Punto de vista de Marcos.
Si solo pudieran imaginarse las miles de sensaciones que causaba en mí despertar y que lo primero que ves sea Alejandra, creo que todos se enamorarían de ella de la misma forma en la que yo lo estoy. Estoy locamente perdido por ella.
Estas dos semanas en Dubái con ella habían sido de los más espectaculares, habíamos visitado absolutamente toda la ciudad y habíamos salido hasta las tantas de la madrugada donde pude ver mientras bailamos cómo sonreía.
Claro que el miedo de que Neymar levantase el teléfono y ella volviese a salir corriendo a por él existía, pero confiaba en ella y sé que cada día lo tiene más lejos de su mente.
Ahora habíamos vuelto a Madrid, en la madrugada de ayer, pues hoy ya tenía el primer entrenamiento ya que este fin de semana se jugaba la primera jornada de liga.
En el vestuario se me acercó Rodrigo de Paul, un imbécil que no me termina de caer bien, pero por la salud de mi equipo tengo que callar y poner buena cara.
—Oye Marcos. ¿qué tal con Alejandra? —me preguntó, yo le miré sorprendido mientras me ataba las botas.
—Muy bien, ¿por qué? —pregunté.
Koke se puso a mi lado en cuánto se percató que habían mencionado a Alejandra.
—No, nada. Lo digo por todo lo que dicen de ella por redes sociales. —fruncí el ceño, no tengo ni puta idea de lo que dice el gilipollas este.
—¿Qué están diciendo de Ale? —dijo Koke.
Rápidamente saqué el móvil y me metí en twitter, efectivamente, por tendencias estaban mi nombre y el de Alejandra, y lo malo no es lo que decían de mi, es lo que decían de mi novia.
«busca la fama claramente, ha estado con Neymar dos años y ahora se ha ido a por Llorente que sabe que es la nueva promesa»
«Como esa tal Alejandra que ni sé quién es, ni me interesa. Desconcentre a Marcos, le arranco la cabeza. 1er aviso.»
«¿alguien de verdad cree que esta chica ha querido a Neymar o Marcos y no su dinero?»
—joder, Alejandra, debe estar que trina. —dijo Koke mirándome.
—al revés, va a estar fatal. —le dije a mi amigo.
—conociendo a Ale, no creo, tío. No te rayes.
—Kok, Esto que están diciendo de Ale, es justo lo mismo que le dijo Neymar en Río y luego salió corriendo llorando de allí. Ella es muy fuerte, pero todo esto le duele. —le expliqué.
—oye. —puso Rodrigo su mano en mi hombro. —Deberías replantearte estas cosas, eh. Se ve que esa chava no tiene la azotea muy bien que digamos.
—Cállate, no tienes idea de quién es. —dijo Koke entre dientes.
—Bueno los actos hablan por sí solos, no me extrañaría que se hubiese follado a Eric. —apreté la mandíbula y cogí a ese tío por el cuello y lo estampé contra la taquilla de Luis.
—¡Vuelve a hablar a así de mi novia y te mato! —le dije sin soltarle el cuello.
—Es la verdad, si no te das cuenta es que estás ciego. —dijo bajo mi agarre.
Le di un puñetazo a la taquilla por no dárselo a él, entonces Koke vino a separarme de él y el míster también.
—Marcos, Marcos. —dijo el míster separándome de ese ser. —Estas muy alterado, muchacho. Deberías irte a casa.
Yo no dije nada, solo acaté órdenes y me fui a casa que era el verdadero lugar donde quería estar, con mi novia para abrazarla y decirle que la quería y que no me iba a creer una sola palabra de todo lo que dijeran los seres asquerosos de redes sociales que no la conocían.
Al llegar la vi sentada en el sofá con el ordenador encendido haciendo skype con Carla y Eric.
—Hola. —le dije sentándome a su lado y dando un beso en su mejilla.
—¿te has enterado? —preguntó mirándome con sus ojitos bonitos tristes.
—Sí.
Ella suspiró echándose para atrás.
—Le he dicho que deje de rayarse, porque nadie la conoce y no saben lo que siente. —dijo Eric, yo le di toda la razón.
—Además lo importante es lo que pensemos nosotros, pequeña. Yo te garantizo que no me creo nada de eso. —le tomé la mejilla.
—Lo sé, pero es que no me siento bien con la gente hablando de mí por ahí, mientras me acusan de desconcentrarte en el campo. —puso su mano en su frente.
—Pero es que a ti la gente te la tiene que sudar, ¿qué piensas que de mí están diciendo cosas bonitas? Pues no, somos las novias de dos futbolistas muy codiciados y es algo a lo que acostumbrarse es obligatorio. —dijo Carla, Eric la mira.
—tú eres mi mujer. —zanjó el catalán.
—Bueno eso qué más da ahora, Eric.
—Quería dejarlo claro.
Alejandra suspira en la discusión de los dos que estaban al otro lado del ordenador.
—Sé que lleváis razón, pero cosas como estas es lo que me rayaron con Neymar y no quiero pasar por eso otra vez, fue muy duro. Y cosas como estas afectan mucho a mi trabajo. —dijo mirándome realmente preocupada.
Me entraron los siete males por dentro, cogí el teléfono y conecté un directo de Instagram.
—Esto lo arreglo yo. —dije antes de que conectara.
—¿Qué haces? No, Marcos. Déjalo. —dijo Ale, intentando quitarme el móvil, pero no lo consiguió.
—Déjalo Alejandra, si alguien puede pararlo es él. —habló mi amiga.
—Hola a todos, vengo a dar mi opinión sobre un tema que está bastante mencionado por redes sociales y es respectó a mi relación con Alejandra González, la ex de Neymar. Pero ella es más que eso, ella es vida, es mi vida, mi mundo y un persona que ilumina mis días y nadie de ustedes es quien para decir como debo actuar con ella o quien es bueno para mí o no. Solo quiero que sepan que estoy con ella, que vive conmigo en Madrid y que vamos a durar muchísimo y que la amo. —miré a Alejandra y estaba sonriendo. Luego desvíe mi atención de nuevo hacia el teléfono. —es que realmente si la vieran despertar y sonreír por las mañanas nadie estaría hablando así, llevo soñando con estar con ella desde que la conocí cantando Rihanna en la bañera en Sevilla. Dicho esto, nada más que hablar, espero que la próxima vez que sea tendencia en twitter sea porque he marcado en la final de champions o porque me voy a casar con ella y todos se alegran mucho, de lo contrario quiero que se metan en sus vidas y dejen de opinar de la mía. Muchas gracias.
Corté el directo y miré a mi chica.
—Y se acaba, a partir de ahora. Solo somos tú y yo. —la besé con suavidad.
—¡coño que seguimos aquí! —gritó Carla. Al otro lado de la línea.
—Que babosillos Sois. —dijo Eric.
—Cuidado que hablaron los que me echaban de la habitación para follar.
Estuvimos toda la tarde haciendo skype con estos dos, ellos incluso cenaron conectados y nosotros vimos una película.
Me sentía en paz, Alejandra estaba conmigo y casi que no me lo podía creer. Sentía que era capaz de comerme el mundo con ella a mi lado.
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OFFSIDE -Marcos Llorente
FanfictionPara Alejandra el amor siempre había estado en un constante fuera de juego, hasta que llegó él, la única persona que la hizo entrar en el campo. Una historia de Marcos Llorente y de la selección española, mezclada con amor, risas y amistad.