Parte 92 - Alerta de virus

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Uno de los estudiantes recién contratados arregló su corbata por centésima vez para estar presentable en la reunión, todos tenían la impresión de que los empleados de los niveles superiores eran aterradores. 

-¿Alguien sabe quién nos ha convocado?

-¿Creen que sea el jefe?

-¿Cuál "jefe"? Cada unidad tiene un director...

-¿Se imaginan que llegara "El" jefe?

Tres jovencitos tragaron saliva, no podrían evitar temblar si por un azar del destino entraba en la oficina nada más y nada menos que el gerente general.

-Pero no tendría por qué bajar, él nunca baja- Uno de ellos intentó decirlo en tono esperanzador.

-No, no, yo he escuchado que a veces baja para supervisar.

-¿¿Qué??

El grito en la sala de reuniones hizo que Minki se acercara.

-¿Qué sucede? ¿Se cayó algo?

-¡Minki!- La bandada de jovencitos arrugaba su traje- ¡Minki! ¿Tú has trabajado con... el gerente? ¿Cierto?

-¿Por qué hablas en voz baja?- Minki intentó soltarse pero los chicos se aferraban a él.

-¿Crees que él venga a la reunión?

-No creo... Su agenda está muy ocupada.

Los chicos soltaron su ropa y suspiraron aliviados, Minki arregló un poco el cuello de su camisa y los vio con una ceja alzada.

-¿Les da miedo el gerente?

-¡No lo digas tan alto!

Minki sonrió ampliamente.

-¿Por qué le tienen miedo, acaso no los entrevistó?

-¡Nos da miedo justamente porque nos entrevistó!

-Tal vez solo necesitan pasar más tiempo cerca de él- Minki habló confiadamente.

-¡Claro que no, es el hombre con más influencia en Corea! ¡Si nos equivocamos al hablar se acaba nuestra carrera!

-Están exagerando.

-¿Cómo puedes hablar tan tranquilo?

-Porque lo he visto ¿Si les cuento una historia se tranquilizarían?

¡Papá! ¡Papá! 

El caballero de labios cerezas buscó a su hija, que estaba de pie con los brazos alzados en la sala frente a la televisión.

-¿Hye?

-¡Papá levanta los brazos! ¡Ya!

El hombre dejó su bolso a un lado y le pidió a Minki, en ese momento asistente sustituto del gerente que siguiera el juego. Minki así lo hizo, su confusión se desvaneció al ver al personaje de cabello puntiagudo en el programa.

-¡Gokú nos necesita!- Los ojos de la niña brillaban intensamente, decidida a ayudar al guerrero saiyajin.

Un sonido en la puerta principal hizo que la pequeña girara el rostro y abriera la boca, con sincera sorpresa y emoción.

-¿¿Appa?? ¡¡Appa ven!! ¡¡Ven!!

El caballero de traje se quedó un momento atrás, atendiendo la llamada de un cliente en el exterior, la mala cobertura hizo que se interrumpiera y esperando que no marcara nuevamente entró a casa, pero no terminaba de quitarse los zapatos cuando el sonido le indicaba que debía atender otra vez. Vio a la distancia a su asistente, a su esposo y a su dulce hija con las manos arriba. ¿A qué jugaban en esta ocasión? 

Cherry «KookTae»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora