La Hora Más Oscura.

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Ubicación: Montreal, Quebec, Canadá.

Desde que llegamos a América del Norte, hemos logrado detener el conflicto más grande que SOMBRA había planeado... o eso creíamos. SOMBRA estaba haciendo que Estados Unidos tuviera tanto tensiones externas cómo internas: Separase de las Naciones Unificadas, bandos políticos que estaban a favor o en contra, asesinatos de gente conocida y falta de información sobre la organización criminal. De último, por suerte, habíamos logrado atrapar a El Rey después de que asesinara al primer ministro de Canadá, y resultó ser nada más que Héctor Montoya, un embajador de buena voluntad. Lo otro que descubrimos fue un golpe duro para todos: Ripley había estado relacionada con SOMBRA cuando aún ella estaba trabajando para la CIA, y por eso ahora iba renunciado como Jefa del Departamento. Aún así, pensamos que con el arresto de Héctor, habíamos detenido a la organización... pero no todo sale de color de rosa.

-¿Qué dices? ¿Secuestraron al presidente?-Le pregunto Carmen, sorprendida.

-Sucedió en Nueva York. ¡Estaba en el avión presidencial cuando lo raptaron!-Nos dijo Elliot, enojado.

-¡Esto debe ser obra de El Rey! ¡Estar tras las rejas no le impidió atacar al presidente!-Dije.

-¡Debe haber tenido un plan B! ¡Eso explica por qué se lo veía tan contento en el juicio!-Dijo Jack, frustrado.

-¡Sabía que detener a SOMBRA no sería tan fácil!-Dijo Carmen, molesta.

-¡Aldo, esto es terrible! La prensa ya se enteró de la noticia y la gente está aterrada. Si no encontramos al presidente con vida y rápido, se desatará el infierno. El FBI ya investigó el Air Force One, pero conseguí un permiso de inspección para el Departamento. ¡Vayamos ya mismo!-Me dijo Ingrid, seria.

-¡Encontraremos una pista aunque tengamos que desarmar el avión! ¡Este es el caso más importante en nuestra carrera!-Dije, determinado, y nos fuimos todos rumbo a la ciudad de Nueva York.


Ubicación: Nueva York, Nueva York, Estados Unidos.

Al llegar, el resto fue al Cuartel de la ciudad, mientras Carmen y yo nos dirigimos al aeropuerto para registrar el Air Force One. Al inspeccionar el enorme y lujoso avión presidencial, encontré un broche y una reloj.

-Este broche de corbata de bolo se ve familiar-La examino Carmen.

-El presidente Hewett lo tenía puesto cuando lo conocimos en Camp Rushmore. El broche se le debe haber caído durante el forcejeo con quién sea que lo haya secuestrado. Veamos si tiene huellas, y mira este reloj-Recordé.

-Es bonito, ¿Pero que tiene que ver con esto?-Me pregunto Carmen, confundida.

-Fíjate bien: Esta lente no es parte del mecanismo del reloj. ¡Debe ser una cámara oculta!-Le aclare.

-Lo habría notado enseguida si hubiera dado vuelta el reloj. Lo siento, Aldo. Me está afectando el estrés-Se disculpo Carmen.

-No te culpo. Si tenemos suerte, quizás la cámara haya grabado el secuestro del presidente-Le dije con esperanzas. Primero, desbloqué la cámara para que pudiéramos ver la grabación.

-Espero que tengas razón, Aldo. Veamos si podemos ver quién es el secuestrado-Me dijo Carmen, reproduciendo el video.

Inicio de la grabación...

-¡Cariño, estoy cansado de discutir!-Le dijo James, estresado.

-¡Y yo hay días en los que estoy cansada de tí! ¡Mírate! ¡Podría hacer mejor trabajo que tú como presidente!-Le dijo Olivia, enojada.

Criminal Case: Edición Mundial.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora