Hermanas FairyTail - 4. Muro de Acero

14. Abriendo los ojos - Gajeel.

Lo iba subir ayer a la noche pero se me hizo tarde y moría se sueño. Así que masrugo y os lo traigo de buena mañana XD
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Su silencio me molesto, por alguna razón que no negara que la llamada era de un antiguo amor no me gustó. Levy no era una mujer experta, yo mismo lo sabía mejor que nadie, pues esa noche tras la fiesta me di cuenta de que era el primer hombre que intimaba de esa manera con ella. Así que pensé que podía haberme equivocado y que otro antes tuviera a esa enana.... me hervía la sangre.

Solo de pensarlo me molestaba así que opté por marcharme de esa casa, donde cada ruido o olor me recordaba a su voz, sus besos o piel.

- Me marcho volveré tarde. Dile a mi madre que no me espere. - grité antes de salir por la puerta a un empleado que estaba por ahí.

Conduje sin descanso por la carretera. No sabía a donde estaba dirigiéndome pero a algún lado llegaría y solo lo sabría una vez llegara.

Pare para comer algo, pues el cabreo no me quitaba el hambre, cuando recibí una llamada. El identificador me decía que mi amigo Sting Eucliffe era el que me llamaba, sin muchas ganas y tras dos llamadas insistentes le conteste.

- Dime - respondí de manera seca.

- Nada, era para decirte que estoy por la ciudad y no has venido a visitarme - gimoteo como si de verdad estuviera dolido. - Rouge está conmigo en mi villa, puedes pasarte antes de que vuelvas a desaparecer.

Y por arte de magia tenía un escape, así que hablé algo más con mi amigo mientras iba a mi coche para dirigirme a la villa del rubio.

Al llegar vi que había algunos coches de más, así que el maldito estaba de fiesta y solo me había llamado sin decirme que tendría que socializar. Iba a dar marcha atrás cuando por la puerta salieron dos personas las cuales me sonaban de verlas en la fiesta, no era otros que el matrimonio Dragneel.

- Sting muchas gracias por tu hospitalidad estos días - sonrió el pelirosa abrazando a mi amigo.

- Oh cómo podría ignorar a dos de mis grandes amigos - resople ante esa afirmación y fue ahí que se percató de mi presencia. - Gajeel amigo, llegas antes de lo que creía. - sonrió y se me colgó del cuello alegre, - deja que te presente a mis dos buenos amigos.

Las presentaciones fueron rápidas, tuvimos un leve intercambio de saludos y después solo hablo el Eucliffe.

- Oh pero ahora que lo pienso - me miro al rubio - tu ya los conocías ¿no? - lo mire serio y me encogí de hombros, pues conocía a mucha gente del mundo, si no era de estar de fiesta con el grupo era de estar con el rubio loco enfrente de mi.

- No intercambiamos palabras, pero sí que lo vimos en la fiesta de hace unas semanas - la voz melodiosa de la modelo me recordaba a alguien así como su sonrisa. - estuve hablando con tu hermana, Wendy, ¿verdad? - asentí y ella se rio, para girarse a su marido. - Esa niña de pelo azul y dos coletas, ¿te acuerdas Natsu?

- Ah la pequeña fan - sonrió y pude ver cómo hacían un intercambio de miradas - estaba con otra peliazul ¿también es tu hermana? - su cara de inocencia me decía que sabía la respuesta.

- No, es la profesora de mi hermana - solté tajante.

- Pues las dos son unas chicas hermosas y muy agradables. Suelo aburrirme en esos eventos pero con ellas me lo pase muy bien - sentenció la rubia. - bueno Sting, quedamos con mi cuñado para hablar de asuntos de familia - se acercó para darle dos besos en la cara - espero que nos encontremos pronto.

- Claro antes de iros pasaros - sonrió mi amigo.

Vimos como el matrimonio se marchaba y entramos en la casa del rubio. Donde me percate de que Rouge estaba tomando un refrigerio con otro hombre, parecía ser algo bajo de pelo claro y con una camiseta rosa con manchas oscuras, al acercarme aprecie que tenía un dibujo de la cara de una rana. Era un atuendo extraño.