¿Alcohol o destino? ShikaSaku.

La mujer más perfecta que podía existir.

La mujer más perfecta que podía existir.

Los engranajes en la cabeza de Shikamaru se movían lo más rápido que podían, incorporando la información que Sakura acababa de darle, compaginándola con lo que veía y finalmente, intentando encontrar la forma de proceder.

Una parte de él, quería dejar que Sakura descargara su furia en ellos y disfrutar de como ella los dejaba, pero no podía hacer aquello, no por los tres hombres, sino por ella, no quería que luego le dijeran algo o la acusaran de cometer un delito contra el clan Nara.

-Sakura, ¿Sería mucho pedirte que me dejaras tu consultorio unos minutos? - le preguntó.

-De hecho, si lo es- lo contesto esta, manteniendo su tono mordaz. Pero al desviar su mirada y unirla a sus ojos, suspiro y soltó la ropa del anciano. Shikamaru agradeció el voto de confianza que ella le estaba dando la verla salir de la habitación.

-30 segundos, miéntanme lo suficientemente para que no los exilie del clan en este maldito momento-

-Esa mujer es una salvaje... - comenzó a despotricar Tanako, pero no pudo continuar.

-Mala respuesta. - lo freno en el acto- Se acordó, que bajo la condición de encontrar una esposa y engendrar un hijo, sería el líder del clan; aun no incumplí el trato, por lo que se entiende que soy jefe de los Nara. - hablaba con voz imponente el menor de los hombres presentes. - Se los espera para ser juzgados en dos horas, por traición la líder del clan- declaro, dejando a los otros tres pálidos ante sus palabras-

Intentaron hablar, pero Shikamaru no se los permitió. Los obligos a abandonar el hospital y les repitió el horario de su juicio cuando salieron de la habitación.

Sakura volvió a entrar a su propio consultorio segundos después.

- ¿No vas a exigirme una explicación? - le pregunto él, con la mirada gacha.

-No creo que me corresponda exigirte nada-

La respuesta de ella era tan simple y sencilla, y a su vez cargaba tanto peso. El Nara se dio cuenta entonces, que ella no lo presionaría a dar ningún tipo de justificación por lo que había sucedido.

-Quiero darte respuestas, te mereces respuestas- le dijo entonces a la chica frente a él. Se sorprendió por la sorpresa en las facciones de ella, ¿Era acaso que Sakura creía que no se preocupaba por ella y lo que sentía, sobretodo en una situación como esa?

Dio dos pasos adelante y coloco su mano en la mejilla de ella, acunándola en un mimo suave. Ella recargo su rostro en su palma.

-Creo que no tienes respuestas aun Shika- Le respondió. – Pero si tienes un juicio por lo que he podido oír, así que ve, encuéntralas, y luego me las cuentas, ¿Sí? – le sonrió, y el joven pensó que nunca nadie le había mostrado una expresión tan sincera y pura en su vida. ¿Cómo hacia Sakura para que sus ojos expresaran tanto amor y calidez?

El asintió y se inclino para besarla, fue lento y suave, como si ella intentara transmitirle que estaba ahí para él.

Luego de eso, Shikamaru salió del establecimiento, pensando en que no había podido decirle a la pelirosa aquello que había querido, mas que eso, termino estableciendo un juicio por traición interna en el clan.

Pero aparte de aquella preocupación, otra cosa rondaba en su mente. pensaba en ella, como había sido comprensiva, como lo había apoyado e incluso consolado.

Cerro sus ojos, y al segundo, los de ella aparecieron en su mente, aquel verde tan puro y a la vez lleno de determinación. En tan solo dos días había conocido tantas facetas de ella, apasionadas todas y cada una de ellas, pero la que le había mostrado hoy, no la guerrera cuando entro al consultorio, sino la comprensiva, llena de cariño, lo hizo sentir envidia y dudar de su propia inteligencia.

Envidia, e incluso un poco de odio, contra el ex equipo 7, por haber tenido y posteriormente despreciado tanto a aquella mujer que a sus ojos era perfecta y única, amable y amorosa hasta con un pobre diablo como él, incluso luego de escuchar todos los insultos que le dijeron aquellos miembros de su clan.

Y dudar de su inteligencia porque no podía creer como se había perdido de alguien como Sakura por todos esos años, como no pudo notar a alguien como ella tan cerca de él.

Camino con aquellos pensamientos dando vueltas por su cabeza mientras se dirigía al terreno que pertenecía a los Nara. Al llegar, pudo ver como las personas iban de un lado a otro tranquilamente, ignorando lo que estaba a punto de decir él sobre tres miembros de clan.

El juicio que se dio entonces fue largo y tedioso, pero todos los participantes coincidían en la indignación y vergüenza a la que los tres habían expuesto al clan con su atrevimiento. A pesar de eso, debido a el alto puesto que tenían los ancianos, y el renombre de Taro como segunda opción de líder, no podían tomar medidas tan extremas, más aún en el contexto de desorganización sin un líder propiamente coronado, entonces se los multo y se les otorgo una especie de prisión domiciliaria.

Saliendo de ahí, paso por el famoso Ichiraku ramen, comprando dos porciones de este y dirigiéndose a la casa de la pelirosa. De camino, paro en una tienda de sake, comprando 4 botellas también.

Sakura le abrió la puerta y le permitió entrar a su departamento. Quizá fue porque pudo ver lo cansado que estaba física y mentalmente, o porque supo leer que no estaba de ánimos ni para vivir, que no dijo ni una palabra.

Paso el ramen de los potes a platos, y sirvió el sake en pequeños vasos, asegurándose de rellenarlos a medida que los iban tomando.

Luego, le indico que recostara su cabeza en su falda, haciéndole mimos en el rostro y pelo, posteriormente pequeños masajes que lo fueron relajando, y cada tanto aplicó chacra para aliviar el dolor de cabeza que tenía.

Si, definitivamente a sus ojos, Sakura era 

Nota autora:

Feliz Navidad para todos los lectores! Espero reciban muchos regalos, acá les dejo el mío. 

PD. ¿Se los actualizo por si tienen una cena de navidad muy aburrida en familia? Nunca se los confirmaré 😉🤗🤐

PD2. Para los que también leen Extras, cargare un par de capítulos ahora mismo. 

Reitero, Feliz Navidad. 

Saludos, Jo.🖤🖤