Mis Shots Favoritos 🥰

• Tu Intención Es Mi Regalo •

¡Doppo Chefsitooooooo!

Aiñ~ amo mucho este capítulo y al Doppito bonito que hay aquí.

Si están siguiendo la week, déjenme decirles que les voy a dar un spoiler... el capitulo del día 4 es de Doppo. (guarden el secreto xd)

Y mientras se publicar, por lo mientras, disfruten a este tierno y adorable Doppo 💕✨

▪︎☆▪︎

—Oh, ¿Qué tal te fue Doppochin?

—Ah, bien. ¿Por qué estás aquí?— pregunté desconcertado pues ya era tarde y Hifumi aún estaba en casa.

—Descansé hoy pues mañana el club estará lleno.

—Que cosas... a mi me dieron el día libre mañana.

—¡Que buena noticia! ¿No? ¡Podrás pasar San Valentín con ______!

—San Valentín...

—¿Qué? No me digas que no la llamaste para salir.

—Ahora vuelvo.— me dirigí a mi habitación y saqué mi celular para poder llamarla.

Lo que tenía planeado para mañana, era dormir y no despertar hasta el otro día, pero, si ella dice que si, puede que...

—¿Doppo? ¿Que pasa?— dijo con un notorio tono adormilado.

—Estabas dormida, ¡lo siento, lo siento! No me di cuenta de la hora, en serio...

—Jaja, tranquilo. Sabes que puedes llamarme cuando quieras y a la hora que sea. Dime, ¿qué pasa?

—Yo... bueno, mañana voy a descansar y, quería saber si te gustaría venir a... ¿cenar conmigo?

—¿Mañana? Claro que sí..

—¿En serio? ¡Genial! Ah... entonces te veo... en la noche, ¿sí?

—Nos vemos en la noche. Oye...

—¿Si?

—Te quiero, Doppo.

—Y-yo también te quiero— dije con una sonrisa y colgué.

Aunque, también escuché una risa.

—¿Qué haces ahí, Hifumi?

—Sólo quería ver que le decías a tu novia. Me alegra que te estés desenvolviendo con ella.

—Es una gran chica.

—Si. ¿Y qué tienes pensado hacer para ella mañana? Piensa que incluso tienes el apartamento para ustedes solos mañana.

—No planeo hacer nada de lo que te estás imaginando. Pensaba... hacerle algo de cenar y, un pastel. ¿Es difícil hacer un pastel?

—Para ti que nunca has hecho uno, puede que sí, pero tendrás a tu buen amigo Hifumin que te podrá ayudar. Pero, eso será mañana, ahora vamos a cenar.

         

(...)

        

—Doppo, ¿seguro que no quieres ayuda?

—¡No Hifumi! ¡Yo puedo solo!

—Pero... es como la tercera vez que tiras la mezcla del pastel.

—Y es como la enésima que tú me preguntas que si quiero ayuda. ¡Quiero hacerlo por mi mismo!

—Esta bien, entiendo que lo quieras hacer tú pues es para tu novia, perdón. Me... me iré a alistar para ir al club, por si... se te ofrece algo.

La cena estaba lista, lo único que faltaba era el pastel. Hifumi hace un rato se había ido y me sentía más relajado.

Miré el reloj y, a pesar de que no quedamos en una hora exacta, sentía que ella estaba por llegar.

Estaba batiendo la mezcla cuando el timbre sonó. Levanté la parte superior de la batidora, pero, a algo en mi cabeza no se le ocurrió apagarla primero, por lo que la mezcla salió volando.

El timbre volvió a sonar y después de limpiar mis manos con un trapo, fui a abrir. Era ______. Venia vestida con ropa casual y un regalo entre las manos.

—P-perdon por recibirte así, y-yo estaba...

—¿Qué hacías?— preguntó mientras entraba al departamento.

Entró a la cocina y yo la seguí.

—Q-queria hacerte un pastel como regalo de San Valentin pero, no estaba saliendo bien.

—Doppo~— dijo con un cierto tono de ternura y me miró. Soltó una risa y se acercó a mi. Pensé que besaria mi mejilla, pero en realidad la lamió, logrando ponerme nervioso. —¡Mmm! Iba a quedar delicioso.

—Perdón. Quería que fuera un buen San Valentin para ti.

—Que hayas intentado hacer un pastel para mi, fue el mejor regalo de San Valentín de la vida. Quiero abrazarte pero, mejor ve a cambiar tu ropa que se manchó mientras yo, intento hacer otro, ¿sí?

—Esta bien— respondí girando sobre mis pies dispuesto a irme, pero me detuvo. —¿Qué sucede?

—No te saludé— y se acercó a besarme. —Ahora si, vete a cambiar y regresas a abrir tu regalo.

Obedecí y me fui a mi habitación. Entré al baño para limpiarme y pude ver que mi cara estaba llena de mezcla, excepto el lugar donde ______ había lamido. No pude evitar sonreír recordando la acción.

Opté por bañarme y ponerme algo de ropa comoda, después de todo, estar en casa con ella me hacía sentir cómodo de cualquier manera.

Volví a la cocina y la encontré recargada en la barra de la cocina. Me acerqué a prisa y la rodee con mis brazos tomándola por sorpresa, pero aún así me abrazó también.

—Perdón por arruinar tu regalo. Terminaste haciéndolo tú.

—¡Deja de disculparte! Tú intención fue mi regalo.— se separó de mi y me besó. —Ven, te daré tu regalo.— tomó la bolsa con la que llegó y me lo dio. —Feliz San Valentín.

—N-no puedo recibirlo. Arruiné tu regalo y no...

—Doppo, no te lo iba a dar porque tú me dieras algo. Aún así te lo quería dar. Vamos, abrelo.

Tomé el regalo un poco temeroso, y lo abrí con sumo cuidado, dentro había una bufanda.

—Sé que el invierno está por terminar pero, en año nuevo mencionaste que te gustó mucho el perfume que usé y, bueno, quizá sea un regalo estúpido, pero...

—¡Claro que no! E-es perfecto— inhale un poco de la escencia y la abracé —Te podré tener más cerca, ¿no es así? ¿Por eso lo hiciste?

—Si. Te amo Doppo, en serio.

—Y yo te amo a ti— dije antes de besarla y que el temporizador del horno sonara.