Cherry «KookTae»

Parte 23 - Dalia

Jungkook estaba intranquilo, reconoció al hombre de saco beige que llegó por Taehyung, y no podía creer que Jimin no estuviera ahí, ese otro amigo del castaño nunca fue de su agrado.

-¿Taehyung?- El caballero de cabello corto y mascarilla se acercó a la camilla.

El menor, desde afuera, no quería espiar pero tampoco lo pudo evitar, con solo dar un paso al frente y girar un tanto la cabeza pudo ver a Taehyung, recibiéndolo con un abrazo. Giró y empezó a caminar, molesto, y deseando golpear a alguien en específico, a sí mismo por permitir que todo llegara a esto, ahora Tae se iría con él.

El chico, aún abrazando a su amigo pudo verlo alejarse, el pelinegro seguro reconoció al ex instructor voluntario del club de teatro, jamás pudo acercarlos entre sí, lo cual, en su momento lo intrigó porque a Jimin lo aceptó sin ningún problema.

-¿Puedes caminar?

-Dame una mano.

-¿Quieres que te cargue? Puedo hacerlo.

-No.

Su antiguo instructor terminó dedicándose a los medios, trabajaba como presentador de un programa popular así que no contaba con mucho espacio en la agenda para reuniones sociales, la mitad del tiempo estaba en el canal, y la otra mitad preparándose para trabajar, pero mantenía contacto con algunas de sus amistades más comprensivas, y quería especialmente a Taehyung por siempre animarlo.

-Vamos, dejé el auto en la calle contigua.

El hombre era mucho más alto que Tae, así que debió inclinarse para poder prestarle su hombro, pasó al lado de Jeon Jungkook cuando llegó al lugar pero el menor no quiso hacer contacto visual, ¿Ese chiquillo todavía se negaba a saludar a su mayor? Era un poco difícil comprender por qué Tae aún era amigo de ese inmaduro, pero al menos se estaban yendo sin él, no pensó que eso sucedería.

El profesor Michael recibió una llamada de Holly, su delegado de reemplazo tuvo un accidente, Soon le dijo que vio pasar a Jungkook entre los primeros del recorrido más largo, pero ya habían llegado y él todavía no se presentaba a firmar su asistencia, Tan, aún a su lado esperaba ver a Kim Taehyung nuevamente. Había solo una cosa con la que distraerlo, tendría que fingir interés en la carrera, e ir a trotar con él.

Frente a un edificio de oficinas, Hobi y Jimin esperaban una confirmación, inseguros de si era el lugar donde los citó Dalia, el padre de ella trabajaba ahí y le ayudó a obtener un empleo como secretaria, llegaron porque accedió a reunirse con ambos y decirles lo que sabía de Emma. Desde la ventana en un piso superior les devolvía la mirada, y respirando profundo envió el mensaje a los chicos, "Sí, los veo, suban".

La cinta con escenas del pasado corrió en su mente, tener que confesarse con Jimin no le hacía gracia, pero si podía hacer algo contra Emma, valdría el sacrificio.

Los debates pronto darían inicio, un nervioso Jin miraba hacia el público, en esta ocasión los ubicaron al centro de una cancha techada, las graderías llenas, demasiados rostros extraños se dieron cita al lugar, no quería estar ahí. Recibió una palmada en el hombro.

-Lo haremos bien.

Namjoon a su lado, se ajustó los lentes y le dio una pequeña sonrisa. Jin respiró profundo, encontró entre esas mareas de personas un faro, el cabello de Yoongi, los profesores no podrían haber adivinado que de alguna forma su mentira resultó ser verdad, Min llegó a apoyar a los chicos, parcialmente obligado, porque de no ir Sik amenazó con aparecer en su casa para "cuidarlo" y por ningún motivo quería pasar un día encerrado con él.

El rector de la universidad tomó un micrófono e inició el discurso, "Las sociedades humanas se pueden observar a través de diferentes ópticas, las podemos estudiar desde la causalidad, o intentar dilucidar de dónde proviene realmente cada fenómeno que tiene lugar en su interior, ¿Quién si no la academia, si no los jóvenes para hablar al respecto y para actuar en consecuencia? Es para nuestra universidad un verdadero honor el recibir a estas mentes brillantes de todas partes del país esta mañana, y figurar en la historia como sede de este encuentro"