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Jay corrió lo más rápido que sus piernas le permitieron, grandes gotas de sudor resbalaban por su frente a la par que sus zancadas resonaban fuertemente por aquel pasillo

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Jay corrió lo más rápido que sus piernas le permitieron, grandes gotas de sudor resbalaban por su frente a la par que sus zancadas resonaban fuertemente por aquel pasillo.

Podía escuchar el desenfrenado latir de su corazón, mismo que golpeaba violentamente dentro de su cavidad torácica, haciendo su respiración cada vez más pesada. Estaba al borde del colapso.

Para su suerte estaba muy cerca de llegar a su destino, asimismo, había logrado encontrar quién velara por sunoo y ni-ki

La diosa Luna había tenido compasión de su desdichada alma al poner a Karina, una Alfa de mayor grado, en su camino.

Sus adoloridos pies se detuvieron frente a la gran puerta marrón y poniendo ambas manos sobre sus rodillas, exhaló fuertemente.

Cuando recuperó por completo su aliento tocó rápida y desesperadamente la puerta de madera, no tardó en escuchar un "pase" como respuesta y tampoco se demoró en abrirse paso dentro de la gran habitación.

Lo primero que observó fue la deslumbrante sonrisa de Seonho, misma que desapareció al instante al reparar en su deplorable estado.

—Muchacho, ¿estás bien?—cuestionó angustiado.

—N-no—balbuceó.—Surgió un inconveniente.

—¿Que tipo de incoveniente?—consultó el director juntando ambas de sus cejas.

—Uno muy grave y que no puede esperar más—anunció Jay mientras movía sus piernas de forma inquieta.

—¿Puedes explicarme?—pidió, a lo que el rubio asintió.

—Sucede que...—intentó explicar el contrario, pero, fracasó en el intento.—Es difícil de explicar.

—Solo dilo.

—Verá, por alguna extraña razón sunghoon está siendo dominado por su lobo—avisó.—Y lo peor es que no es el único.

—¿A qué te refieres con "no es el único"?

—Bueno...—Jay rascó su nuca en un acto nervioso.—jungwon también.

—¿Yang jungwon, el nuevo estudiante?—interrogó el mayor recibiendo un asentimiento por parte del contrario.

—No quiero ser grosero, pero, no tenemos mucho tiempo para perder.

—Pues, ¿qué sucedió?—preguntó el castaño comenzando a preocuparse.

—Prácticamente, sunghoon golpeó a ni-ki y jungwon a su hermano—declaró Jay para sorpresa del director.

—¿Y dónde están?—averiguó un alarmado Seonho dejando su papeleo de lado.

—En el baño del pasillo tres—respondió el rubio.

Seonho no lo pensó y rápidamente se puso de pie a la par que salía de su oficina. Era claro que debía hacer algo.—¡Ve por la profesora irene!—ordenó antes de desaparecer por los pasillos.

🍒 1OO Ways ˢᵘⁿᵍʷᵒⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora