Capítulo 109

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Lisa.

Desperté dando un Bran bostezo y estirándome en la cama, una punzadita en mi vagina me hizo gemir de dolor y entonces todo vino a mí de inmediato

Mierda! Había dado a luz a mis hijos en la puta camioneta!

Miré a mi alrededor asustada y respiré tranquila cuando vi a Klhey dormir en el sillón a lado

Sonreí, de solo pensar en como se puso recibiendo a sus hijos me da risa, muy Mafioso y todo pero bien que se estaba cagando del miedo y los nervios

Pero mis hijos, quiero verlos

Apreté el botón rojo que estaba cerca a mi mano y una enfermera entró en seguida, le hice el gesto de que guardara silencio por Klhey y se acercó con cuidado

_Buen día señora Hemmings
—susurró amable

_Buenos días —le sonreí—
Quisiera saber cómo están mis bebés

_Los gemelos A y B están en perfecto estado señora

_A y B? —fruncí el seño y rió despacio

_Cuando llegó usted estaba desmayada y el señor se desmayó al poco rato después, no sabíamos que nombres darles

Reí ante el pensamiento, se desmayó

_Dijo que no le pondría los nombres hasta que usted despertara
—siguió susurrando

_Y yo... Estoy bien?

Me sentía bien

_Lo está señora, el doctor tuvo que darle unos puntos de costura por el parto pero nada más que eso, es normal si siente un poco de incomodidad

Solo lo sentí cuando me estiré

_De acuerdo, muchas gracias

_De nada señora, puede levantarse ya de la camilla si usted quiere, si gusta puedo acompañarla al baño

_No se preocupe señorita —le sonreí agradeciendo el gesto

La enfermera se despidió y salió de la habitación dejándome sola con el bello durmiente, pude apreciar en el reloj que estaba colgado que eran las las 8:25 de la mañana

Decidí levantarme sin hacer el menor ruido posible, quise hasta reír por el dolor de mis partes al sentarme, no era demasiado, era soportable

Me estabilicé y caminé como pingüino al baño, pensé seriamente en gritarle a Klhey que me ayudara pero al final pude hacerlo sola, con cuidado.
Y luego me lavé los dientes

Me miré en el espejo y el autoestima se me cayó por completo, quedaría así acaso? No, me rehuso!

_Lisa? LISA?! —lo oí levantar la voz y me apresuré en salir

Cuando sus ojos me enfocaron esbozó una gran sonrisa y se acercó a mí de golpe abrazándome fuertemente contra su pecho

No perdí el tiempo, lo tomé de la cara y lo llené de besos

_No sabes cuánto te amo de verdad
—murmuró besándome la mejilla—
Gracias muñeca, muchas gracias

_Cómo son? —lo abracé por la nuca

Sé que los he visto en ecografías pero aún así me da emoción, incluso recuerdo bien cuando nacieron, sin embargo no los pude detallar muy bien ya que estaban llenos de grasa y sangre

_Iguales a este humilde servidor

Rodé los ojos riéndome, eso ya lo sabía

_Uno tiene una marca de nacimiento en el hombligo y el otro por las costillas

_En serio?
—el pecho se me llenó de ternura— Me dijeron que son A y B —reímos

_No quise ponerles los nombres antes de que despiertes, estás segura de lo que elegimos?

_No te gustan a ti?

_Me encanta todo lo que a ti te guste —me besó—
Si me gustan, solo quería asegurarme

_Vayamos a ponérselos, quiero verlos

Miró al rededor y señaló la silla de ruedas que estaba en una esquina de la habitación

_Te llevo sentada, no quiero que camines

Tampoco quería hacerlo, suficiente tuve con la sentada a medias en el baño para poder orinar

Me ayudó a posicionarme y entonces salimos de la habitación, me llevó hasta la zona de incubadoras y no pude con la felicidad en mi corazón, lloré de alegría al ver a mis hijos

Taylor y Sara estaban sentados en frente y llegaron a felicitarme por los bebés

Una enfermera nos indicó lo que debíamos hacer para llenar sus documentos y los nombres fueron puestos junto con las firmas de Klhey

Uzriel Jamael y Zuriel Jeamal

Nombres algo raros, tal vez sí, pero a nosotros nos gustaba

Regresé a la habitación esperando por las enfermeras que traerían a mis hijos para darles el pecho, los habían tenido que alimentar con otra leche antes que despertase

Klhey fue por Martha y cuando regresó con ella ya estaba dando de lactar a Uzriel, fue el primero que lloró cuando los trajeron y antes de que comience a llorar Zuriel también me lo pasaron

Nuestra nana comenzó a llorar de la emoción mientras estaba atenta al otro bebé que Klhey tenía en brazos, Sara se quedó pegada a mí acariciándole el cabello rubio del que tenía pegado a mi pecho

_Son tú cuando eras un bebé
—se empinó a besarle la mejilla

_Cierto —Taylor me sonrió —
Tu familia está viajando, llegarán como a las 11 de la mañana ya que decidieron viajar más temprano de lo planeado, nosotros los esperábamos por la tarde

_Ya el jet había llegado a Los Ángeles en la madrugada por suerte, creo que salieron casi a las 6 con tu familia. Dante estará esperando por ellos para traerlos aquí

Suspiré aliviada, almenos mis padres ya estaban en camino y casi no faltaba  nada para que llegaran

Gracias al Cielo las tetas no me habían crecido en vano, tenía mucha leche para mis bebés, dejando satisfecho a Uzriel se lo pasé a su padre y tomé a Zuriel, él era quien tenía la micha cerca del hombligo

A diferencia de su hermano, sus ojitos me miraban la mayor parte del tiempo mientras lactaba, aunque los bebés de recién nacidos no ven prácticamente nada, sus ojos estaban puestos en los míos y parecían ser verdes igual que los de su padre

Cuando de durmió y me dejó el pecho las enfermeras se los volvieron a llevar para volverlos a revisar, dijeron que me darían de alta al medio día junto con los niños ya que estaban más que bien y aparentemente sin ningún problema

De un momento a otro entraron mis padres casi llorando de la emoción con flores y globos, Jazmín casi se me tira en cima con un lindo peluche grande y me llenó la cara de besos

Traté de hacerme la de la vista gorda, pero a pesar de que todos se hayan saludado, entre los tres de siempre se sentía esa tensión, sin embargo no se sentía ya tan pesada colo en el cumpleaños de Jennie

Mamá me ayudó a vestirme después de conversarles a todos cómo fue el parto en el auto y lo desesperante que fue para todos, las enfermeras me trajeron a mis niños y salí en la silla de ruedas hasta otra camioneta que nos esperaba afuera siendo manejada por Dante, mi madre y Jazz iban con mis hijos en brazos

Ya íbamos a casa

LA PROPIEDAD DEL MAFIOSODonde viven las historias. Descúbrelo ahora