Loki & Malie

3

Vio cómo la pelinegra auxiliaba al hombre de metal a su lado, se acababa de colapsar. Cuatro a su lado, custodiándolo debido al caos en el recibidor y no se percataron que el teseracto rodó hasta su pie, así que se agachó y lo tomó antes de desaparecer, dejando atrás a la chica y a su hermano. El portal se abrió y cayó con fuerza en el desierto, la sacudida fue casi tan grande como la recibida por parte del monstruo verde. Escupió la poca arena que logró colarse entre sus labios, se enderezó y cinco lugareños lo veían inquisitivamente, no todos los días alguien caía del cielo y sobrevivía. Se levantó con rapidez y subió a una roca.

—Me llamo Loki y vengo de Asgard y descansa en mí un glorioso propósito.

—¿Quién eres? ¿Por qué viniste a nuestro hogar?

—Ah...— estaba por objetar cuando una especie de puerta se abrió a unos pasos suyos y de él salieron tres uniformados—. Olvídenlo— avanzó hasta ellos—. No lo toquen.

—Parece una típica violación de secuencia— habló una mujer uniformada, salida de otra puerta que se cerró tras de sí—. La rama crece a velocidad y curvatura estables, variante identificada.

—¿Cómo me llamó?

—De parte de la autoridad de Variación Temporal, quedas arrestado por crímenes contra la Sagrada Línea del Tiempo. Ríndete, tú vendrás con nosotros.

—Sí, pero, ¿quiénes son?

—Te lo advierto, variante— los cuatro agentes apuntaban sus armas al dios, quien solo reía con ironía, como si de una mala broma se tratara.

—Hoy fue un día muy largo y creo que ya me harté de idiotas con armaduras diciéndome qué hacer, así que, si no les importa, seré yo quien les advierta a ustedes. Ahora, quítense de mi camino— se dispuso a avanzar, la agente que habló hacía un momento, fue quien lo golpeó con el mango en el rostro.

—Te mueves a un dieciseisavo de velocidad, pero sientes todo en tiempo real— habló mientras le colocaba un collarín. El dios cayó y los agentes tomaron custodia, lo levantaron y llevaron—. Receten la línea del tiempo.

Colocaron un aparato en el suelo que se encargaba de ello antes de atravesar toda esa especie de portal. Loki se quejaba, la agente llevaba la gema en la otra mano, sorprendentemente, podía sostenerlo sin ser afectada. Lo condujo por un pasillo hasta el recibidor, parecía como de un edificio administrativo—. ¿Dónde estamos? — intentó huir, pero regresó al inicio.

—Levántate.

—Estás cometiendo un error.

—¿Cómo está? ¿Bien?

—Archívalo como evidencia.

—¿Al menos puedo saber qué es?

—Es el teseracto, ten mucho cuidado con él— sentenció Loki.

—Suena absurdo.

—Escucha, hazme enfadar y las consecuencias serán fatales.

—No me digas— habló antes de empujarlo dentro de un especie de elevador. Loki quedó solo en la oscuridad antes de que una máquina intentara maniobrar con él, a lo que se quejó un momento antes de que la luz se encendiera.

—¡No me toques con eso! Esto es fino, es cuero asgardiano.

—Quédate quieto— murmuró la máquina antes de deshacerse de su ropa con un láser.

—Solo dame un momento...— no pudo terminar porque la trampilla del suelo se abrió y Loki cayó un nivel, ya traía ropa, frente a él un escritorio y una pila de papeles con una pluma encima.

—Firma para aceptar que es todo lo que has dicho en tu vida— habló el hombre detrás del escritorio.

—¿Qué? — se desconcertó el dios. La impresora al lado del escritorio imprimió una nueva hoja.

—Este también.

—Todo esto es absurdo.

—Y este— resignado se acercó a firmar, una nueva trampilla se abrió, se paró frente a un marco de puerta.

—¿Puede confirmar que a su entender no es un ser cien por ciento robótico, nació orgánico y claramente posee lo que muchas culturas llaman un alma? — dudó un hombre bajo, canoso y con una prueba en las manos.

—¿Qué? ¿Cómo a mi entender? ¿Muchas personas no saben si son robots?

—Gracias por su confirmación. Pase, por favor.

—¿Y si soy un robot y no lo supiera?

—La máquina lo fundiría desde adentro. ¿Puede avanzar, por favor?

—No soy un robot, voy a estar bien— caminó con tiento y un flash le iluminó el rostro, luego una impresión salió del marco.

—¿Y eso qué es?

—Su aura temporal.

—¿Qué? ¿Y qué es?

—Pase esa puerta.

—Tome un turno— dijo el agente que le recibió.

—Solo somos dos personas.

—Que tome un turno— Loki obedeció y le mostró el papel antes de guardarlo en su bolsillo y avanzar.

—Yo no tengo que estar aquí, cometen un error.

—Hola, probablemente estés diciendo: no debo estar aquí, están cometiendo un error. Bienvenido a la Autoridad de Variación Temporal, soy Miss Minutes y es mi deber contarte qué es lo que pasa antes de que vayas a juicio por tus crímenes, así que no perdamos un minuto más. Así que siéntate, prepara tus lápices y toma nota. Hace muchos años hubo una extensa guerra multiversal, incontables líneas del tiempo únicas lucharon entre sí por la supremacía, lo cual casi provoca la destrucción total, bueno, de todo. Pero emergieron los omniscientes guardianes del tiempo y trajeron la paz al reorganizar el multiverso en una sola línea del tiempo: la Sagrada Línea del Tiempo. Ahora, los guardianes previenen y preservan el flujo correcto del tiempo para todos y para todo, pero a veces, gente como tú se desvía del camino que crearon los guardianes, a ellos los llamamos Variantes. Tal vez iniciaste un levantamiento o solo llegaste tarde a trabajar, lo que haya sido, salirte de tu camino causó un evento nexus, que, si no se controla, puede ramificarse hacia la locura y crear otra guerra multiversal. Pero tranquilo, para asegurarse que eso no pase, Los Guardianes crearon la AVT y a todos sus increíbles trabajadores. La AVT se ha encargado de enmendar tu error y ha regresado el tiempo a su camino predeterminado, ahora que tus acciones te han dejado sin un lugar en la línea del tiempo, deberás ir a juicio por tus ofensas, así que ponte cómodo y te asignaremos un juez en un momento, solo asegúrate de tener tu turno y te recibirá nuestro asistente disponible. Eternamente siempre.

—Ja. Guardianes del tiempo. Sagrada línea del tiempo. ¿Quieren que me crea este montón de...

—Su turno, señor.

—No quiso darme un turno, traté de pedirle un número. ¿Quién te crees para alzarme la voz, cabezón de metal? Le diré a mi...— Loki vio cómo desintegraban al que objetó.

—Tengo mí...— comenzó a buscarse entre su ropa, no quería terminar igual que él.

—Gracias por visitar la AVT, no dudes en evaluar nuestro servicio— dijo Miss Minutes.