Sebastian Stan. Chris Evans. |𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒, 𝐈𝐌𝐀𝐆𝐈𝐍𝐀|

9. Sebastian Stan

Contexto. Eso pedía, nada más que eso, un poco de contexto de porque mi celular estaba casi a punto de reventar debido a todas las notificaciones. 
Eran las once de la mañana, yo ya estaba trabajando en un nuevo libro, esperando no perder la inspiración que me había llegado horas antes, pero, ahora, con el teléfono haciendo ruido cada dos segundos, no podía concentrarme. 
Suspiré rendida, ¿qué carajo pasaba? Tomé el celular, lo abrí, y noté que tenía menciones en todo, Instagram, Facebook, Twitter, incluso en mi plataforma de Wattpad me habían mencionado en comentarios... ¿qué? 

No sabía muy bien a donde entrar, ¿qué red social me daría más información de por qué de pronto era tendencia? Quizás Twitter. Pero, aún estaba insegura, igual entré. 
Esperaba que no fuera nada relacionado con alguna filtración de mi nuevo libro, después de todo, había trabajado muy duro, y había luchado enormemente para que nadie supiera que la segunda parte de uno de mis más exitosos libros, ya estaba siendo escrita. 

Cuando entré, no era nada de eso. 
Era algo malo... muy malo. 

—Ay no—murmuré. 

Era una situación algo extraña, que nunca antes me había pasado. Me estaban relacionando a mí, con otro famoso, con otra celebridad. Con Hiddleston. Y no lo podía creer. Sí, yo lo conocía, pero, ¿por qué me estaban emparejando con él? Estaba por investigar aquello cuando me llegó un mensaje de mi hermana, un link. Lo abrí con velocidad. 

¿POR QUÉ ES TENDENCIA?

Recientemente, la escritora ______ ______ ha sido tendencia en las redes sociales al ser emparejada y "shippeada" con el famoso actor inglés Tom Hiddleston. Todo esto, debido a que, un usuario en tiktok, se dedicó a combinar rostros de famosos y crear a sus "hijos". El usuario, creó, a petición de un seguidor, el hijo de ____ y Hiddleston. Esto provocó que mucha gente opinara al respecto, en especial, porque hay personas diciendo que ambos deberían dejar de lado el hecho de que la foto es ficción, y crear a un hijo de verdad. 
Aún no se sabe como ha reaccionado a esto la pareja de la escritora, Sebastian Stan, nuestro soldado del invierno. 
Lo único que podemos decirles nosotros es que, el niño es precioso, y, aunque tiene rasgos de su madre, sin duda alguna, es más parecido al inglés. 

Venía la opción de abrir la fotografía, y dudé en hacerlo, no estaba segura de querer mirar la imagen. Al final, mi curiosidad ganó, y la miré. 
Era verdad, el niño era precioso, tenía un gran parecido a Tom, lo cual amaba, lo conocí hace unos meses, y me resultó una persona muy agradable, sí, tenía algo de mí, aunque, la página tenía razón, se parecía más a Tom. Sonreí un poco, pero, la borré cuando recordé que no me había preguntado todavía sobre la reacción de Seb. 
Suspiré. Miré la foto una vez más, aquello no estaba del todo bien, porque ahora debía enfrentarme yo a la reacción de mi novio. 

—No, no, no. Él no se va a enojar por esto, es solo algo hecho por fan's, no tiene nada que ver conmigo, yo jamás he estado con Tom, ni lo estaría—me repasé en mi mente, con la intención de calmarme a mí misma, porque sí, estaba un poco nerviosa. 

De pronto, mi celular sonó de nuevo, pero, esta vez, era una llamada, una de mi novio. 
Tomé aire, y respondí. 

—¿Hola? 

—Hola, preciosa—saludó, pero, estaba un poco serio—. ¿Cómo estás? 

Trataría de sonar calmada, como si no me preocupara la situación de las redes. 

—Bien, increíble, de hecho, tengo inspiración, y estoy en... lo de mi libro—fijé mi mirada en mi computadora, con word abierto. 

—Que bueno, hermosa. Oye... hay algo de lo que quiero hablarte—me dijo. Y comencé a ponerme más nerviosa. 

Traté de sonar valiente, pero, creo que no lo logré. 

—Dime. 

—Hace poco, mi celular estaba por explotar, y Evans me llamó, dándome una explicación que le pedí por mensaje, ¿y sabes qué?, era por una fotografía de un hijo ficticio, uno tuyo con Thomas Hiddleston, ¿algo que decir? 

Al final, su voz ya no era calmada, o seria. Estaba enojado, y su tono de voz me lo estaba demostrando; una parte de mí también se molestó, porque parecía que estaba culpándome, y yo definitivamente no tenía la culpa de nada. 

—No, no tengo nada que decir, yo no hice la foto, tampoco la pedí. Alguien la hizo, Sebby, ¿qué quieres que haga? 

—Entonces sabías—afirmó—. Y no me dijiste nada. 

Suspiré. 

—Sebastian, acabo de enterarme hace unos dos minutos, antes de tu llamada, Stan. No puedes empezar a hablarme de ese modo, o te juro que voy a colgarte. No es culpa mía, y tampoco de Tom, yo no te hice esto cuando pasó lo mismo con Alejandra, ¿lo recuerdas?, cuando los estaban emparejando, no me puse así. 

Lo escuché suspirar. Por fin, lo había entendido. 

—Cierto, nena. Lo siento, lo siento. Es solo que... no sé, me puse celoso, ¿bien? conozco a Hiddleston, es muy atractivo, lo reconozco, y, creí que, si te gustaba tal vez... pensarías en dejarme o algo así. 

Fruncí un poco el ceño. 
Sebastian era así, a pesar de todo, a pesar de que él era la estrella de cine, tenía ese temor. Como si yo fuera la persona con más pretendientes del universo, lo cual no era verdad, no estaba ni cerca de serlo. 

—Tian, ya hablamos de eso, te amo—recordé—. Solo a ti. 

—Es verdad, solo a mí... ¿quieres saber algo?—hice un sonido de afirmación—, iré a verte. En la tarde, espero tener una tarde de películas contigo, veremos lo que quieras, nena. Te amo. 

—Te amo, Seb. Te veo aquí. 

. . . 

Sebastian llegó antes de lo esperado, de hecho, llegó antes de las dos de la tarde, algo que me sorprendió sin duda. 
En cuanto entró, me dio un beso en los labios, después me abrazó, y comenzó a arreglar todo para ver un maratón. 

—¿Qué película vamos a ver?—preguntó con emoción. 

—La cumbre escarlata, luego Kong, Thor y la serie de Loki—mentí. Miré su rostro, sorprendido y enojado a la vez. Entonces comencé a reírme—. Es broma, amor, veremos algunas de navidad, la verdad tengo ganas de ver El Grinch. 

Soltó una risita, pero fue muy pequeña. Me senté junto a él en el sofá, y nos tapó con una manta. 
Pasó su brazo por mis hombros y besó mi mejilla. 

—Hermosa, lamento haberme portado de ese modo—se disculpó de nuevo—, te amo. 

Sonreí mirando a Sebastian, era de verdad perfecto, y lo amaba sin duda alguna, aunque no tuviera el acento inglés que yo sí y que me encantaba, él por sí mismo era lo mejor para mí. 

—Te amo más, Tian. 

Antes de que la película comenzara, me besó. 

E N D xd.

Por cierto, lo de multimedia es una combinación de mi rostro con el de Tom para crear a nuestro hijo  ajsjsjsjs, sí, se me ocurrió por eso porque andaba jugando a crearme hijos con famosos xdxd, pido perdón mi gente :v 

lxs amo.