Parte 2- ¿Estamos... bien?

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Desearía que viviéramos en un VHS
Borraría las cosas que dije y las que probablemente diré...

La melodía sonaba a la distancia, desde el radio de algún vecino enamorado, Tae sentía el peso de un brazo sobre su cuerpo, se sentía como flotando, sin comprender muy bien dónde estaba, ni cómo había llegado ahí, ladeó la cabeza con lentitud y sus sentidos, que de a uno iban despertando le permitieron inhalar el curiosamente fresco y dulce aroma que emanaba del cuerpo a su lado, de cuya respiración apenas se volvía consciente, escuchar ese sonido del chico que plácidamente dormía a su lado le hizo sonreír. Se sintió invitado a abrir los ojos, y enfocando la mirada se topó con el rostro semi enterrado en la almohada de Jungkook, que dormía boca abajo, apoyado en Taehyung cual si fuera una almohada.

A juzgar por la ausencia de luz en su ventana, y con la conciencia más despierta, atento a los sonidos del exterior Taehyung había deducido que sería entre diez u once de la noche, pero no se podía permitir seguir durmiendo, había una voz en su cabeza que le urgía chequear su propio estado físico, al día siguiente había quedado con alguien... Con alguien a quien no se le escapaba nada.
Había dicho lo que había dicho con Jungkook, pero de eso a gritar a los cuatro vientos que acababa de perder su pureza con un chico con el que nunca había salido era distinto. Podían ser amigos, pero los amigos no hacen esas cosas, ellos no estaban en una relación, de cierta manera era vergonzoso de admitir.

Intentó incorporarse, pero el pelinegro, al sentir la intención del cuerpo ajeno había endurecido su agarre, imposibilitando al pequeño chico de salir de la cama.
-¿A dónde vas... Tae?- Dijo, con un tono grave, propio de él al recién despertar.

-Yo... Necesito ir al baño- respondió Taehyung.
-¿Necesitas ayuda?- Replicó Jungkook, dejando con una cara de confusión a Tae... ¿Por qué habría de necesitar ayuda para llegar al baño de su propia casa?
Negó, casi haciendo un puchero y se levantó de la cama, cayendo nuevamente en el colchón cuando un dolor como nunca antes había sentido le atacó la espalda baja.

¿Qué mierda?

¿Qué estaba pasando? Sentía que de no recostarse se partiría por la mitad. Una lágrima de dolor se asomaba a su ojo derecho y el labio inferior de su boca entreabierta comenzaba a temblar, iba a llorar, Taehyung era un mimado, y no podía con el dolor que estaba experimentando.

Los recuerdos de lo que habían hecho sobre esa cama de a poco volvían a su cabeza, pero en lugar de ser agradables se vio tentado a maldecirse. Jungkook
... Él estúpido de Jungkook lo había jodido y se había vuelto a dormir.

-Eh, EH!

Jungkook conocía la intención de Taehyung al querer levantarse, sabía que era una prueba y fingió no notar nada, ni eso, ni el cuerpo de Taehyung cayendo de nuevo en la cama, ni su respiración agitada, ni que podría jurar que escuchaba los pensamientos desordenados dentro de la cabeza del marrón.
No es que no quisiera lidiar con ellos, solo no sabía cómo hacerlo, así que pretendía estar demasiado adormilado para responder.

-¡Jungkook!

No. No voy a abrir los ojos, si no lo veo no existe. Se decía Jungkook.

- Tú... ¿Sabías que esto me iba a pasar?

Ugh, Jungkook tragó saliva y se aclaró la voz, solo no estaba seguro de qué decir.

-¿Y aún así fuiste con todo sobre mí? ¿Sabiendo que no había hecho esto en TODA MI PUTA VIDA?

Jungkook se sentía sinceramente mal por el dolor que hacía a su dulce Tae gritarle de esa forma. Pero al mismo tiempo los reclamos le alimentaban el ego, le recordaban que nadie antes había estado con el chico que ahora lagrimeaba de esa manera, y era también la primera vez que le hacía drama a alguien después del sexo.
Se decidió a atesorar esos momentos y miraba al rostro de Tae (quién seguía gruñendo) de forma impasible y casi esbozando una sonrisa.

-No quiero hacer esto más.

¿Qué? Esa última frase le sacó de su burbuja mental.

-Tae, escucha- Su pequeño se había recostado de lado y acariciaba su espalda baja, había dejado de gritar y ahora se conmiseraba.

Jungkook se acercó a él y le dejó un beso  sobre el hombro.

Tae sintió un cosquilleo cuando los labios un tanto húmedos de Jungkook rozaron con su piel.

-Tae... Iré por medicina, ¿sí?

El chico no respondió. En verdad estaba pensando no tener sexo jamás en su vida otra vez, la punzada de dolor le hacía casi inmune a la actitud cariñosa del azabache.
Casi.

Pasada media hora Jungkook le había hecho beber un jarabe, no sabía qué contenía, pero sospechaba eran calmantes, porque se sentía más tranquilo, pero aún adolorido.

Desde la cama escuchaba el sonido de platos en la cocina, ¿qué estaba haciendo Jungkook?
No era el mejor cocinero del mundo así que eso estaba descartado.

Cuando el menor regresó con un intento de merienda (unas tostadas con mermelada y té) casi se le escapa una risa burlona.

-Te veo, y quiero que sepas que lo estoy intentando- Dijo Jungkook con las orejas notablemente sonrojadas.

Tae se removió de la orilla de la cama, haciéndose hacia atrás para dar paso a que el chico se sentara, Jungkook dejó el plato en la mesita de noche y esperó con paciencia a que el contrario se levantara un poco para tomar la taza.

Ambos guardaron silencio.

Tae bebió un poco con pereza, y su mente comenzó a divagar, ¿De qué hablamos normalmente? Dándose cuenta que no se le ocurría una cosa con la que acabar esa situación que se le estaba volviendo un tanto asfixiante. ¿Ya no podremos hablar como siempre? ¿Ahora en lugar de jugar haremos esto? ¿Cuando los chicos nos vean sabrán lo que...? ¿¿lo sabrán??

-No.

La pequeña palabra asustó a Taehyung ¿Lo dije en voz audible? ¿Dije todo en voz audible?

-No... Siempre será así.

¿A qué se refiere? Pensaba Tae con creciente consternación.

Jungkook, aún sentado en la orilla del colchón, dándole la espalda a su amigo ladeó un poco la cabeza, su mirada parecía temblar un poco.

-Me refiero al... dolor

¿Perdón?

-Te-Te irás acostumbrando

Tae no supo más que responder.

El silencio incómodo volvió.

Solo pudo emitir un suspiro y seguir bebiendo... continuó luego con las tostadas y finalmente dijo

-Necesito cancelar mi cita de mañana.


Ojojo ¿Tae tenía una cita?
Nos vemos en la parte 3.

Cherry «KookTae»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora