28. Enfrentándome a la verdad - Levy

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Bueno y llegamos al penúltimo apartado de esta historia.....^^

Estoy muy ilusionada de poder acabarla haciendo un poco todo lo que quería.... hay cosas que se me escaparon por el camino, pero eran cosas que no tenían salida :)

Espero que os guste y disfrutéis de la lectura. 

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Escuchaba un pitido por el fondo, no me acordaba de que había pasado. Pensemos, Levy, salías del médico llamaste a Gajeel, hablaste con él y querías volver a llamarlo cuando un autobús se apareció en el lateral..... ya sé, tuve un accidente.

Me intenté mover pero me dolía todo el cuerpo, gemí de dolor, vi a mi alrededor, una enfermera que miraba mi gotero se fijó que había despertado.

- Oh estás despierta, tu familia se alegrará - sonreí o creo que lo intente porque me dolía todo. - Hace unas horas hicimos el amago de despertar pero no creo que te acuerdes. Negué con la cabeza ya que mi garganta se sentía seca y dolía.

La primera persona que entró fue Mirajane y Laxus, que aguanto a mi hermana mientras lloraba y me decía que no volvería a ponerme tras un volante nunca más. Así como me contó muchas cosas, como que su embarazo iba bien aun con la preocupación y eso me alteró, también estaba embarazada. ¿Lo seguiría estando?

- No te preocupes, el bebe esta bien - me tranquilice, por suerte ya podía hablar con mas soltura y pude contestarle.

- Lo supe ese día - mi hermana negó con la cabeza quitándole importancia - os lo iba a contar al llegar a casa.

- Eso no es lo que importa, si no que los dos estáis bien - sonrió y le devolvió la sonrisa. Mi hermana parecía pensar en si decirme o no algo - Gajeel está fuera, - abrió los ojos ante la revelación de que el hombre estaba en el hospital. Según me habían dicho llevaba en un coma unas dos semanas.

- ¿Gajeel? - pregunte para asegurarme que no me la jugaba mis oídos.

- Si, cielo. Alto, pelo largo negro y una cantidad insana de pircings, - se rio y yo con ella.

- Me gustan sus piercings - declare feliz de que estuviera fuera.

Hablé un poco más con ella y se fue para que entraran mis dos hermanas, que me contaron que mi madre había venido pero me decepcioné cuando me contaron la razón. No esperaba mucho de mi madre, pero me dolía que fuera así y mas dolió, la alegría que sentí cuando me dijeron que no se volvería a meter en nuestras vidas gracias a Mavis.

- Firmó un contrato donde pone que a cambio del sumo de dinero que ella pida, no volverá a acercarse a nadie relacionado con nosotras, si lo hace tendrá que pagar el doble de lo que pida. - sonrió Lu orgullosa de su cuñada.

- Levy, ¿sabes que Gajeel está fuera no? - me sorprendí que todas mis hermanas hablaran de él y que además parecía que quería que les dijera que quería verlo. Pero si me rechazaba, me habría dicho que no me quería...

- Lo sé ... .- dudaba y esa duda la pudo ver Juvia.

- Lo sabe todo, - declaró con una sonrisa - Lo de Hiro, lo del bebe, todo y no parece importarle - recalcó mi hermana y eso hizo que me alegrara, pero no quería hacerme ilusiones antes.

Fue un día lleno de visitas en el que vi a todo el mundo, a todos, salvo al pelinegro. Me aterraba enfrentarme a él, muchos me dijeron que no se había movido de mi lado, que había ayudado al cuidado de mis sobrinos y que parecía feliz con eso de enterarse de que era padre, pues esperaba que yo despertara para contarle la noticia a sus padres.

Hermanas FairyTail - 4. Muro de AceroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora