Capítulo 6: Codicioso

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Entraron, se quitaron la capucha, y sin pensarlo mucho se sentaron en una mesa que estaba al fondo, lejos de otras personas. Nadie notó la presencia de ambos, y cada quien siguió con lo suyo.
El bar era bastante decente, los clientes eran de clase media baja, y el lugar estaba limpio para la sorpresa de Derek.
Alphonse escogió un buen sitio donde beber.

—¿Qué van a ordenar? —preguntó una mujer al acercarse a su mesa.

—Deme una botella de vino, del más añejo y dulce que tenga, y dos vasos. Los mejores tragos que tengan Brandy, Whisky escocés y Vodka—contestó Alphonse.

—Algo más.

—Eso sería todo.

—En unos minutos se los traigo—terminó de anotar el pedido, se dio la vuelta y se fue.

—¿P-Por qué pediste todo eso? —exclamó Derek, impactado y con una expresión preocupante.

—Tranquilo, por eso sólo pedí uno de cada uno. Quiero probar todos los que pueda—respondió con una sonrisa—Y esos me llamaron la atención. Estuve investigando un poco sobre las bebidas alcohólicas, su elaboración y el porcentaje de alcohol, y lo que pedí fue lo que más me dio curiosidad por probar.

Derek lo observó con los ojos entrecerrados, y se quedó pensativo.

—Dejemos de último el vino, y cuando diga que es suficiente lo dejarás, sin ningún pretexto. Si sobra vino nos llevamos la botella.

—De acuerdo—dijo felizmente.

Discutieron el viaje de regreso, y sin sentir el pasar del tiempo, la mesera llegó con las bebidas.

—¿Qué quieres probar primero? —dijo Al.

—Mm....creo que probaré el que tiene Whisky—y miró el pequeño vaso con el líquido.

Al tomó un vaso y vertió la mitad en el. Un pequeño trago quedó en cada recipiente.

—Bien, hasta el fondo y de un sólo trago, sin toser. No quiero pasar vergüenza.

—Ten por seguro que pasaremos vergüenza, de una u otra forma—comentó Derek con una ceja levantada.

Levantaron los vasos, y lo bebieron de un sólo trago.

Aunque el alcohol estaba mezclado con jugo de diversas frutas, la bebida quemó sus gargantas, dejando una sensación seca, ardorosa y caliente. Soportaron las ganas de escupirlo, aguantaron la tos, y sus rostros se deformaron la tragarlo.

—Qué cosa más horrible—se quejó Al, aún con el gusto en la boca.

—Sí, realmente no pensé que fuera así de malo. Tomemos un descanso antes del siguiente trago.

—Está bien.

—¿...Y? ¿cómo te sientes?

—Mm....—Al se concentró en lo que sentía, y dijo—Un poco caliente, y tal vez ligeramente mareado, es decir, siento el cuerpo bastante relajado. ¿Y tú?

—Igual. Aunque creo que estoy un poco más "relajado" que tú. No sabía que él alcohol surtiera efecto tan rápido.

—Yo tampoco.

Alphonse acercó su silla a la de él, estando lo más cerca posible, y tomó el que tenía Brandy.

—¿Vamos por el otro?

—Acabemos con esto—dijo Derek, sosteniendo su frente.

Dividieron la bebida, teniendo más el vaso de Alphonse, y se la empinaron.

No estaba tan mal como el otro, y tenía un sabor diferente, aunque seguía siendo bastante fuerte, quemándoles la garganta.

—No le encuentro la gracia a esto—musitó Derek, aturdido por lo fuerte del alcohol.

El músico de la muerte© [Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora