Extraño (Kakuiza)

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—Muchas gracias, muchachos— una amable ancianita agradeció a Kakucho y a su ayudante dándole una propina generosa.

—Por nada señorita, no se preocupe— la señora río por el alago del más joven y se metió a su hogar.

Era su último trabajo del día así que llevaron el camión al sitio de carga y se fue a casa caminando. Cuando su moto se descompuso le gustó un poco caminar, así que lo hacía de vez en cuando.

Mal día para hacerlo.

Recibió una llamada de Manjiro, se preguntó para que lo necesitaba, debía ser importante o por comida.

—Manjiro, ¿paso algo?—pregunto curioso mientras cruzaba una calle.

—¡Kakucho!— el grito alarmó al mencionado en demasía y apuro el paso.

—Calmate un poco, ¿que paso?—trato de hablar tranquilo pero comenzó a trotar a casa.

—¡Emma-chan, salió a sacar la basura y la atacaron!— la voz de Majiro se quebró y Kakucho comenzó a correr.

—Escucha, te voy a colgar un momento—explico— Llamare a una ambulancia y a Shinichiro, ¿Okay?, trata de respirar, si Emma sangra con un trapo limpio has presión, no voy a tarde en llegar, te marcare de vuelta.

—Esta bien, apúrate, por favor— y Kakucho tuvo que tragarse las lágrimas.

Parecía un loco desesperado, pero no se iba a detener. Llamo a una ambulancia y le indico el lugar donde debería de ir.

Por último llamo a Shinichiro.

—¿Q-que?— La voz de Shinichiro le rompió el corazón cuando le menciono a Emma.

—Ah, no se, Manjiro llamo— jadeo pesado y descanso un par de segundos antes de volver a correr —Dijo que salió a sacar la basura y la atacaron.

—No— Shinichiro sintio que su alma escapaba de su cuerpo.

—Ya llame a una ambulancia y casi llego a casa, te llamare para ir a casa o al hospital, no te alteres mucho— A Shinichiro le tembló la mano y miró aterrado a Wakasa.

El chico corrió a sostenerlo por que casi cae sobre sus pies.

—¿Qué pasó Shin?.

—Atacaron a Emma—y Wakasa vio rojo.

•••

Unos minutos atrás...

Izana fue al baño cuando termino de secar los platos. Escuchó ruidos en el callejón de afuera y se puso alerta, Emma había ido a tirar basura a ese callejón. Escucho un poco más.

—¡Iza... mmm!— y salió corriendo del baño, se topo con Manjiro en la sala y ambos miraron las escaleras de emergencia.

Bajaron corriendo, con sus instintos animales al 100 y vieron a 2 tipos golpeando a su hermanita.

Ambos ardieron en rabia y patearon tan fuerte a los hombres, con toda la fuerza que tenían, y los noquearon.

Izana se acercó a su hermanita inconsciente en el suelo, habían tardado mucho y su hermana tenía hematomas y la ropa hecha girones. Sus ojos se aguaron pero se puso alerta cuando olio sangre. Mucha.

Mira a su hermana en todos lados y palpa con cuidado su cuerpo. Encontró un corte que parecía profundo en su estómago y otro en su pierna.