Lo primero que se pregunta es el signo

Capítulo 7

Emma

Lo sé, soy la mejor, y más haciendo planes bad bitch.

Habían pasado ya dos largos días sin ni siquiera mencionar el tema entre nosotras, pero se me ha ocurrido una gran idea. Ahora que tenemos una larga lista de reportes de nacimiento del 2004 y 2003 tenemos que organizar una megafiesta y conocerlos a todos. Obviamente esto solo lo pienso yo porque mi mejor amiga nunca me dejaría hacer una fiesta con desconocidos... O... Eso iba a hacer...

- ¿Estás loca? No puedes hacer una fiesta con gente que no conoces.

Sí, así es... Le había dicho.

- Ay... de por Dios... Todo va a estar bien, solo debemos seleccionar a las personas adecuadas e inventar alguna excusa para invitarlas a la party. – Le digo intentando convencerla sabiendo que se va a preocupar aún más.

- No, Emma. – Odiaba cuando me llamaba por mi nombre, pero no le di importancia. – No puedes. Es decir... Debemos planificarlo bien si lo haremos.

- ¿Otra vez con eso? No hay que planear, saldrá bien.

- ¿Como lo bien que nos fue en el hospital? No.

- Conseguimos el objetivo. Así que salió bien. – Defendiéndome e intentando que cambie de perspectiva.

- Haremos un plan. Si no... Yo estoy fuera.

- Bien. Lo haremos – Digo rodando los ojos algo enojada.

Estamos haciendo nuestro plan y a pesar de todo estoy segura de que saldrá bien sin importar lo que suceda.

- Empecemos separando a la gente por cada signo zodiacal. – Dice Jul. – Ponte a revisar de julio hasta diciembre y yo de enero a junio.

Acto seguido seleccionamos los pros y contras de los 3 más atractivos y atractivas de cada signo hasta que nos quedamos con uno de cada categoría.

- Ahora hay que empezar a investigar los números telefónicos – Digo, mientras mi mejor amiga está con una cara muy sorprendida porque esta vez yo seguí con el plan.

- Si, listo.

Habíamos estado más de dos horas buscando sus teléfonos y solo hemos encontrado seis de ellos.

- Solo llevamos la mitad, debemos seguir buscando.

- Ya he buscado en todas partes y nada...

- Mira en Instagram o Facebook, tal vez puedan estar allí – Dice Jul, tratando de ayudándome muy interesada lo cual se me hace extraño por parte de ella. Sé que en el fondo también le parece una buena idea y a la vez algo arriesgada.

De repente miro la hora y...

- Jul, son las 7 de la noche. – Se suponía que ella vino a mi casa con motivo de la tremenda carga de tareas que teníamos y no habíamos hecho nada en toda la tarde.

- ¡Carajo! – Al instante se levanta apurada de la mesa y comienza a meter forzadamente todo el papeleo a su maletín. - ¡Yo ya debería haberme ido de tu casa, bestie! – Me dice rápidamente mientras hace un gesto de despedida hacia mi. - Mañana seguimos con el plan, rápido, me aseguraré de que tu mamá no me vea, distráela.

- No, espera. Llama a tu papá y dile que te quedarás esta noche en mi casa. Mi mamá mañana nos llevará a la escuela juntas, yo le explico, no te preocupes.

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- ¿Y si faltamos a química? Nadie se dará cuenta.

- ¿Estás loca? No podemos escaparnos de clase.

- Relájate un poco, solo es una clase.

- Y... ¿Acaso esos ojos azules no te permiten ver que química es una de las asignaturas más importantes y en la que vas perdiendo todos los estándares?

- Sé que soy demasiado linda, ahora solo sígueme, se como recuperar la nota. – Preferí no volver a mencionar nada hasta que nos alejáramos de aquel lugar para estar completamente segura de que la había convencido con mis maravillosas habilidades de manipulación para cosas buenas.

- Okay, y... ¿Para qué es que ahora faltamos a clases?

- A ver, ¿Para qué será? Pues claramente para seguir buscando números telefónicos de los que nos faltan y hacer la megafiesta el sábado.

- ¿Ya cuadraste fechas y ni me contaste? Además, el sábado no puedo, tengo que estudiar.

- Juliette, eso dijiste ayer y míranos ahora. – Al instante comenzamos a reírnos. – Amiga, no le pongas problema al plan. Haremos esto, nos divertiremos.