras se asomaron para cortar el pecho de esa amenaza. 

— ¡Ah, mierda! — Voceó cuando su camisa fue desgarrada.

Gruñendo a lo bajo, Taehyung observo en libertad como se retorció del dolor apoyándose en la puerta de un cubículo. Sentía su pecho subir y bajar pesadamente por la rabia y la mala sensación que se sintió más aliviada al dañarlo. Pero por suerte para él, antes de que todo se le saliera de las manos, llegó él. 

— Hyung, ¿Que...?

Impactado, manteniendo sus ojos bien abiertos, Jungkook se quedo sin habla cuando entro rápidamente en el baño al oír el escándalo desde afuera, encontrándose con Hanbin lloriqueando y Taehyung luciendo una clara molestia.