Te recuperare, pase lo que pase

Niña y profesor

La elfina comenzó a llorar de nuevo pero esta vez, estaba sonriendo - ¡M-Muchas gracias, ama! ¡Mika hará lo que pueda para complacerla a usted y a los amitos!

- Eso espero, Mika... porque necesito que alguien cuide a Harry y Dudley mientras yo busco trabajo - dijo Niña mientras señalaba a cada uno, luego pregunto con timidez y algo de vergüenza - No conocerás un trabajo que pueda realizar, ¿verdad?

Mika lo dudo un momento pero al final dijo - B-Bueno... la gente paga por obtener ingredientes raros... ¡p-pero eso es un trabajo muy peligroso!

- No lo dudo Mika pero como dije, necesito el trabajo - dijo Niña suspirando - Si es posible, necesito una lista de ingredientes y donde encontrarlos.

Mika aun estaba insegura de exponer a su nueva ama a tales peligros pero ella sabia que, con la edad que tenia, no iban a contratarla en ninguna parte por lo que no tenia muchas opciones de ingreso. Luego de intercambiar lista (una de ingredientes y otra de reglas), Mika se llevo a los niños a casa y Niña fue a buscar los ingredientes de la lista. 

7 de octubre de 1986

El tiempo paso y Niña mejoro tanto en la recolección de ingredientes como en la elaboración de pócimas (de Nutrición para Harry y Quema grasa para Dudley). Sus ingresos eran estables y vivían bien, Niña se aseguro de que nada les faltara. Mika seguía cuidando a los niños según las instrucciones de Niña (aun seguía siendo extraño para la elfina llamar a su ama por ese "nombre") mientras ella trabajaba.

Niña estaba caminando por el Callejón Diagon buscando clientes cuando se topo con uno de los regulares, el profesor Severus Snape. El profesor estuvo reacio de emplear a una niña al principio pero, luego de múltiples halagos hacia ella y su eficacia, decidió probar una vez. Sin embargo, esa única vez se convirtió en varios pedidos al constatar la calidad de los ingredientes.

- Buenos días, profesor - la profesionalidad en su voz siempre le resulto intrigante al hombre - ¿Busca algo en especial o uno de los de siempre?

- Necesito babosas cornudas para mi clase - dijo Snape con un tono neutral.

- Que afortunado, acabo de recogerlas hace poco - dijo Niña mostrando el frasco con las mencionadas - Serian 4 galeones y 5 sickles.

Otra cosa que impresionaba a Snape era su manejo de capital, no cobraba mas que en un boticario pero tampoco vendía tan barato, simplemente era demasiado justa. Y claro estaba, lo que mas le intrigaba al hombre era que siempre ocultaba su cara detrás de un pañuelo negro, una clara señal de que intentaba ocultar su identidad (eso y que su "nombre" era Niña). Tomo el frasco y le pago con una suma justa pero termino viendo sus ojos mas de la cuenta.

Su curiosidad (que intentaba reprimir cada vez que la encontraba) fue tan grande que, sin querer, tuvo un brote de magia accidental y el pañuelo que ella tenia se le cayo. Snape abrió los ojos de la impresión: debajo del pañuelo, justo en medio de su mejilla izquierda, había dos líneas horizontalmente marcadas. El uso de magia no fue desapercibido por Niña que, rápidamente, los apareció a ambos en medio de un bosque. Antes de que el maestro de pociones pudiera reaccionar, Niña lo aprisiono contra un árbol y lo inmovilizo cubriendo su cuerpo y parte de su rostro con la corteza del árbol.

- Usted es curioso, profesor - dijo Niña con frialdad mientras caminaba alrededor del mencionado - Siempre que nos encontramos, existe un conflicto dentro de mi: una parte me dice que me aleje y la otra que confié - finalmente, se detuvo frente al hombre - Si no le importa, me gustaría averiguar el por qué. 

El profesor Snape estaba, después de muchos años, asustado. Niña lo había tomado por sorpresa, su apariencia resulto muy engañosa y ahora estaba pagando por eso. La pequeña libero parte de su antebrazo izquierdo y levanto la manga que lo cubría, revelando la Marca Tenebrosa que lo caracterizaba como mortifago.

La mirada de Niña le hizo saber que ella sabia sobre la marca y trato de explicarse pero no pudo, la corteza del árbol le impedía hablar. Niña paso sus dedos sobre ella y enseguida noto la magia oscura que la rodeaba... pero no era lo único. Lentamente, un hilo dorado salió justo por debajo de la marca y Niña lo toco para averiguar su contenido.

"Yo, Severus Snape, juro proteger a Harry Potter de cualquiera que amenace su vida"

Niña abrió los ojos asombrada: ¡era un Juramento Inquebrantable! Niña sabia que romper uno de esos era sentenciar tu magia o, en el peor de los casos, tu vida. De repente, Niña ya no veía a un peligroso mortifago en libertad sino a un posible aliado. Con un movimiento de mano, el profesor fue liberado y llevado por Niña a su casa. Al llegar, Snape se desplomo en el sofá individual.

- ¡Pero que manera de abordar a la gente! - siseo Snape tratando de recuperarse del mareo - ¡¿Secuestras personas a menudo o que?!

Niña lo ignoro - ¡Chicos, vengan a la sala un momento!

Los niños corrieron apresurados al lugar, felices de que Niña regresara (esperaban que, esta vez, sin heridas) pero se detuvieron en seco al ver a un completo desconocido sentado en el sofá. El maestro de pociones, por otra parte, estaba absorto por lo que veía. Uno de los niños le era completamente desconocido pero el otro... esos ojos, los ojos de su amiga, los reconocería en donde fuera.

"¿Qué hace el niño Potter en este lugar?"