Eran un experimento que para muchos resultaba ser una estupidez, pero solo bastó con que una persona confiara en sus capacidades para poder crearlos. Ahora, todos quienes se negaron buscan la manera de atacarlos... pero ellos son superhumanos, ¿acas...
—Es el tercero en reclutar —Johnny comentó, mirando la ficha entre sus manos y Doyoung a su lado husmeaba para saber quién sería su nuevo compañero.
—Guarda eso, Johnny —pidió Kun. —No se te puede perder ni mucho menos alguien puede encontrarlo.
—Sí, sí, jefe —el nombrado asintió, guardándolo en el pequeño bolso que llevaba con ellos. —¿Al menos puedo jugar con su mente y crear ilusiones?
—No... aunque puede que él juegue con la tuya primero —Taeyong dijo. —Bien, quédense aquí. Está pronto a salir de una academia de canto y-
—¡Es el de la foto! —Doyoung apuntó al chico que sostenía su mochila mientras salía de la academia. Taeyong y Kun suspiraron, mientras negaban con la cabeza.
—No era necesario que grites, pero sí, es él. Iremos hablar con él ahora, manténganse aquí —Taeyong avanzó a pasos apresurados junto con Kun mientras lo veían alejarse de la academia. —¡Eh, tú, Moon Taeil!
El mencionado rápidamente se giró, entrecerrando los ojos y mirándolos más fijamente cuando los mayores se acercaban.
—Oh, son ustedes —Taeil sonrió, casi como si los conociera de toda la vida y ambos líderes abrieron los ojos sorprendidos, preguntándose de dónde demonios él los conocía. —Puedo leer sus mentes, son parte del proyecto NEO.
—¿Uh? —Kun abrió los ojos justo en el momento en que una voz sonó dentro de su cabeza.
"También puedo hablarte por aquí".
—Ok, creo que nuestros métodos sobre proteger nuestras mentes son un fracaso —Taeyong se adelantó a hablar. —Tendremos que mejorar eso, Kun.
—Lo haremos... Como ya sabes, somos parte del proyecto NEO, debes tener conocimiento sobre nosotros. Hace poco hemos comenzado a reclutar a las personas que son parte de nosotros.
—Oh, ¿soy el tercero en reclutar? —Taeil preguntó mirando a Taeyong, quien era el que había pensado en aquello.
—Maldición, realmente tendremos que trabajar en eso... Los de allí son los otros dos, también son parte del proyecto, pero luego haremos las presentaciones.
—De acuerdo, pero díganle al grandulón que no intente crear ilusiones dolorosas en mi mente o seré capaz de volverlo loco entrando y saliendo de su mente cuando se me dé la gana.
—Ay, no me quiero imaginar a todos juntos.
—Y eso que aún faltan dieciocho más, Kun. Intenta no volverte loco antes de tiempo.
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—Bien, vamos a comenzar —Taeyong se paró en medio de todos, mirando a cada uno con sus ropas deportivas. Los menores habían llegado hacía un par de horas de la escuela y en cuanto fueron informados de los nuevos planes que habían propuesto los líderes se mostraron bastante emocionados. A todos y a cada uno les gustaba combatir de esa manera, solo así podían darse cuenta de lo mucho que habían avanzado en sus entrenamientos diarios.
