Hate-Fuck-Love

Capítulo 4

Andy: Hola, soy Andy. ¿Quedamos esta tarde?

Borró el mensaje.

Andy: Soy Andy. ¿Quedamos para el proyecto?

Volvió a borrar el mensaje.

Andy: Chloe, soy Andy. Tendríamos que quedar para avanzar en el proyecto.

No estaba lo totalmente convencida de aquél mensaje tampoco, por lo que también lo borró.

- ¡Joder, qué difícil es esto! – Observó cómo su móvil vibraba y lo atrapó rápidamente. - ¿Diga?

- ¿Andrea Warren?

- Sí, soy yo.

- Soy Naomi. Te llamo de la empresa de contrato temporal. – Rápidamente Andy centró toda su atención en el teléfono. Ya conocía a Naomi de algunas ocasiones atrás, ya que la había conseguido un par de trabajos y era una gran amiga de la familia. – Han contactado con nosotros porque necesitan un par de camareros con buena presencia y experiencia. Así que les hablé de ti.

- ¿Habrás hablado bien de mí, no? – Preguntó con una sonrisa.

- Siempre has tenido las mejores valoraciones, lo pones difícil. – Respondió Naomi de manera amigable. – El evento tendrá lugar a apenas 20 minutos de donde vives.

- ¿Qué es exactamente?

- No nos han dado mucha información. – Respondió. – Pedían camareros con buena presencia y experiencia para un evento de cóctel que durará casi todo el día. Y pagan muy bien. – Añadió.

- No sabes lo bien que me vendrá el dinero. – Dijo de manera sincera. – Con todo esto de venir a la ciudad...

- Es una de las más caras del país. – La apoyó. - Intentaré darte todos los trabajos que pueda, cielo.

- Muchas gracias, Naomi. – Le agradeció con total sinceridad. - ¿Cuál es la dirección?

- No te preocupes por ello. A lo largo de la semana, te enviaremos la dirección así como el uniforme.

- ¿Cuándo será?

- Déjame un momento que lo vuelva a comprobar... - Hizo una pequeña pausa. – Este sábado.

- Suena bien.

- Y espero que vaya muy bien, Andy.

- Seguro que sí, Naomi. – Volvió a agradecer. – Muchas gracias, de verdad.

- De nada, cielo. Volveré a contactar contigo en unos días. Cuídate, ¿Vale?

- Tú también, ¡Y recuerdos a tu familia! – Colgó el teléfono y decidió tumbarse en el sofá, pensando sobre el mensaje que le debería mandar a la rubia. ¿Algo informal y directo? No entendía por qué le estaba costando tanto trabajo enviar un mensaje tan sencillo. Realmente no estaba segura de querer pasar tiempo con la rubia.

- ¿A qué viene esa cara? – Debs apareció a través de la cocina, apoyándose en el otro lado del sofá. – He oído lo del trabajo, ¡Tendrías que estar dando saltos de alegría! – Andy la miró y se reincorporó un poco.

- ¡Y lo estoy! - Contestó. – Pero tengo que enviarle el mensaje a Chloe, y no tengo ni idea de por dónde empezar.

- Te has acojonado cuando has visto la foto con su novio. En París. – Escupió la verdad delante de sus narices. – Y ahora no te atreves ni a decirle que tenéis que quedar para acabar con un proyecto.