Había terminado de ordenar todo, recordaba aquel lugar más pequeño, un pent-house era demasiado grande para solo ser habitado por una persona, su padre era algo exagerado de vez en cuando, Jimin solo se habría conformado con un apartamento de dos habitaciones un comedor y cocina.
Por suerte estaba todo amoblado, como si una familia entera viviera ahí, Jimin solo se encargó de ordenar las cosas que había traído de su casa materna, incluyendo toda su ropa en aquel enorme clóset que solo llenó a la mitad, una que otra cosa sobre una repisa, sus libros que usó durante la universidad, y uno que otro material que había conservado de aquella época.
Suspiró mirando la biblioteca, que también era muy grande para ocupar solo aquellos libros.
―Jumh... parece que vivir solo no es tan divertido como siempre imaginé que sería – rascó su nuca y salió de la habitación.
El silencioso pasillo que dejaba ver un par de puertas más y las escaleras, era aterradoramente fatigante, las otras puertas pertenecían a un par de habitaciones usadas por nadie, y las escaleras lo dirigían hasta arriba, donde estaba el living, el comedor y la cocina.
Ascendió a la planta del medio y fue directo a la cocina, todo estaba perfectamente equipado, pero había olvidado un detalle cuando abrió la puerta del refrigerador.
― Debo hacer compras... - bufó recordando que no tenía si quiera un sobre de ramen instantáneo en la despensa. - ¡Ah! ¡Nunca he sabido hacer las compras! – hizo un pequeño berrinche tomando las llaves del auto y las del pent-house para salir a "hacer el intento" de comprar al menos algo para comer esa semana.
Mientras descendía por el ascensor acomodó su cabello frente al espejo y miró la hora en su Rolex; nueve con tres minutos de la noche. ― Genial – reprochó y bajó en el estacionamiento.
Una vez estuvo en su auto, salió por el portal, y colocó algo de música en el reproductor. Iba a volverse loco con tanto silencio. Debía admitir que no estaba para nada agotado, sino más bien aburrido, había transcurrido toda la tarde en su nuevo hogar ordenando aquellos libros y ajustando un poco más el ambiente a su estilo, sin embargo aquel aire de libertad era tan absurdamente aburrido, tedioso, se sentía como una extraña realidad alterna a su vida normal.
Pero no era así, esa era su vida a partir del instante en el que tomó sus cosas y se marchó del nido de su madre, quizás era algo radical e incómodo, porque siempre había vivido junto a ella, pero había llegado el momento de crecer, despegar las alas y tomar las riendas de su propia vida.
Si quería evitar que su mamá continuara inmiscuyéndose en cada detalle de su existencia, ése era el principio.
Sin embargo, Jimin sabía que ser un adulto independiente tampoco sería tan sencillo.
Una vez estuvo en el market, tomó un carrito y se desplazaba entre los anaqueles sin saber por donde comenzar, esto era nuevo, la última vez que fue al supermercado a penas estuvo ahí por unas botellas de alguna bebida energética y se marchó pronto.
― Amh... supongo que debería solo ir añadiendo lo que crea que necesite y si algo hace falta... tendré que volver o pediré un delivery – se dijo a sí mismo tomando una que otra cosa de cada anaquel, por suerte había aprendido a cocinar algunas variedades de platillos, y no moriría de hambre por ese motivo.
El tono del celular inesperadamente comenzó a timbrar dentro del bolsillo del alfa y este se apresuró a responder la llamada entrante.― ¿Hola?
― Park Jimin, ¿Qué estás haciendo? ¿Dónde andas? – habló de inmediato. El alfa miró de nuevo la pantalla y frunció el ceño.
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Min Dumpling ৎ୭ JimSu (resubiendo)
Fanfic❛❛Un omega bonito, con mejillas gorditas como un par de dumplings❜❜ La vida de Yoongi y Jimin da un giro a partir del día en que se encuentran, o desde el día en el que Jimin insistió en cruzar su destino con aquel omega testarudo y tierno. ✧ ────...