Ubicación: Roma, Italia.
Después del caso de Metaxas Demetrios en Grecia, hemos descubierto que todo el caos y la crisis que ha vivido Europa hasta ahora fue por culpa de los Prometeicos, que querían a través de esto hacer que la gente vote por el "Sí" en el referéndum para unificar Europa. Otra cosa que descubrimos fue que el próximo ataque podría ser la ciudad de Roma, Italia. Si tenemos algo de suerte, tal vez podamos evitarlo, o si no, tal vez podamos encontrar de una vez a Klaus.
-Comisionado Aldo, nos acaban de informar que Klaus Weissmann está en Italia. Puede que tenga que ver con el cambio de Papa. El Papa está gravemente enfermo. Nos preocupa que esté vacío de poder se convierta en una tentación de los Prometeicos-Me dijo Ripley, seria.
-Podrían tomar el control de la iglesia y una de las influencias más grandes del mundo... ¿El Papa tiene a algún sucesor?-Le pregunte, preocupado.
-Se considera al padre Pietro Agnelli como el favorito para suceder al Papa. Es un padre que no tiene pelos en la lengua, en especial sobre el referéndum europeo... Nos enteramos de que Agnelli no está en el Vaticano. Tres días a la semana acude a la Plaza de España de Roma para lavar los pies de las personas sin hogar-Nos explicó Ripley, mostrándonos una foto de Pietro.
-¡Demasiada humildad tratándose de quien está a punto de dirigir la Iglesia Católica!-Admitió Carmen.
-Sí, pero podría tratarse de una tapadera... sabemos que los Prometeicos tienen contactos con gente poderosa por toda Europa. Aldo, Martínez y tú se van a ir a buscar a Agnelli a la Plaza de España para asegurarse de que no tiene nada que ver con los Prometeicos-Nos ordenó Ripley, severa, y nos dirigimos a la Plaza de España. Debo decir, que me gustaba conocer Italia: Su historia, su cultura y sus costumbres. Todo estaba aún preservado como para hacerte creer que aún estabas en el Renacimiento. Pero cuando llegamos a la plaza, encontramos algo horrible sobre los brazos de la estatua de la fuente.
-Dios, otra vez no... ¡No me digas que ese hombre muerto es el padre Agnelli! Como si no tuviéramos suficientes problemas-Exclamo Carmen, frustrada.
-Me temo que es él... y no solo eso, alguien le marcó el pecho con hierro candente. ¡Parece que es el símbolo de los Prometeicos!-Señale, y al mirar alrededor de la fuente, vi una huella de llanta y un póster roto.
-Pues si tenía alguna conexión con los Prometeicos, ahora sí que ya no la tiene-Me dijo Carmen, disgustada-¿Encontraste alguna pista?-Me pregunto.
-Sí, hay una huella de llanta junto a la fuente. Puede ser que el asesino haya escapado después de marcar con hierro candente al padre Agnelli. De seguro podremos encontrar una coincidencia en la base de datos. También debemos arreglar esté póster-Le mostré, sacando una foto de la huella.
-Hasta ahora no han fallado tus instintos, Aldo, ¡Y necesitamos respuestas pero ya!-Me dijo Carmen con confianza.
-El Papa actual está en su lecho de muerte, quien se creía sería el futuro Papa está muerto... Será mejor llamar a la Jefa-Le dije, llamandola.
-¿Aldo? Déjame adivinar... Agnelli está muerto. ¡Su asesinato generará un caos en la Iglesia Católica! ¡El caos es justo lo que más les gusta a los Prometeicos! ¿Estamos ante un golpe de poder? Encuentra rápido al asesino, Aldo, pero con discreción-Me ordenó Ripley.
-Lo hare, Jefa, descubriremos quien lo hizo y si está vinculado con ese culto-Le dije, terminando la llamada y empezamos. Primero, llamamos al Cuartel para que vinieran a retirar el cuerpo. Después, al pasar la huella de llanta por la base de datos, logramos identificar que tipo de vehículo la dejo.
-¿La huella de llanta que encontraste en la plaza coincide con la de una moto scooter italiana? Y la huella de llanta estaba fresca, por lo que debió dejarla el asesino-Planteó Carmen.
ESTÁS LEYENDO
Criminal Case: Edición Mundial.
FanfictionHola de nuevo, soy Aldo Parón, y ahora estoy viajando por el mundo. Pero estas no son vacaciones, es ahora mi trabajo. Después de haber salvado Pacific Bay de Albert Tesla, un científico loco que quería destruir la ciudad y digitalizar a todos sus h...