Capitulo 21.

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La temperatura en la habitación cada vez era más alta, los sonidos de sus cuerpos chocando invadían todo en lugar. Sus pieles rozando mientras sus labios estaban tan juntos que podían ser uno solo, unidos en cuerpo y alma enredados entre sábanas, solo ellos dos.

—Xixi.

La voz seductora del alfa se escuchó en un susurro que el Omega apenas escuchó debido a sus fuertes gemidos, los toques en cada parte de su cuerpo le provocaban temblores que lo hacían retorcerse de placer haciendo que ambos llegasen por tercera vez al éxtasis. Recostados uno encima del otro esperando a que el nudo bajara, Juan yi, acariciaba y besaba el rostro de Zeng xi.

—Xixi, mi hermoso. ¿Podrías darme otro hijo?

—¿Y que vuelvas a desaparecer? No, gracias.

—Vamos, prometo no escapar. Quiero ver correr a otro mini-xixi por la casa.

—Ya dije que no y no quiero escuchar más, a menos que, ¿Quieres dormir en el sofá?

La mirada del Omega era tan amenazante que al alfa se le olvidó lo que estaba pidiendo, quedándose totalmente en silencio.

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                              He Tian.
    
                           —¿Dónde estás?

Mo le envío su ubicación, estaba en el departamento que este compartía con su hija.
He Tian, tuvo un extraño presentimiento sobre ese mensaje, ¿ Por qué de un momento a otro Mo quería verlo? Lo que pasó antes fue una burla y el pensaba que este no lo quería volver a ver.
Llegó al edificio donde vivía el pelirrojo, subió al ascensor, al llegar al piso de este logro ver a un hombre de pie en la puerta de su Omega, era el rubio que lo había golpeado antes, al verlo parado le hizo señas a He para que se acercará, más la mirada que le daba era de picos amigos.

—No pensé que llegarías tan rápido.

En este momento, He Tian entendió algo, talvez Mo no era el que había escrito el mensaje.

—¿Fuiste tú?

—Si.

La rabia empezaba a consumir al alfa, más al beta no le importó.

—Lo hice porque... Quiero mucho a Mo Guanshang y el por más que no lo admita te necesita. ¿Siquiera imaginas por qué te llamé aquí?

—¿Por qué no terminas de hablar? Ve directo al punto.

Mark se le acercó y He Tian se puso alerta, más este solo le tocó el hombro mientras pasaba por su lado.

—Prácticamente está sedado y la puerta está abierta, debes revisar su cuello, pero te advierto. Si le vuelves a fallar, date por muerto.

La mirada que le dió al alfa un gran escalofrío, a pesar de ser un beta, su aura era mucho más amenazante que la de muchos alfas.
Se quedó helado por un tiempo, hasta que escuchó que el ascensor se iba de ese piso. Despacio se dirigió a la puerta del apartamento, efectivamente estaba abierta, entrando el espeso aroma de las feromonas lo atacó de golpe e hizo que se marea un poco, este celo se notaba que era demaciado fuerte.

—Pequeño Mo.

Le llamó y pareció escuchá un apagado gemido de la habitación principal, cerró la puerta y fue directo allí.
Ahí estaba, recostado en la cama envuelto en sábanas y mucha ropas haciendo un intento de nido, completamente desnudo, su cuerpo estaba totalmente rojo temblando y jadeando por lo bajo, ni siquiera escuchó a alguien entrar, solo dedicándose a satisfacerse a si mismo.

—Mi pequeño Mo.

He Tian casi cae de rodillas al ver tal estado en el Omega que siempre se había mantenido firme delante de cualquiera, su alfa rugía por masticar ese manjar, se controló momentáneamente y avanzó hasta el. Quitándose el chaleco se lo colocó en la cabeza al Omega, este por fin se dió cuenta de que había alguien más, intento quitarse el abrigo, pero este le fue presionado para que no lo viera, el alfa estaba en un estada que verlo tan cerca haría perder el último rastro de razón que le quedaba.

—He Tian, suéltame. ¿Por qué estás aquí?

Mo, teniendo un momento de claridad pudo formular estas palabras, haciendo que el otro temblara.

—Perdoname, siento mucho todo lo que tuviste que pasar, pero... Pero, no pude hacer nada frente a el... Era muy débil, nunca creí que pasaría tanto tiempo lejos. Lo siento.

Mo buscó a tientas su rostro y lo acarició, notando que este estaba llorando, las lágrimas caían una tras otra mientras se empezaba a escuchar un débil sollozo. Este Omega se quitó el chaleco a la fuerza y lo dió un pequeño beso, haciendo que He Tian reaccionara y lo viera a los ojos.

—Esta bien, te perdono. Sé que no fue tu culpa. Ya... ya no llores, por favor.

He Tian, lo sostuvo por la nuca y lo beso intensamente, un beso profundo y necesitado, que enseguida fue correspondido.

—Te amé, te amo y no dejaré de amarte nunca, déjame quedarme en su vidas como debí de hacerlo al principio.

Con un suspiro, Mo asintió. Su expresión cambió por un momento como si hubiera recordado algo, se giró un poco quedando de espaldas a He Tian y señaló su cuello.
Al verlo la sonrisa del alfa no podía ser más grande, abrasó a Mo y besó desde la nuca hasta la espalda, para luego girarlo y besar sus labios.

—¿Eso es, un sí?

Asintiendo con la cabeza emocionado Mo dijo.

—Si.

Lo que le mostró a He Tian, era nada más y nada menos, que la marca de su unión que misteriosamente volvió a aparecer, pero estando ahora juntos de nuevo poco les importó.

FIN.

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BUENO MI GENTE, AHIRA SI SE ACABÓ.

Lamentablemente, esta era la sorpresa. Jajajajajaahhaja.

Disculpen si los hago sufrir, pero la verdad aquí no acaba.

Estaré subiendo una serie de extras, dos completando algunas cosas y dos más mostrando su vida después de esto.

Sin más les deseo un FELIZ AÑO NUEVO. (por sia no alcanzo a subir el primer extra mañana, mi abuela y mi mamá me tienen haciendo de todo xd)

Bueno cuidense.
Si tienen dudas de algo en la historia o quieren leer sobre algo en específico en los extras de su vida, por favor comentenlo.
Chau.

Querido Mo. (19 Days) (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora