LA PROPIEDAD DEL MAFIOSO

Capítulo 50

Klhey.

Quería a Jenni

El verla reírse me da tanta alegría y el que esté roja por las carcajadas solo me hizo llevarla al baño para lavar su cara y hacer que se calmase antes de que su madre la viera toda agitada

_Daniels ya está la cena! —dijo Lisa caminando de la sala a la cocina junto con Pilar

No quiero que siga llamándome así

Senté a la blanquiñosa en su mesa comedor en medio de su madre y yo

_Sientate con nosotros Pilar —le dijo

_Yo puedo...

_Que no! —le sonrió — Anda, siéntate

Pilar no refutó y se sentó con nosotros

La verdad, yo no tenía costumbre de comer en la misma mesa ni siquiera con Martha, pero a Lisa le gusta así con Pilar y a mí no me desagrada

_Señor —la miré— La señora me dijo que estaría aquí toda la semana, querrá que prepare cierta comida en específico?

_ —comencé a comer— No te molestes Pilar, yo como de todo

_Mami agua!

_Se dice porfavor —le habló calmada

_Pofavo mami agua

Le sonreí

Era preciosa

_Mañana podemos ir a almorzar fuera —sugerí

_A comer fuera? Pero y el trabajo?

_Podemos ir normal, reunirnos todos en el restaurante a la hora del almuerzo y volver después

_Entonces Pilar y Jenni...

_Mandaré a Dante por ellas

Pilar se quedó con la comida en la boca y los ojos abiertos viendo un punto fijo

_Claro —contestó Lisa dándole una mirada rápida — Entonces vamos con Taylor y Sara también?

_Sí —asentí

_Es en... Un lugar elegante o modesto —sonrió— Digo, para vestir a Jenni de acuerdo a la ocasión

Mi mujer le dio una sonrisita que quería decir más que eso y no sabía a qué demonios se debían esas miraditas

_Es un poco costoso, ambas vístanse bien

_De acuerdo —siguió comiendo

_Al terminar te dejaremos con Jenni, quiero ir con Lisa un rato a caminar por el bosque

_Caminaremos por el bosque —sonrió— Jamás lo hice de noche

_Iremos —le sonreí

Terminamos la comida casi en silencio pero cuando llegó la hora de salir la bebé comenzó a llorar extendiendo los brazos hacia mí

_No se preocupe señor yo la calmaré

La pobre Pilar trataba de meserla pero Jenni seguía llorando

_Salgamos ya — me sacó Lisa — Si nos quedábamos más tiempo iba a llorar más

_Ya no quiero dejarla, mejor llevemosla con nosotros

_La noche esta fresca y se puede enfermar, además ya te dije que nunca caminé por aquí de noche, me da miedo igual que pueda aparecer algún animal

_No hay —la tomé de la mano apegandola a mí para caminar —
A qué se debía la sonrisita a Pilar?