⌱ Lágrima de Tigre. | 𝑱. 𝑱𝒌 • 𝑲. 𝑻𝒉

Epilogo

El bosque. Uno de los lugares más hermosos y reconfortantes, que bajo todo ese verde sanador podía ocultar los mil y un peligros que tenía. 

Pues allí, en uno de los bosques más hermosos corría un gran peligro, un intimidante... ¿Gatito?

— Sí eres alérgico al pelo de conejo, ¿Por que te acercas?

Como todo un padre regañón, Jungkook negaba con la cabeza mientras acariciaba el lomo de ese tigre sentado, teniendo un ataque de estornudos por haberse acercado a un conejito con el que quería jugar, estando algo mareado.

— Es que JooHan quiere un conejito, y quería dárselo.

Se acongojo, absorbiendo fuerte por la nariz esos mocos de la alergia que consiguió calmar. Se limpio con su antebrazo, sentado en el suelo con las piernas extendidas en diagonal, habiendo regresado.

— JooHan sabe que su papá es alérgico a los conejos, y le prometimos un perrito.

Encargándose de él, Jungkook lo ayudó a levantarse. La llegada de un nuevo miembro y sus veintiséis años lo había hecho madurar, e incluso a veces parecía el mayor. Cuida de ese peligris hasta sentarlo al borde del río que estaba a su lado, dejando que sus pies mojados como en los viejos tiempos se refresquen un poco mientras se sacaba la picazón de la nariz.

— Debe ser pequeño, así se asimila a un conejito.

— ¿Qué te parece un Pomerania? — Propuso, sentándose a su lado. — Son una bolita de pelos adorable.

— No suena mal, Petit. — Sonrió satisfecho.

Jungkook sonrió, y apoyo sus manos al lado de sus muslos. Fijo la mirada en ese río en el que movió los piecitos de un lado al otro y pensó. Pensó en eso que llevaba pensando hace días y todavía lo ahogaba.

— Oye, cariño. — Llamó un tanto inseguro.

Enseguida Taehyung le brindo su atención.

— ¿No... Extrañas Corea?

Jungkook se pellizco el labio cuando se atrevió a soltarlo, y sus piecitos se movieron con más nervios en el río. Esperaba algo malo de cualquier persona normal, pero espero lo más reconfortante de su hermoso ángel.

— Siempre.

Taehyung sonreía melancólico al levantar la mirada al cielo, y pensar ese lugar en el que había vivido toda su vida, en ese bosque que era su amigo y en sus casi ocho años lejos de ella, sin poder verlo como algo malo.

— ¿No has pensado en... Regresar?

Esa fue una pregunta que lo golpeó un poco más.

— No lo sé, Jungkook...

Decaído Taehyung agacho la cabeza, mirando sus pies en esa fresca agua y pensó al suspirar.

— La hecho de menos pero, ¿Qué tengo yo en Corea?

Esa pregunta lo tomo por sorpresa y sobre todo esa mirada que también le preguntaba. Agrando los ojos y trago duro.

— A-Ah, tienes razón. — Carraspeo repentino, enseñándole una ligera sonrisa.

Taehyung encurvo las cejas, escaneando esa repentina reacción.

— ¿Qué me ocultas? — Atacó conociendo a ese castaño.

— ¿Q-Que? — Aclaró la garganta, torpe. — No te oculto nada, amor.

— No me mientras, se te enrieda la lengua, Petit.

Soltando una risa nasal Taehyung paso su dedo por sus labios, haciendo un pequeño "Bup" y se acomodo a su lado, haciéndolo bufar por lo malo que era intentando ocultarle algo.