Errores, errores, la gente siempre parecía cometer errores. A pequeña o gran escala, estando conscientes del resultado o siendo ajenos a el, con posibles remedios o, en el peor de los casos, sin ninguna solución de por medio. Jungwon tenía en muy en claro todo eso, pero, muchas veces, el orgullo se volvía más fuerte que el raciocinio.
Jungwon meramente había aceptado la cita, sí se le podía llamar de esa forma, con el alfa rubio gracias a su maldita soberbia y necedad de no querer aceptar lo irremediable. Un cansino suspiro escapó de su boca, desvaneciéndose a los segundos entre todo la bulla del salón.
—¿Ya estás listo?—la melódica voz de su hermano voló por el ambiente y aterrizó en sus oídos.—La campana ya ha sonado. ¿Te sientes bien?—preguntó con cierta preocupación empapada en su mirar.
—Sí, también lo escuché—mintió.
—Ah, ya. Te veías un poquito perdido—acusó su hermano, él sólo se limitó a mover su cabeza de un lado a otro, negando.
—Voy a salir—soltó tratando de lucir normal, con la mirada pegada a su mochila y con la espalda más recta de lo usual.
La cara de Sunoo se contrajo en una mueca bastante chistosa.
—¿Quién es el afortunado?—bromeó. Los tensos hombros del azabache se relajaron un tanto.
—Park —informó sin querer dar mucha información al respecto pues ni él mismo estaba seguro de lo que estaba por hacer.
—¿Cuál de todos?—inquirió con las cejas juntas, enfatizando su carencia de comprensión hacia las palabras de su hermano.—Es como si yo te dijera que saldré con un Kim, no sabrías decirme cuál.
Touché, pensó Jungwon mientras metía su última pertenencia a la mochila. De todos modos Sunoo se enteraría, así que, lo mejor sería decirle de una buena vez.
—Park Jongseong —el nombre de aquel chico tembló bajo su voz. Ya estaba comenzando a arrepentirse.
Tal vez Sunoo había supuesto otra cosa pues la mirada que le brindó fue bastante… aterrada, a decir verdad. Sus ojos se asimilaban a dos canicas de lo tan abiertos que estaban, el labio inferior le temblaba y su respiración se había vuelto pesada, muy pesada.
—¿Pa-Park Jongseong?—preguntó en un escalofrío.
—Sí, ese mismo—afirmó.
Sunoo no pronunció nada más, simplemente asintió aturdido mientras parecía divagar en su mente; indagando en su memoria por una información desconocida para él.
—Bueno, me voy—anunció colgándose la mochila al hombro.
Jungwon se levantó del asiento sin esperar una respuesta por parte de su compañero de banca, simplemente no quería escuchar las palabras cargadas de razón que picaban dentro de la boca de Sunoo al querer ser expulsadas. A pasos vacilantes se fue encaminando a la puerta principal de su institución, la culpa comenzaba a llenar su sistema pero, nuevamente, su orgullo hacía aparición; dándole el poco coraje que, en esos momentos, necesitaba.
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🍒 1OO Ways ˢᵘⁿᵍʷᵒⁿ
Fanfiction🌬 𓂅 Sungwon «Hay cien maneras de dejar. a un amante, pero, soy al unico al que necesitas» 🌬⩩⥽Park Sunghoon es el alfa más deseado del momento. Su rostro angelical combinado con su intelecto le convertían en el «prototipo ideal", sin embargo, un...