✦ˑ 𝗣𝗋𝗈𝖿𝖾𝗌𝗈𝗋 𝖽𝖾 𝗆𝗎́𝗌𝗂𝖼𝖺 𝄞⋆| 𝗟𝖾𝖾 𝗛𝖾𝖾𝗌𝖾𝗎𝗇𝗀

05

Arrastrando las suelas de mis zapatillas, camino por el pasillo de la escuela con el ánimo por el suelo.

—Oye, Hye, ¿a que no sabes qué pasó ayer? —dijo un pelirrojo con una sonrisa amplia.

—Me dejaste abandonada. —Lo miré con reproche.

—¿Qué? No, pensé que habíamos acordado separarnos. —Su mirada reflejaba una confusión total.

—No, Soobin, eso fue lo que tú dijiste antes de irte, dejándome sola en un lugar desconocido y sin darme siquiera la oportunidad de negarme. —Reclamé, visiblemente molesta.

Él bajó la cabeza, como un cachorro regañado. —Lo siento...

Pocos segundos después, alzó la vista nuevamente, observándome con curiosidad. Sus ojos examinaban mis facciones con detenimiento, ¿estaría deduciendo algo?

—Tu cara no dice "buenos días". ¿Qué te pasó? —preguntó, mirándome con atención.

—Más bien, ¿qué no me pasó? —solté, frustrada. —Fue horrible, de verdad.

—Cuenta. —insistió.

La imagen se me vino a la mente, provocando que mis mejillas comenzaran a arder.

—Besé a alguien, él me correspondió. No lo conozco bien, pero hemos tenido cierta cercanía. Ahora no sé si malinterpretó mis acciones, pero, ¡maldita sea, estaba ebria!

Me di un pequeño golpe en la frente, mientras Soobin me observaba con asombro, intentando asimilar la situación.

—¿Quién era?

Su pregunta me hizo sentirme realmente avergonzada. Me acerqué a su oído y susurré el nombre.

—Lee Heeseung.

Él se alejó, atónito por mi respuesta. Parecía como si su alma hubiera abandonado su cuerpo; su rostro palideció. ¿Le habrá bajado la presión?

—¡¿LEE HEESEUNG?! —gritó, su voz resonando en todo el pasillo.

Le lancé una mirada fulminante, ya que varios compañeros nos observaban, y los rumores aquí se propagan rápido.

—Así que, si llegas a verlo y te pregunta por mí, dile que estaba ocupada con asuntos muy urgentes, ¿entendido? —lo apunté con el dedo, amenazante.

—Pero, ¿no es él el que viene por ahí? —dijo, mirando sobre mi hombro.

Tomé su muñeca y lo arrastré, caminando rápidamente en una dirección sin rumbo, intentando alejarme de la situación.

Cuando finalmente me detuve, observé a Soobin, que lucía completamente confundido. Me di cuenta de que estábamos en la azotea de la escuela.

—Besaste a Lee Heeseung, uno de los chicos más populares de la escuela, y él te correspondió. ¿Pero fue un error porque habías bebido demasiado? —me miró, aún dudoso.

—Exactamente. —afirmé.

—Muchas chicas querrán matarte si se enteran.