Mi "Hermana" Anastasia

CAPITULO 15

Anastasia

Desde que salimos de casa de nuestros padres, Christian ha estado muy distante e indiferente.  No me ha hablado y eso es muy extraño en él.  Creí que estaba alegre por las noticias que le di. 

Una vez llegamos al Escala, se encerró en el estudio, así que subí a mi habitación con una extraña sensación de ansiedad, pero sabiendo que debo darle su espacio para que se calme de lo que sea que le esté molestando.

Me quito el vestido y me pongo un camisón para para tratar de dormir.  Sólo son las diez de la noche y no creo que pueda conciliar el sueño.  Me inquieta mucho la actitud de Christian.

Después de media hora dando vueltas en mi cama intentando dormir, recibo un mensaje de Christian pidiéndome que vaya a su estudio.  Eso me hace sonreír.  Bajo inmediatamente necesitado saber lo que le sucede.  Sólo esta tarde era el hombre más dulce y ahora simplemente cambió.

Toco a la puerta y entro cuando me dice que pase.  Es mejor ser precavida con él en este momento.  Christian está sentado en su escritorio y me señala una silla enfrente para que me siente.

⎯Bien, Anastasia.  Ya me aburrí de jugar a la parejita feliz, así que te quiero hacer una propuesta.

¿Jugar?  ¿Él sólo estuvo jugando conmigo todo éste tiempo? 

Estoy impactada, no puedo articular palabra.

⎯Tomaré tu silencio como un sí.  Mi propuesta es esta... Quiero que seas mi sumisa.

¿QUE?! Esto no me lo esperaba.

⎯¿Por qué? ⎯digo conteniendo el aire temiéndome lo peor.

⎯Ya te lo dije...  Me cansé de jugar

⎯¿Eso en qué cambia nuestra relación?

⎯En todo.  Sólo tendremos sexo en mi cuarto de juegos o cualquier lugar de la casa en caso de que se me antoje, no volveremos a dormir juntos, me llamarás señor o amo, no podrás mirarme a los ojos y me obedecerás en todo, todo el tiempo.

¿Qué mierda está diciendo?...  ¡Que se joda!  Yo no soy un juguete de nadie.

⎯No acepto.

Me tenso al escuchar su sarcástica sonrisa que me hiela hasta los huesos.

⎯Creo que no entiendes.  TÚ eres MÍA.  ME perteneces.  y haces lo que YO quiero ⎯dice rodeando el escritorio y agarrándome la barbilla para que lo mire a los ojos.

Me suelto de su agarre y me levanto enfurecida.

⎯Yo no te pertenezco, no le pertenezco a nadie ⎯gruño enfrentándolo, pero me mira con fastidio y siento que lo odio⎯. Yo te quiero Christian, pero no voy a participar en éste jueguito tuyo.  Tal vez, sólo tal vez, si me lo hubieras pedido con otra actitud, tu hubiera dicho que sí.  Pero en las últimas horas sólo he visto odio hacia mí de tu parte y con esta "propuesta" sólo puedo pensar que quieres hacerme daño.  Así que me voy.  Adiós Christian.

Salgo del estudio y Christian no me sigue.  Parece que sí me va dejar ir.  Tal vez sólo quiere deshacerse de mí.  Subo corriendo a mi habitación sin aguantar mis lágrimas y me coloco algo de ropa lo más rápido que puedo.  Empaco todo, lo más rápido que puedo y bajo para irme de este lugar.  Cuando llego al salón, está Christian esperándome y hablo antes de que él abra su boca. 

⎯Yo no soy una sumisa, a mí me gusta luchar y defenderme, nunca esperes de mí que baje la cabeza o que me arrodille, a pesar de mi pasado.  NUNCA me he dejado pisotear por NADIE y TÚ no serás el primero.  He vivido para ayudar a las personas que Steve ha lastimado y me he esforzado para destruirlo y dejarlo sin nada.  Eso es lo único que quiero para vivir mi vida tranquila.  No sé lo que hice para que me trates de esta manera, pero aun así te pido perdón.  Adiós Christian.

Me voy de su apartamento sin volver a mirarlo.  Pero sé que lo he descolocado...

Christian

Anastasia se ha ido, me dejó...  Soy un idiota...  No era a mí quien iba a dejar sin nada, era al imbécil de su padre...  Y yo la he maltratado.  Ahora me dejó.

⎯TAYLOR ⎯grito.

⎯Señor. ⎯dice entrando al estudio.

⎯Rastrea el celular de Anastasia

⎯Si, Señor.

Minutos después llega Taylor con el celular de Ana en la mano.  Mi única reacción es tirar todo lo que hay sobre mi escritorio para tratar de sacar algo de mi frustración.  Se iba a quedar por mí y no confié en ella.  Ella valora la confianza sobre todas las cosas y yo lo estropee.

No sé cuánto tiempo llevo aquí en mi estudio, solo quiero tomar, para no olvidar.

⎯Señor.

Levanto la cabeza y Taylor me mira con pesar.  Yo no necesito su lástima.

⎯¿Qué sucede, Taylor? ⎯gruño.

Que se vaya con su lastima para otro lado.

⎯Su hermano llamó.  La señorita Anastasia está en el hospital.

Que mierda...

⎯¿Qué le sucedió?

⎯No me dijo mucho, señor.  Sólo que está golpeada.

Joder...  Quien le ha hecho algo así a mi niña.

⎯Llévame ya, Taylor.

Llego al hospital y encuentro a toda mi familia en la sala de espera igual de desesperados que yo.  Me acerco y mi madre me abraza.

⎯¿Qué han sabido de Ana, mamá?

⎯Nada hasta ahora, hijo.  Su amiga Katherine y tu hermano están con ella.  Ven siéntate con nosotros.  Quise pasar, pero Ana hizo que me sacaran concluye acongojada.  Otra vez la está apartando.

Esto es mi culpa, si no la hubiera tratado mal ahora estuviera conmigo en casa, en mi cama metido entre sus piernas.

⎯Elliot ⎯escucho decir a Mia y veo a mi hermano caminar hacia nosotros.

⎯Parece que está mejor ⎯dice rodando los ojos⎯.  La van dejar en observación y mañana le dan de alta.  Katherine se va a quedar con ella y dice que mañana la pueden visitar en su casa.

⎯¿Su casa? ⎯pregunto.

⎯Sí.  Al parecer todavía nos hace falta conocer más facetas en la vida de nuestra hermana ⎯dice Elliot

⎯¿Quién le hizo eso?  ¿Quién la atacó?

⎯Nadie la atacó, en realidad, la he visto mucho peor.  Kate me dijo que Ana suele participa en peleas callejeras.  Eso me explicó muchas cosas.  La encontramos en uno de esos lugares, no podía caminar por una fractura y además estaba casi desmayada por tanto alcohol.

No me puedo creer que Anastasia arriesgue su vida de esta manera.

⎯¿Tú sabías de esto?

Mi idiota hermano se encoge de hombros.

⎯En varias ocasiones tuve que ayudarla a entrar a casa para que no la vieran ⎯inquiere mirando a nuestros padres y estos se alarman.

⎯Por Dios ⎯susurra mamá abrazando a papá y éste cierra los ojos aferrándose a su esposa.

No lo sabía.

⎯Necesito verla, Elliot.

⎯No serviría de nada, déjala descansar.

Me agarro la cabeza y me siento alejado de todos.  ¿Qué es lo que está pasando en la vida de Ana?

Mamá, papá y Mia se van a descansar, igual no hay nada que puedan hacer aquí.

⎯Por favor, Elliot.  Dile a Katherine que yo la quiero cuidar ⎯le suplico.

Mi hermano asiente y se va.  Al rato vuelve y se sienta a mi lado.

⎯Ana me dijo que no quiere verte.