𝕱𝖗𝖔𝖒 𝖆𝖕𝖗𝖎𝖑 𝟒 [𝔳𝔢𝔯𝔰𝔞𝔱𝔦𝔩𝔢𝔰]

𝟐𝟓 𝖉𝖊 𝖆𝖇𝖗𝖎𝖑 - 𝐎𝟕:𝐎𝐎 𝖕.𝖒.

Wang Yibo abrió sus ojos media hora antes de que el despertador sonara. 

Con su poca energía y escasas ganas de vivir escuchó el silencio que se alojaba en su departamento, aquel que las semanas anteriores había estado lleno de risas y gemidos intensos pero que los últimos tres días se había convertido en un lúgubre salón, lentamente comenzó a recordar y recuperar la oscuridad que se había instalado en sus ojos durante ese fin de semana.

El viernes después de escuchar como Zhan "confesaba sus sentimientos" a su amigo, Yibo volvió a su departamento con el único objetivo de sentirse como la mierda. Sin embargo, después de automutilarse emocionalmente y pasar un tiempo pensando en las palabras del mayor, lo que en su momento le pareció muy obvio ahora se le hacía por lo poco extraño ¿por qué Zhan le había dicho a su amigo que lo "extrañaba" si se veían todos los días? y si Yixuan había alardeado por una semana completa sobre su "amistad" con Zhan ¿por qué no había hecho lo mismo con su supuesta relación?. 

Sus dudas lo hicieron creer que quizás [solo quizás] había confundido las cosas y Zhan no lo había "traicionado" como él pensaba. Entonces, decidió que le daría una oportunidad, que confiaría en él sin importar todo lo que hubiera escuchado pero es imposible arreglar las cosas con alguien que ni siquiera aparece. Lo llamó, pensando que quizás había pasado algo en el camino, pero no hubo respuesta [solo el buzón de voz diciéndole que había sido un idiota]. ¿Quizás se quedo sin batería? quiso darle el privilegio de la duda, pensar que había pasado algo y seguir esperando a cuando él decidiera buscarlo, porque en algún momento debería hacerlo ¿no? 

Bueno.. no. 

Zhan simplemente nunca volvió y el domingo en la noche Yibo estaba empezando a preocuparse. No tenía mensajes, llamadas o si quiera una señal de vida del pelinegro. En un intento desesperado y gracias a que Wenhan parecía una sanguijuela pegada al cuerpo de Yubin, se atrevió a preguntarles por el mayor. 

- Hace unas semanas que pasa menos tiempo que nosotros en la casa - el menor ocultó una leve sonrisa que evidenciaba su culpabilidad - pero sobre este fin de semana.. solo volvió anoche por algo de ropa y luego se fue de nuevo - le comentó Yubin al ver la desesperación en sus ojos. 

Siendo realistas, Yibo tenía más de una razón para sentirse de la mierda pero, aunque se sentía abandonado y dolido, insistía en que debía confiar en las palabras del pelinegro. Al menos hasta que llegó el lunes y toda su confianza se fue a la real mierda ¿cómo iba a creer en él si cuando llegó al campus se encontró con ambos chicos abrazados por los hombros y conversando entre risas? Era imposible, él había pasado todo el fin de semana preocupado y Zhan estaba tranquilamente riendo con la persona que él mismo había dicho que no le interesaba ¿¡era una maldita broma!?. Un nudo se formó en su estomago, una rabia se alojó en su pecho y, queriendo evitar una discusión pública, decidió seguir su camino sin siquiera saludarlos. 

Zhan notó su extraña actitud y, aunque quería hablarle, también pensó que era mejor esperar antes de pedir sus disculpas.

La verdad es que el mayor estaba demasiado emocionado por la llegada de Ziyi, a tal punto que dejó toda su vida y redes sociales de lado para recuperar el tiempo perdido. Debido a ello, olvidó por completo que el menor lo estaba esperando y tampoco revisó su celular en los próximos días. Sabía que dejarlo plantado no estaba bien y estaba consciente de que le debía unas buenas disculpas y una gran recompensa [como solo él podía hacerlo], pero también pensaba que enviarle un mensaje o llamarlo era una forma demasiado superficial de arreglar su error. Pensó que lo mejor era hablarlo en persona, sin embargo, resultó que cada momento en que se encontraban, para Zhan no era "el mejor momento" para decírselo y al final estuvo toda la jornada de clases posponiéndolo sin cruzar una sola palabra con el castaño.