Ubicación: Mazunda.
Hemos llegado a un punto sin retorno... Al ir viajando por el sur de África, hemos estado descubriendo que SOMBRA estaba contrabandeando diamantes alrededor del continente gracias a la pista que teníamos para perseguir a sus asesinos entrenados. Pero también habíamos descubierto algo devastador: Había un infiltrado entre nosotros. Todo esto estuvo en algunos casos con cierta tensión dentro del equipo para tratar de ver quién nos había traicionado desde el principio, y ya casi teníamos su identidad. Lavinia De Brills, una asociada de SOMBRA y dueña de Diamantes De Brills, de seguro sabía quién era el infiltrado... pero ahora, no podrá decirnos nada más.
-¡¿La testigo está muerta?!-Exclamo Michelle, impactada.
-Solo el infiltrado pudo haber asesinado a un preso aquí en la base de operaciones-Dije, pensativo.
-Aldo, si el infiltrado se animó a cometer un homicidio en nuestras caras, entonces todo es posible-Me aseguro Jonah.
-¿Quién te pidió tu opinión? Crees estar fuera de toda sospecha y que eres un experto...-Lo encaro Jack, enojado.
-¡Caballeros, por favor! ¡Tenemos una emergencia de código rojo, sean disciplinados!-Intervino Ingrid-El procedimiento es claro: Aldo tiene que encontrar al asesino de Lavinia y exponer al traidor. ¡Todos debemos cooperar! Michelle ayudará a Aldo en esta investigación. Hace poco que trabaja aquí, no puede ser la infiltrada... y no tiene intereses personales en el equipo-Nos explicó.
-¿Intereses personales? ¡Michelle fue la abogada de SOMBRA durante años! ¿Acaso eso no cuenta?-Le pregunto Jack, incrédulo.
-Di una palabra más, Archer, y te irás esposado-Le advirtió Ingrid, severa.
-Aldo, será un honor brindarte mi apoyo-Acepto Michelle.
-Por supuesto, Michelle. Has demostrado ser de gran ayuda durante las investigaciones-Le dije.
-Tengo autorización para otorgarte esta placa, Michelle. Ahora eres parte del Departamento-Le entregó Ingrid.
-No los defraudaré. Dame un segundo para prepararme y te verá en la escena del crimen, Aldo-Dijo Michelle, determinada. Un rato después, ella se había cambiado por unos pantalones azul marino con tirantes azules y se había atado el cabello en una cola de caballo.
-Bueno, Michelle, ¿Qué se sienta ahora que eres parte del equipo, oficialmente?-Le pregunte.
-Se siente... bien. Es más... me siento libre de haberlo hecho. Desde que SOMBRA estuvo desde hace mucho tiempo controlándome, se que al fin puedo hacer que paguen por lo que me hicieron y me obligaron a hacer-Admitió Michelle.
-Se ve que al final podrás hacer que los demás puedan llegar a confiar en ti por fin... Yo ya lo hice-Le sonreí.
-Lo se... y me gusta que me defendieras-Se me acerco, sonriéndome y dándome un beso-Pero bueno, ahora tenemos trabajo que hacer y un asesino que atrapar-Me dijo.
-Claro, amor. Si algún día llegamos a acabar con SOMBRA, te prometo que te llevare de vacaciones-Le prometí y nos acercamos a las celdas de detención del Cuartel. Al entrar en la celda de Lavinia, la vimos ahí tirada en el suelo y vi a su lado unos pedazos rotos.
-Aldo, tengo el habito de visitar criminales en prisión, pero no suelen tener una bala en la cabeza-Me conto Michelle, examinando a Lavinia.
-Al menos tenemos un móvil claro: Lavinia sabía quién es el infiltrado. El asesinato fue un acto de desesperación. Debemos ser fríos y racionales-Le dije.
-No forzaron la entrada de la escena del crimen... Lo único fuera de lugar son esas piezas rotas-Señalo Michelle.
-También está la cámara de vigilancia. Seguro que podemos acceder a la grabación-Agregue y comenzamos. Primero, llevamos el cuerpo directamente al laboratorio para la autopsia. Después, al desbloquear la cámara de vigilancia, nos llevamos una sorpresa.
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Criminal Case: Edición Mundial.
FanfictionHola de nuevo, soy Aldo Parón, y ahora estoy viajando por el mundo. Pero estas no son vacaciones, es ahora mi trabajo. Después de haber salvado Pacific Bay de Albert Tesla, un científico loco que quería destruir la ciudad y digitalizar a todos sus h...