Amor sobre hielo [Louis Partridge]

|CAPITULO 28|

Louis

Después de que mis hermanas y Meg se fueran a la pista de patinaje y me alegra que se lleven bien, estaba con Anthony, Zach y Asher con unos dardos y tratando de tirar el circulo del centro. Por otro lado, de reojo miraba a Meg, divirtiéndose con Millie e Issie, daban vueltas por el hielo, valla se llevan comí si se conocieran desde hace años.

Pero lastimosamente no todo es, que no todo es para siempre como la felicidad, tal vez sea por un momento. Y deseo que solo lo sea así.

—Megan...hey...hey, hey.

—¿Qué fue lo que ocurrió? —. Pregunto Anthony desesperado por ver el estado de Megan, yo solo tome sus mejillas y tratar de hace algo, pero, obviamente no hacia nada.

—.....que contenía el pastel o algo que consumió?! —. Llego su madre junto a Owen, con el teléfono al oído, llamando a una ambulancia.

—por favor...Meg, estarás bien, tranquila. —acaricie su cabello. Pero ella solo estaba empeorando. —por favor, no te vallas.

Mis ojos comenzaron a picar.

—estamos contigo.

—no nos dejes, Grillo.

Meg, solo por su boca salía un liquido negro rojizo y otra especie de liquido café, como si consumiera un veneno.

La madre de Meg, se incoó a nuestro lado y tratar de despertar a Meg, desesperada y llorando. Y parecía saber lo que ocurrió.

Oh, por dios Meg. No debí darte ese pastel.

Y me sentía tan mal por eso.

La ambulancia había llegado, su madre fue la que subió con ella junto a Owen.

Estaba tan asustado, no quiero que le pase nada malo.

—hey, hey, Louis—. No me había dado cuenta que Anthony me estaba llamando y me saco de mi estado de shock jalándome del brazo e irnos todos en los autos y llegar al hospital.

Sin poder evitar que mis ojos se empiecen a cristalizarse lentamente. Y Anthony repetía miles de veces que no era mi culpa, de nadie.

***

Teníamos como treinta minutos en el hospital, yo estaba sentado en las sillas metálicas con mis codos en mis rodillas y tomándome de la cabeza, dejando ir pequeños sollozos.

Mis padres, mis hermanas, el señor Owen, la madre de Meg, Jolie. Anthony...Zach y Asher, todos estaban aquí. Y estaban preocupados, no hemos tenido ninguna noticia sobre Meg.

Mi madre se sentó a mi lado para luego abrazarme y romper en llanto.

—es mi culpa....

—shh, nada de esto es tu culpa, cariño.

—lo es....—.me aferre más a mi madre y de mis ojos las lagrimas eran como un rio.

—no, no lo es. Tranquil todo estará bien.

***

Cuatro horas, cuatro malditas horas y aún no había noticias.

Anthony se acercó a mi dándome el café que le había pedido, ya que el iría por uno. No quería dormir, solo quería asegurarme de que Meg este bien.

Que gran Navidad. Ahora son las cuatro de la mañana. Y gracias al cielo que el doctor salió de la habitación. Quitándose unos lentes y nos miro y en la comisura de sus labios se fue formando una sonrisa. Todos suspiramos de alivio. Y dijo: