Aquí estoy como lo prometí, os traigo la última parte de esta historia y de lo que sería la finalización de este ciclo de historias.
Espero que lo disfrutéis
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Miraba mi reflejo en el espejo, me veía resplandeciente en mi vestido. Gire para verme la espalda donde se abría algo el vestido volví a sonreír. Era un día perfecto, había amanecido soleado y toda mi familia se había reunido. Escuché como alguien abría la puerta y corría al interior de la habitación.
- Emma no molestes a tu madre - Wendy de 17 años corrió tras la traviesa de mi hija que corría en mi dirección con su precioso vestido parecido al mío pero más de bebe.
- Mi pequeña bebé que guapa estas - sonreí y la cargue dándole un sonoro beso en su regordeta mejilla, era una mini versión de la perfecta combinación de nosotros dos. Tenia mis ojos, pero el pelo de Gajeel, lo que me parecía un preciosidad, fuerte, largo y negro seria precioso cuando fuera mayor.
- Mami, la tía Wendy no me deja ponerla - levantó su pequeña muñeca donde descansaba una de las pulseras de cuero de su padre, sonrió y me reí al ver como era el doble de tamaño que el de la mano de la niña.
- No dije eso - se defendió mi cuñada - solo te dije que si te la ponías se perdería - la pequeña infló sus mofletes y me derretí por esta pequeña, era mi perdición y la de su padre.
Terminé de arreglarme a mi y a mi hija que al final uso la pulsera como una gargantilla. Iba cogida de mi mano, feliz y sonriente, cuando entré en el salón. La decoración le había quedado preciosa a mi hermana y la música era emotiva, perfecta para el momento.
Camine por la alfombra hasta que llegue al final donde el hombre de mi vida me esperaba vestido con su particular estilo de vestir en esmoquin blanco.
La ceremonia de mi boda empezó, tres años habían pasado desde que Emma había nacido, tres años desde que nos habíamos comprometido, y que tuvimos que aplazar cinco veces la boda por causas ajenas, la primera fue la gira de Gajeel, la segunda Lucy y Natsu no podía asistir y me negué a casarme sin una de mis hermanas, la tercera Wendy se puso muy mal y hubo que hospitalizar, temimos por la muchacha, cancelamos muchas cosas para estar con ella en el hospital, por suerte ahora estaba mejor, un nuevo tratamiento parece funcionar bien y podía comportarse como alguien de su edad, pro eso Wendy para el año asistirá a la universidad de Crocus con el hijo de Macao el manager de Gajeel, que durante la hospitalización de la niña se había caído y los dos coincidieron un tiempo en el hospital, haciéndose buenos amigos. Todos sospechábamos que esa amistad iría a mas, pero por ahora ellos mantienen la relación platónica.
La cuarta vez que tuvimos que suspender la boda fue cuando la tormenta no dejó despegar el avión tras la gira de mi rockero y no llegaría a tiempo. La quinta fue una que no me esperaba o viniera venir, pues encarcelaron a Karen por prostitución y venta de sustancias, al parecer el dinero que le habíamos dado no era suficiente para ella, quisimos que no nos afectara pero cuando la prensa se enteró, por fuentes desconocidas, de que era nuestra madre pues todo se volvió un jaleo obligándonos a cancelar por quinta vez la boda. Ese día la odia, y al siguiente la fui a visitar a prisión donde le dejé en claro que sabíamos que había sido ella la que filtro que ella era nuestra madre y que nos dejara en paz, ella nos abandonó primero así que no podía esperar nada de nosotras
- No entendéis lo que era tener 20 años y estar en esa casa, alejada de las comodidades - me decía cuando le eche en cara el abandono de su primer marido y su hija. - cuidaba a una niña, un marido y una casa para otros.... no era la vida para la que nací - se defendió ella.
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Hermanas FairyTail - 4. Muro de Acero
Hayran KurguTodos y todas en algún momento de nuestra vida levantamos un muro para evitar que nos dañen. En el caso se Levy Mcgarden, fue cuando aun era muy pequeña y su madre las abandono, pocas personas tenían acceso al corazon de Levy. Su familia es su mund...