Levanto la mirada y ahí está el, Gale, mirándome. Viene a diario por las tardes después de trabajar, trabaja todos los días, y le agradezco a que se de tiempo para venir aquí, ya que solo tengo la compañía de Sae y el estúpido gato Buttercup. Sólo se queda un rato para desestresarse y ver que tal conmigo, ya que tiene que ir con su novia, Natalie, que ahora están comprometidos. Ya lo perdoné, ninguno de los dos puede estar así, nos necesitamos. Ya no es lo mismo de antes: el recuerdo de Prim esta ahí, aunque ya no lo culpo de lo que pasó, el si que lo hace consigo mismo. Me alegra que sea feliz con alguien mas ya que yo no puedo darle el amor que necesita. Amor. Yo ya no tengo ese amor. Peeta. No se donde esta, no se si lo quiero ver, o, si el quiere verme.
Sae viene por las mañanas (timbrando, tal y como lo hace Gale, solo ellos dos timbran ya que Haymitch cuando le da por venir acá toca la puerta, me imagino que está tan despistado que no se da cuenta del timbre) a dejar la comida del día, y Buttercup, pues Buttercup, solo sirve para ser un gato horrible y ya. Me paso los días en mi casa, con la misma rutina: Sae-Comida-Gato-Ducha-Gale-Comida-Pesadillas. No voy al bosque, no me da por ir, son solo viejos recuerdos que prefiero que no pasen con mi mente. A veces en mi rutina desaparece ducha por depresión. Por Prim. No tengo ni la menor idea de cómo este gato ha sobrevivido tanto y mi hermana no, ella debería estar aquí. No él. Es casi imposible retener mi llanto. Me paso el día con las mejillas húmedas. Y Gale se da cuenta:
-Hey! Tierra llamando a Katniss ¿si? -dice, pasando su mano delante mis ojos.
-Lo siento.
-¿En que pensabas? -pregunta.
-¿Que? ¿yo? oh, nada.
-Katniss -me reprocha.
No respondo.
-¿Peeta? -me pregunta.
Reacciono automáticamente al oír ese nombre, cuanto deseo verlo.
Yo sólo asiento a su pregunta.
Se queda pensando, como analizando algo. No dice nada, no decimos nada. Ambos sabemos que lo necesito ver, escuchar, ¿besar? No, no. Entre los dos es un silencio, hasta que el lo corta.
-Vendré mañana. A la una de la tarde -me avisa.
-¿Que? No. No Gale. Es tu horario de trabajo.
-¿Y? No importa.
-Si que importa. No arriesgues tu trabajo por mí.
-Quiero hacerlo, además, tengo algo que decirte mañana, realmente importante.
Y se va. Sin siquiera dejarme la oportunidad de contestar. No entiendo por que hace esto ¿que es tan importante para que tome tiempo de su trabajo para estar conmigo? Y luego de hacerme cosas muy improbables de lo que escucharé mañana, me voy a a la cama con una preocupación nueva, y seguro, una pesadilla nueva.
No despierto si no hasta las doce de la mañana, en una hora sabré que me dirá Gale. Bajo las escaleras y me encuentro que en la barra de la cocina se encuentra el desayuno: Sae ya ha venido aquí. Estos últimos días no la he visto ya que duermo mas de la cuenta ¿no se si eso esté mal? No. Imagino que no. Y no quiero ir a un doctor, no estoy de ganas. Doctor. Doctor Aurelius. Oh, es cierto, no he llamado desde que llegué. Tampoco es algo que me importe.
Me demoro mas de la cuenta el desayunar cuando escucho el timbre; Gale ya está aquí. Abro la puerta y me saluda con un abrazo, como siempre. No hablamos hasta que estamos sentados en el sofá.
-¿Y? -le pregunto.
-Qué impaciente. -responde con una risita.
Yo también río, hace mucho no escuchaba ese sonido salir de mis labios.
-Pues -empieza-, venía a hablar de Peeta.
-Oh. -consigo decir al escuchar ese nombre.
Silencio.
Silencio.
Más silencio.
Y habla:
-Katniss, él se va a casar.
Es inevitable que las lágrimas resbalen en mis mejillas. Gale estaba preparado para esto, ya que al instante me abraza y me susurra que todo está bien. Me mira y con sus pulgares tratar de secar las lágrimas que pasan por mi cara, lo cual es totalmente inútil, ya que otras rápidamente las reemplazan.
-¿Con quién?. -logro articular después de un rato-
-¿Que? -dice. Ya que lo que dije se escucho mas como un gemido.
-¿Con quién se casa Peeta? -pregunto. Decirlo es aún mas doloroso.
-Delly. -responde.
Y yo solamente atino a llorar un poco más ¿tan rápido me olvidó? ¿realmente me olvidó? ¿en serio? ¿por eso no ha regresado? ¿en serio, estas llorando por un chico, Katniss? ¿tú?
Aún con mis ojos nublados por mi llanto, me doy cuenta del gran sueño que me atrapó. Y me quedo dormida en brazos de mi amigo Gale.
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El Renacer de mí esperanza.
FanfictionUn fic después de que Katniss regresa al Distrito 12 en Sinsajo. Los rebeldes han ganado la guerra contra el Capitolio. Ahora Panem tiene paz. Pero yo no. Fui el Sinsajo, fui su esperanza, pero, ¿que con mi esperanza? ¿dónde está Peeta? ¿lo amo? ¿él...