Un Ghoul fue aniquilado en su mundo, cuando d repente se encuentra a un ser en un espacio extra dimensional que le da la oportunidad de renacer en dxd.
Cabe aclarar que no es el mismo mundo ya que cambiaran algunas cosas.
Esta historia tendrá 2 pro...
Era de mañana, el sol era tapado por las nubes. Me desperté y salí de mi cama, me llevo un tiempo elegir mi ropa, el día anterior Ravel me pido una cita.
Yami:*Suspiro*
Solo espero que esto no sea obra de su padre...
Al terminar de vestirme salí de mi cuarto en dirección al comedor, al llegar allí me encontré con Ravel y algunas criadas. Ravel se enrojeció un poco al verme antes de saludarme.
Ravel: B-buenos días.
Yami: si, buenos días.
Le devolví una sonrisa antes de sentarme a desayunar. La comida era deliciosa y muy bien preparada, esto le subiría el animo a cualquiera.
Al terminar de desayunar nos dirigimos hacia la puerta lentamente, al llegar allí le pregunte
Yami: Bien Ravel, nos vamos?
Ya dirigiéndonos hacia un lugar al que creí que le gustaría a una niña de 5 años, es curioso que en el infierno hicieran un parque de atracciones, supongo que es casi igual al mundo humano, claro si quitas que el cielo es rojo y eso.
Cuando llegamos a la entrada pensé en algo, Raiser me había prohibido mencionar a los Phoenix por el momento. Eso me lleva a una pregunta, como dejaran pasar a 2 niños menores de 10 años a un lugar que no puede ser accesible sin un adulto? Si las reglas de los demonios son iguales a las humanas por desgracia... extrañado pero supongo que las leyes son leyes. Podria entrar por la fuerza pero... aún no quiero que Ravel tenga esa impresión de mi.
Luego de pensar por un momento una chica muy particular paso por su vista.
Espera!! esa no es Serafall!? al instante una chispa se encendió en su cabeza
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Yami: Ravel, puedes esperarme aquí un momento?
Ravel: Claro, pero sucede algo?
Aun sin cambiar su sonrisa Ravel me mira con mucho respeto y un pequeño sonrojo... Definitivamente no puedo decirle que me olvide que se necesitaba a un adulto... a las muy malas tendré que usar el jutsu de transformación.
Si no mal recuerdo Serafall le agradaban mucho los niños por asi decirlo, podría usar eso a mi favor.
Luego de acercarme a la reina demonio que parecía tener mucho tiempo libre ella me dirigió la palabra.
Serafall: Eto... Necesitas algo pequeña?
Yami: Onee-san... queremos entrar con mi amiga al parque pero somos muy pequeños... Nos ayudarías?
Haciendo la cara mas tierna que pude intente convencer a la chica.
Serafall: Claro déjaselo a esta Onee-san!
Al parecer su complejo de hermana actuó cuando use la palabra "Onee-san", que como lo se?