Emma
Camino por un largo pasillo que se me hace infinito, hasta que veo a un chico que lleva puesta una camisa blanca manga corta con un pantalón negro y una cadena colgando de éste.
Teo estaba ahí, con su grupo de amigos. Celebrando en voz alta de un tema que desconozco. Me acerco y me dirijo directamente a Teo para saludarlo. Él en seguida se voltea y me saluda en frente de todos.
- Hola, Harrison.
- Hola -. Su mirada se dirige hacia su grupo de amigos, pasa su mano por mi espalda integrándome al círculo.
- Chicos, ella es Emma... Emma Harrison.
Oh por dios, ¿¿me acaba de presentar?? Sí, sí lo hizo.
- Hola, ¿cómo están todos? – Veo como uno de sus amigos dirige su mirada a mis pechos. Teo también lo nota.
- ¡Ey! Sus ojos están arriba – Dice Teo con un tono firme.
Inmediatamente este chico sale del círculo. Duramos un largo rato hablando entre todos y pasándola bien. No me percato de la hora hasta que siento vibrar mi celular. Inmediatamente lo saco de mi pequeño bolso y me doy cuenta que ya casi son las doce de la medianoche. En ese momento veo que Teo se dirige a la cocina, no sé para qué. Abro el mensaje y veo que es de mi mejor amiga:
MI NIÑA 🦀🦀
"Em, no es para que te concentres en esto ahora, pero me escribió otro de los candidatos, que me quiere ver un día, ¿¿qué le digo??"
¡Oh por dios! ¿¿Quién será?? La intriga, la intriga... Pero bien, es momento de concentrarnos en Géminis, no en algún otro.
Camino a pasos rápidos por el pasillo hasta que llego a la cocina y nos encontramos. Lo veo con un trago en la mano. Sé acerca y me ofrece un poco de su bebida. El no sabe que aún no cumplo los 18 años, pero... en este punto de la noche, ¡¿a quién le importa?!
- Gracias – Le digo aceptando la invitación.
Pasan unos momentos de silencio y se decide a hablar:
- ¿Qué sueles hacer a diario? – Me pregunta, intentando sacar algún tema. Por un momento pienso que en lo único que me concentro es en el colegio pero recuerdo que él aún no sabe mi edad.
- No suelo hacer mucho, la verdad.
- Ahh, ya veo... - Dándome cuenta que esta conversación está agonizando, decido hacerle yo una pregunta:
- ¿Por qué la fiesta? Nunca me enteré...
- ¿En serio viniste a una fiesta y ni siquiera sabes por qué viniste? – Se ríe sin ninguna clase de filtro... y eso me encanta.
- Sí, a mi dónde me digan rumba yo les llego y a veces ni sé para que son... claro ejemplo: Hoy.
- Sí, me di cuenta – Dice en forma de burla.
- Ay no te burles, apuesto que eres igual, eres de Géminis. – En menos de un segundo recalculo lo que acabo de decir, noto la cara de confusión de Teo y corrijo: - Bueno, o por lo menos eres signo de Aire...
- ¿Tú como carajos sabes que soy Géminis?
- Mis dones del zodiaco me lo dijeron – Digo con orgullo tratando de ocultar mis nervios.
- Te gusta el zodiaco, ¿no?
- Bastante... ¿se nota? – Uso un tono sarcástico.
- Mucho - Dice riéndose – ¿Tú que signo eres?
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Lo primero que se pregunta es el signo
Romance¿Te imaginas tener de mejor amiga a una loca por el zodiaco? Bueno... Juliette la tuvo y se convirtió en lo mismo. Aries y Cáncer. Una amistad que se basa de las locuras de la una, y poder sentirse en un hogar con la otra. Pero... ¿Algún día pensarí...