Contingencia

8-Sonrisa Psicópata

*Narra Triana *

Cameron se encerró en su habitación dejándome en el salón con mil dudas en mi cabeza y apenas podía pensar con claridad. ¿Me habían estado vigilando? Dios mio

Llamé a Scarlett y vino a casa, necesitaba escapar de mis pensamientos y quien mejor que ella para ayudarme con eso. Según escuché como alguien abría la puerta supe que ella estaba allí. Me lancé sobre sus brazos y esta me recibió. Realmente necesitaba ese abrazo.

— ¿Triana?—La voz de Cameron sonó en la sala al escuchar la puerta y escuché sus pasos desde el pasillo de la planta baja.

— ¿Qué pasa tío?—Dijo Scarlett riéndose— Soy Scar, no tienes que preocuparte más que por hacer la maleta y disfrutar en Miami.

— Muy graciosa—Dijo antipáticamente Cameron y se metió a su habitación.

Mientras subíamos las escaleras hacia mi habitación, Scarlett empezó a reírse.

— Vaya lio amoroso tenéis los dos—Dijo riendo

— ¿Estás borracha?—le pregunté

— Dime que te lo has tirado—Dijo Scarlett y ahora fui yo quien se rio

— Vale, si, estas borracha

Llegamos a mi habitación y saqué una maleta del altillo que había en el techo, le limpié el polvo con un paño y la dejé sobre la cama.

— Entonces, ¿por qué estáis enfadados?

— Yo no estoy enfadada—Le dije—Él es el que quiere llevarme a Miami con 3 guardaespaldas

Scarlett estalló en risas y la miré atónita. No entiendo que es lo que le hace tanta gracia de la situación.

— ¿Puedes parar?—le pregunté. Quizás podía sonar un poco antipática, pero es que de verdad no entiendo porque se ríe tanto.

— Perdona tía, pero es que me imagino la situación de un gnomo de jardín rodeada de 4 tíos y no puedo evitarlo—Dijo— ¿Por qué está enfadado?

— Porque le obligo a ir conmigo a Miami supongo

Pasamos Scarlett y yo la tarde juntas y supongo que le va bien con Erik, porque estuvo toda la tarde hablando sobre él. Me alegra que por fin se atreva a tener una relación estable, hasta ahora solo ha tenido una de un par de meses y no salió muy bien, no había comunicación entre ellos dos y supongo que eso mata una relación.

Un rato después y tras tenerlo todo preparado, me acosté en mi cama y tras dar decenas de vueltas en el colchón la misma duda rondaba por mi mente. ¿Quién querría hacerme daño?

Quizás había dado decenas, centenas o miles de vueltas antes de que sonara la alarma. Y digo quizás porque ni si quiera recuerdo haber dormido o descansado esa noche por el miedo de que alguien me estuviera viendo.

Según mi alarma sonó y sin pereza alguna me levanté y me metí en la ducha para prepararme para el día de hoy. Mi ropa simplemente se basaba en una blusa blanca, con una blazer negra, unos pantalones del mismo color y unos tacones rojos para dar algo de color.

Salí de mi habitación y bajé la maleta al salón. Para mi sorpresa Cameron no solo estaba despierto, si no que estaba acompañado por las voces que escuché en la cocina.

Entré a por mi café y efectivamente a Cameron lo acompañaban 3 chicos con la misma aura de seguridad con la que él se paseaba.

— Buenos días— Saludé y directamente me dirigí hacía mi cafetera a por mi café.

— Buenos días Triana—Dijo Cameron y en apoyé en la isla de la cocina esperando a que empezara.— Él es Chris—Un chico rubio y con los ojos marrones me saludó—Él es Kyle—Este tenía el pelo negro y ojos sumamente verdes— Y él es..