EAGAN.

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PASADO

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PASADO

Después de horas de no verla, de no haber dormido una mierda, de tener un día del carajo. Finalmente estoy donde tengo que estar, recostado en su pecho recibiendo esas caricias, esos mimos y ese aroma que tanto necesito. Me di cuenta ella es la única con el poder suficiente para mantenerme así, tranquilo. A veces me pregunto qué pasaría si dejo de sentir esas delicadas sensaciones que ella emana y que me da siempre que estoy cerca.

¿Me volveré loco?

–¿En qué piensas?

–En lo que sería capaz de hacer si no te tengo.

–Pues no lo pienses porque no pasara.

–No te tuve por un par de horas y pasaron cosas graves.

–¿Sí, cómo qué?– dice abrazándome más hacia ella tensándose.

–No estaba de buen humor, no dormí en toda la noche y te extrañaba demasiado...

–¿Por qué no se lo dijiste a tu padre, podría haber venido a verte. ¿Te dolía algo?...

–No quería molestarte y alterarte en tu primer día...

–No ibas a hacerlo y lo sabes– dice con un tono de voz que conozco bien, un poco más serio, ese tono que utilizaba para decir que no estaba feliz con la situación.

–Yo quería hacer las cosas bien, como lo planeamos– suelta un suspiro y hace un ruido con la boca para que continúe con lo que le estaba contando– la despedida con mis padres fue algo interesante papá tenía miedo que de que lastime a alguien...

–Conscientemente jamás lo harías.

–Lo sé y se lo dije, le dije que era más probable que el que necesite ayuda sea yo y no los demás. Cuando ya había ingresado a La Isla sucedió algo que me descoloco, realmente me hizo sentir nauseas de la rabia Skade...

–¿Ellos?...

–Sí, no pude controlarme por mucho tiempo, era necesario que sientan lo enojado que estaba– le respondo a su pregunta la cual se refiere a si solté mi viento caliente.

–Lo entiendo, te reprimiste por mucho tiempo al no querer que los demás conozcan esa poderosa energía que emites. Es tu decisión Eagan y si decidiste sacarlo a relucir en ese momento nadie puede decirte nada, ni siquiera yo. Confío plenamente en que fue por una muy buena razón.

Tiene razón ya que cuando dije que solo nuestros padres y ella conocían ese viento caliente me refería a cuando me inundaba de rabia o cosas por el estilo no duraban más de cinco segundos porque siempre estaba Skade para mejorar mi humor a niveles cósmicos. Ambos Reinos conocen y sienten mi viento caliente, conocen muy bien mi energía y las vibraciones que suelto que tranquilamente puede compararse a un ligero soplido. Se siente como ese delicioso viento que corre cuando estas en la playa disfrutando de esa calidez que puedo transmitir, es tibio y suave, te acompaña y cuida, es como un abrazo el cual te arrulla y te lleva al sueño.

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