Capítulo 17: Perdóname

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Fijaron la fecha dentro de un mes. Luego de eso sólo esperaron doce días, y el día de la fiesta llegó.

En esta fiesta se presentarían de nuevo los últimos candidatos, es decir: Alphonse, Derek, Dorian y Jonathan. Pero esta vez no se anunciaría al ganador de inmediato, sino que el representante de la reina lo pensaría por al menos un mes y luego haría un anuncio real.
La reina no debía escuchar a los músicos en ningún momento, sino hasta el día de su aniversario, según ella para ser una agradable sorpresa. Confiaba plenamente en su asistente personal, quién también era su representante en estas cuestiones.

Derek y Alphonse se arreglaron para el evento, pero ninguno estaba nervioso. Lo último en qué pensaban era en si serían escogidos o no. La única razón por la que seguían era porque no había vuelta atrás. Y en cambio, se sentían ansiosos porque dentro de poco iban a fugarse. Por fin iban a vivir en paz...

Al entrar, Derek y Alphonse observaron personas que iban y venían en el inmenso salón, de porte fino y elegante. Seguramente eran personas muy importantes, pero a ellos no les importaba conocerlas. Algunos quisieron hablar con ellos, pero la gran mayoría estaban ocupados hablando entre sí, más preocupados por crear lazos y "amistades".

—Alphonse—llamó una suave voz detrás de ellos.

—Oh, Catelyn, me alegra mucho verte por aquí—dijo Alphonse al darse la vuelta.

—A mí también me alegra verte—se acercó, y mirando a Derek sonrió saludando—¿Dónde están los señores Tzara?

—Al entrar comenzaron a hablar con los invitados de inmediato. Deben estar por ahí.

Catelyn miró hacia todos lados, extendió su abanico, y acercándose más a ellos, susurró con preocupación:

—Imagino que aún recuerdas que seguimos...comprometidos. ¿Estás seguro de que tienes un plan?

—No te preocupes—dijo confiado.

—Lo dices tan despreocupado, pero...—lo miró con desconfianza y dijo—¿Cómo estás tan seguro de que funcionará?

—Porque...—se acercó a su oído y dijo—Vamos a fugarnos.

—¿Qué? —exclamó en voz baja, abriendo sus claros ojos de par en par.

"Dijo ¿vamos?"

Miró a Derek y entendió más o menos de lo que hablaba.

—Lo llevamos planeando desde hace mucho tiempo. Todo saldrá bien—dijo Al con una sonrisa.

—Bueno, si todo sale bien hay una gran probabilidad de éxito, casi por completo—dijo seriamente—Bien, lo admito, es un buen plan.

—¿Verdad que sí? —dijo orgulloso—Lo haremos dentro de dos semanas.

—Si necesitan algo pueden pedírmelo.

—De acuerdo, muchas gracias—contestó Derek con una pequeña sonrisa.

—Es un placer ayudar a mis amigos—añadió sonriendo—Les deseo suerte.

Entonces Alphonse la miró detenidamente y dijo:

—Aún me pregunto quién es el afortunado que robó tu corazón. Por favor, dime quién es. ¿Es un sirviente? ¿algún marqués o príncipe? ¿un plebeyo?

—No te lo diré—exclamó avergonzado y cubrió su rostro con el abanico....

Hablaron un rato más, cuando casi llegó la hora de presentarse. Catelyn charlaba alegremente con ellos, cuando notó a alguien acercarse hacia ellos. Por cortesía ella se despidió y se marchó, dando paso al nuevo invitado.

El músico de la muerte© [Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora