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Capítulo 26. - Alfa y Omega. (Final)

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- M-mamá...

- Hijo mío...

Los ojos de Yibo se pusieron cristalinos, los de la omega, también.

Xiao Zhan soltó el panquecito de la canasta mientras miraba en silencio sus expresiones, él sabía toda la historia ahora, sabía todo de su Yibo y este sabía todo de él también, toda su vida. Abrazó a su alfa y lo impregnó con feromonas para tranquilizarlo, pudo sentir como el enorme y hermoso corazoncito de su amado se había acelerado.

Yibo lo abrazó agradeciéndole la acción y sin dejar de ver a su madre, sonrió por un segundo tratando de asimilarlo.
Ella se acercó a su hijo pero antes miró a Zhan, no sabía si debía, si tenía ese derecho al menos, pero Xiao Zhan adivinando los deseos de su alfa, aflojó el agarre un poco, sin embargo Yibo no lo soltó, no quería que su omega se alejara, era su mayor soporte ahora.

Incluso si Yibo ya no era el niño que esperaba a su madre, sintió una pequeña calidez al volver a verla, aunque solo fuera un momento, él siempre deseó volver a verla y ahora tras tantos años, finalmente estaba pasando. No sabía como sentirse pero su corazón latía con fuerza.

- Bo di... - Dijo suavemente y soltó más feromonas, la madre de Yibo también, eso hizo que Yibo finamente extendiera su brazo hacia ella sin soltar a su omega.

- Pe-perdóname hijo... - Lo abrazó, un par de segundos luego, Yibo también lo hizo con su brazo mientras que con el otro mantenía abrazado al pelinegro.

Madre e hijo se abrazon con Zhan incluido, este quiso soltarse pero Yibo no lo soltó en ningún momento, Zhan se removió un poco incómodo luego de un par de minutos.

- B-Bo di... me están aplastando... - Se quejó con suavidad, no había querido hacerlo pero no quería aplastar al lobito en su vientre por lo que Yibo finalmente lo soltó separándose de los omegas, él tampoco quería dañar a su hijo.

Una vez que Zhan se separó, fue a Ziyi para indicarle que pusiera el letrero de "cerrado" y cerrara la puerta del lugar.

Yibo suspiró al verla y se puso un poco serio, estaba expectante a lo que ella tenía que decirle. Zhan y Ziyi permanecieron no muy lejos, ni Zhan ni Yibo querían separase, ambos necesitaban de su confort en ese momento. El lobo de Yibo se sentía un poco extraño, estaba más reacio a la mujer.

Ella sabía que le debía una larga explicación a su hijo, incluso si Yibo solo la escuchaba pero no la aceptaba de nuevo en su vida, ella lo respetaría, cualquier decisión era de su hijo, lo único que quería era poder decirle que si lo amaba a pesar de haberlo abandonado, no fue la mejor de las madres con él, pero intentaba serlo con su hijo omega.

Zhan y Ziyi decidieron ir por algo de comer ya que Zhan estaba teniendo algunos antojos muy específicos, además este quería alimentar a su alfa, se había pasado ya la hora del almuerzo. Zhan sabía que debía darle su espacio a Yibo, pero el omega necesitó llevarse la chamarra del alfa para sentirse bien con su olor. Se envolvió en ella y un poco inseguro salió en compañía del alfa adolescente.

Para cuando ellos volvieron, la mujer estaba yéndose, estaba feliz y más tranquila, sin embargo debía respetar los deseos de su primogénito. Yibo no podía simplemente aceptarla, la amaba y siempre la había esperado. La mujer se había explicado, pidió perdón y le dijo lo orgullosa que estaba de él, lo mucho que lo amaba. El alfa sintió calidez en sus palabras y olor pero él necesitaba tiempo, su lobo debía adaptarse.

Pero no importaba el tiempo que le tomara, ella esperaría a que su amado hijo alfa, estuviese totalmente listo para meterla por completo a su vida, al menos la mujer tenía la certeza de que su hijo era muy feliz y estaba recibiendo todo el amor que siempre mereció tener.

Dualidad (YiZhan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora