𝕱𝖗𝖔𝖒 𝖆𝖕𝖗𝖎𝖑 𝟒 [𝔳𝔢𝔯𝔰𝔞𝔱𝔦𝔩𝔢𝔰]

𝐎𝟒 𝖉𝖊 𝖆𝖇𝖗𝖎𝖑 - 𝐎𝟕:𝐎𝐎 𝖕.𝖒.

Desesperadamente se vistió lo más rápido que pudo. 

Corrió hasta la puerta mientras tropezaba con todo lo que estaba en su camino. 

En ese momento, nada era más importante que alcanzar al chico que acababa de cruzar el umbral del baño. 

Sin embargo, cuando llegó a la puerta no había nadie.

Igual que todos los días, el ruido de las salas se mezclaba con la brisa de la tarde, como si nada hubiera pasado... 

Su única prueba era la marca superficial de los dientes en su mano.

Por un momento, se sintió decepcionado pero ese sentimiento pronto fue remplazado por la incertidumbre y la preocupación.   

¿Era real? ¿él hablaría sobre lo que hicieron?

Sus dudas dejaron de tener cabida en su mente rápidamente. 

La pregunta más importante también era la más estúpida... ¿Cómo no notó de quien era esa voz?

¿Por qué tuvo que esperar a que dijera su nombre para darse cuenta?

Esa voz, que esa misma mañana se había posado en su oído para susurrar su nombre. 

Wang Yibo.

¿Estaría confundido?  

Después de tantos altercados, quizás su voz se quedó dando vueltas en su mente, tanto que la confundió con el chico pervertido del baño. 

Aunque no podía dejar de pensar en ello, realmente ya no importaba. 

De todas formas, no podría encontrarlo y si lo hiciera ¿Qué podría decirle? Nada. 

Solo le quedaba volver a clases...

¡Mierda!

Revisó su celular y notó que estaba repleto de llamadas de sus amigos. 

No entendía su desesperación hasta que vio la hora... pronto terminarían las clases y él se había ausentado a todo el último ciclo. 

Ni siquiera les había dado una explicación antes de irse aunque, siendo sinceros, era mejor si no sabían dónde estaba.

Corrió nuevamente a su salón. 

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– ¡Zhan Zhan! – sus amigos lo llamaron al unísono. 

El mayor se dirigió hacia ellos y notó que un chico de cabello pelirrojo los acompañaba. 

El aire escapó rápidamente de sus pulmones, se congeló a solo unos pasos. 

En contra de su voluntad, Yubin lo tomó del brazo y lo integró al grupo.

– Vamos, acércate, él es Li Wenhan del salón de primer año – lo presentó.

– Solo Wenhan está bien – el chico tenía un aire coqueto, le sonrió de lado e inclinó su cabeza para saludarlo.

Zhan prácticamente lo ignoró. 

Su corazón estaba a punto de salir de su pecho y sus  pensamientos estaban concentrados imaginando las miles de diabólicas y crueles razones de su presencia...

Seguramente Wang Yibo había dicho algo. 

Probablemente Wenhan estaba aquí para contarle a todos, empezando por sus mejores amigos, era obvio que querían arruinarlo y él...