Salgo del consultorio y Alena me está esperando sentada en las bancas frente al escritorio de la enfermera. Niego con la cabeza porque ella está probablemente enviando un correo desde su celular y no se da cuenta de la atención que recibe. Supongo que los jueves son días bastante ajetreados en el hospital. Camino hasta ella y al sentir mi presencia eleva la mirada y sonríe mientras se pone de pie.
— ¿Todo está bien?
—Tendré los resultados de la prueba de sangre en un par de horas, pero todo lo demás está bien, de hecho el médico dijo que el incidente de hace un par de años parece haber quedado en el olvido. Mi salud es excelente.
—Eso es grandioso Kate, ahora me vas a decir porque si no estás enferma y te sientes bien viniste a realizarte un chequeo, me hiciste preocuparme por nada.
—¿Quieres comer algo?
Alena entrecierra los ojos al verme y termina por asentir. Tomo su brazo y camino con ella fuera del hospital. Sabía que algo no estaba bien luego de que nuevamente hice algo tan tonto como rechazar a Jackson por lo que según él sería la quinta ocasión. Pero lo que me llevó al hospital fue que admití frente a él que todavía me gusta Decker.
Una cosa es rechazar a Jackson, eso lo podría entender, pero decirle que me gusta alguien más que sin dudas ha demostrado que solo sabe romper mi corazón es algo más. Incluso para mí. Y luego de eso vino una plática con mi abuela que solo me demostró lo mucho que debo analizar mis acciones.
Porque aparentemente lo que ella quería decirme está relacionado con esta situación. Según sus palabras tengo un hombre en casa que me daría el mundo que no merezco, porque para ella unas horas bastaron para darse cuenta que Jackson está muy enamorado, pero yo no le correspondo porque otra de sus palabras traducidas del ruso fueron que soy una mujer desconsiderada que pretende recibir amor cuando no soy capaz de dar ese amor de vuelta porque no soy capaz de quererme a mi misma.
Lo cual es algo con lo que Jackson podría estar de acuerdo. No soy la mejor cuando se trata de verme a mí, siempre me ha sido más fácil hacer cumplidos a otros que a mí. Y la abuela Dasha cree que es por culpa del ambiente familiar en casa. Mi abuela estaba realmente molesta cuando me dijo esto acompañado del comentario de que estuvo en una cafetería que visité en la tarde.
Por lo que supuse que me vio hablando con Decker.
Llegamos a la cafetería que está cruzando la calle y tomamos asiento frente a una de las mesas ubicadas junto a la ventana.
—La abuela estaba muy molesta, nunca se había molestado tanto conmigo.
—Ella quiere que seas feliz, pero no a costa de la felicidad de otra persona Kate. Ambas sabemos que después de terminar con Decker te has quedado en ese capítulo, así que no entiendo cómo acabó Jackson en la historia.
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Una Lección de Amor
ChickLitKate Morgan acaba de cumplir veinticuatro años y su vida está por dar un gran giro. Siendo un alma libre ha encontrado un pequeño problema frente a ella, un problema que pensó había dejado en el pasado. Pero ese no es el único problema, sus padres h...