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Arc_3 (Registro 03)

Registro 03:

Agosto 23, 2544:

Varios años han transcurrido desde el inicio de todo, la caída de Makoto fue el desencadenante de los sucesos tanto malos como buenos. Las operaciones planeadas durante ese tiempo fueron completadas, nuevas islas fueron puestas en servicio, creando así hogares, las naves espaciales dejaron de ser un prototipo y pasaron a ser una realidad, junto a todo el equipo necesario, operaciones de exterminio llevadas a cabo sirvieron para disminuir casi la totalidad de los Kujos, y por supuesto, la cantidad de armamento y personal para los Reapers aumentó, así como su disponibilidad de recursos. Aunque no todo es color de rosas, al igual que avances, también hubo desgracias durante en ese periodo de tiempo, rayos de luz provenientes de Marte causaron estragos entre la población, ¿la razón?, nadie puede responder, pero la solución ha sido mantener las islas en el lado oscuro del planeta, haciendo que las personas vivieran en una noche permanente, era eso o morir calcinado. Los controladores de las islas tienen que mantenerse alerta por la más mínima falla en la energía de los motores, los motores estaban hechos para aguantar, pero debido al tiempo de uso continuo, estos podrían demostrar desgaste muy rápido, por lo que se necesitaba mantenimiento y monitorización constante. Por otro lado, tenemos a las personas que están listas para el viaje, nerviosas y con un miedo que crecía a medida que las dudas iban y venían, era un futuro incierto y que nadie se esperaba, pero era algo por el bien mayor.

Makoto ahora tenía veintitrés años, estaba posando sus brazos en las barandas de una pasarela de la torre que mantenía al cohete en su lugar de despegue, su cara se veía un poco más adulta y con algunas cicatrices, miraba al frente y podía ver el emblema de las tres divisiones de los Reapers grabadas en ella, detrás de ella se veían naves hasta donde la vista podía alcanzar, todas desprendían el humo debido a la temperatura de su combustible, todas estaban iluminadas por numerosos focos, el viento frío de la mañana oscura soplaba mientras la isla se movía para mantenerse por el lado oscuro de la tierra.

—Hoy es el día, tras tanto tiempo —Dijo, recostando su cabeza en el barandal y suspirando.

Algunas personas pasaban por detrás de Makoto, eran los responsables de que el lanzamiento saliera bien. Los Reapers ese día solo debían prepararse para partir, y despedirse de las personas que ellos consideren especiales, era un momento muy tenso para todos. El general casualmente estaba caminando por la misma torre en la que estaba Makoto, no tenía mucho que hacer en ese momento, no tenía de quién despedirse o de qué sentirse mal por irse de allí, pudo notar que Makoto estaba en el barandal, y decidió acercársele.

—Hoy no es exactamente un buen día para ser Reaper, ¿eh? —Dijo para abrir conversación.

—Depende de cómo lo vean algunos, pelear por el bien, o solo ir a morir... Luego estoy yo, que solo va porque está obligado por tener el poder que tengo.

El general soltó una pequeña risa, y le dio una palmada en la espalda, sabía cómo era su posición dado que él estaba en una posición similar, uno debía pelear en primera fila y el otro debía dirigir a todo un ejército, junto a otros más.

—No eres el único, ambos tenemos situaciones apretadas, pero una vez que todo termine estaremos bien. Has entrenado sin parar durante años, creo que tienes la suficiente habilidad.

Eran unas palabras de ánimo vagas, pero lograron su objetivo en Makoto, tenía más confianza en él mismo y en su poder, junto al Vraxart podría pensar que pocas cosas saldrán mal. Makoto levantó su rostro y se alejó del barandal, sintió que era hora de prepararse y despedirse de sus hermanos.

—No lo sabremos hasta que pase, por ahora solo podemos seguir pegados al plan —Dijo, sonriendo y retirándose —Nos vemos, señor, volveré antes de la hora establecida —Alzó una mano en señal de despedida.