ᴄʜᴀɴɢᴇ ʏᴏᴜʀ ᴅᴇsᴛɪɴʏ [𝑲𝒆𝒏 𝑹𝒚𝒖𝒈𝒖𝒋𝒊] {FINALIZADA}

28 - Pequeño y calido encuentro

Que suerte que el día de mañana iría en busca del regalo perfecto. Porque si iba hoy no tendría excusas... para esa pelirroja que está delante de él igual de sorprendida.

Solo salió a caminar después de despedirse del rubio enano y se la encontró.

Ver esa mirada cansada pero la sonrisa que llego hacer... lo hizo confirmar un poco sus dudas, algo ocultaba y no perderá esta oportunidad.

— ____, ¿qué te sucede? —Preguntó sin rodeos.

— .... vayamos al parque de aquí que está más solitario.

Asintiendo caminaron en esa dirección, la miro de reojo y notaba la calma en ella: Mikey tenía razón en que se sentía bien a su lado.

No tardaron en sentarse en un banco, pero él esperaba que ella sea sincera y se explique.

— Para ser sincera —Comento captando su atención— tuve algunos problemas, pero todo esta bien —ahí va con su otra y nueva mentira— pude rehacer el examen y lo logre, ya que mis amigas convencieron a la maestra

De la nada sacó una hoja del bolso para mostrarle, tenía las respuestas bien hechas y demás.

— Por cierto, estos días estaba algo distraída porque discutí con mi madre, pero ya todo esta arreglado. —Sonrio con un leve sonrojo— y he podido dormir bien. Pronto tendré el dinero para comprarme un celular y te enviaré mensajes. ¿Confias en mí Draken?

Lo miro con una pequeña sonrisa y esos ojos llenos de gentileza. Esperando respuesta: él se sorprendió con toda la información repentina, incluso la mirada cambió a una muy viva.

— Si —Sonrio con alivio— confiare en ti si tu haces lo mismo, ¿confías en mi?

— ¡Claro!

Ambos sonrieron en ese cálido y tranquilo momento sin que nadie los interrumpa, todo iba tan bien, él ya se sentía aliviado.

— Duele

— ¿Uh? ¿qué significa eso? —preguntó curioso al escuchar la palabra rusa.

— Quiere decir "Estoy bien" —Esbozo una sonrisa más tranquila.

Le parecía tierno escucharla decir palabras en su idioma, aunque... ¿eso significó?, iba a creerle, ella haría lo posible para convencerlo.

— Draken... crees que el futuro sea, no se ¿solitario?

¿A qué se viene esa pregunta?

— No. Porqué estaremos juntos, ambos haremos lo que nos gusta y también estarán nuestros amigos —Comento mirando hacia el cielo— nuestro futuro no será malo.

La pelirroja miró hacia abajo unos segundos y se dejó caer en el hombro de este, tomándolo por sorpresa: no imagino que haría algo así.

— Gracias por invitarme el día de mi cumpleaños, esperaré ese día Draken.

Sin dudar acaricio ese corto cabello rojo, sin notar a esa persona que los observaba desde lejos y se marchaba.

Fue bueno escapar de casa unos momentos, eso pensó la joven.