PASADO
Pasaron los minutos, las horas y los días.
Cinco para ser exactos y los herederos al trono no se vieron.
El frío hielo se volvió más intenso e inestable avanzando con fuerza aniquilando todo a su paso. La Frontera estaba cubierta por nieve y a cada segundo iba devorando más el lado fuego de esta línea que mantenía el orden.
Las personas no sabían a quién rezar para pedir ayuda, la desesperación los envolvía y en sus mentes solo podían ver la llegada del Dios de la Muerte pisar sus tierras llevándose sus almas, así tal cual dice la profecía.
Las personas en estos momentos estaban odiando lo sucedido porque se preguntaban qué culpa tenían de semejante acto que ellos no causaron, y todo se descontrol más cuando sintieron que sus tierras estaban en desequilibrio.
La inestabilidad emocional que se cargaban los seres de fuego estaba pasando factura para todos porque su desesperación no los dejaba razonar de ninguna manera más que buscar refugio por el eterno invierno que sabían que se avecinaba.
Ellos solo estaban a la espera de que el Dios de la Muerte llegue a cumplir su promesa...
Ivy y sus hermanos se encontraban en el castillo porque Skade se los llevo a vivir allí.
Breena falleció, así de manera suave y sutil, su alma beso la de su amado que la esperaba con cariño llevándosela y fusionándose en el cosmos.
Infinitum Ánima.
Así se le llama a la muerte en el Reino del Hielo, así se muere en ese congelado, frío y atesorado lugar. Tu alma se vuelve infinita convirtiéndose en la última emoción o sentimiento que hayas sentido hasta el final. Te conviertes en una resonancia, que se queda plasmado en el cosmos hasta la eternidad.
Falleció una madre y una luchadora mujer dejando un hueco en lo más profundo de sus hijos que aunque lo entendieron no pudieron evitar extrañarla porque en los seres de hielo también existe ese mecanismo el cual tienen incorporados en su ser, ellos entienden la muerte. Ellos la respetan y sueltan un último suspiro que abraza y consuela al alma de la persona que partió a la infinidad del Universo.
Skade cuando despertó de su doloroso desmayo fue a ver a su amiga y no tuvo mejor solución que llevársela junto a sus hermanos a vivir con ella. Ivy y sus hermanos se ganaron el cariño de todo el castillo convirtiéndose así en su familia.
Los tres hermanos veían y velaban por Skade que se la pasaba durmiendo la mayor parte del tiempo desde que su padre la tomo en brazos llevándola hacía el castillo. Ella todavía tenía una enorme mancha de color violeta en el pecho y era porque se reusaba a devolverle el tirón del lazo a su compañero de eternidad, y su frío hielo la protegía durmiéndola.
Pasaron las horas, paso el tiempo que se sentía pesado como si nunca más avanzara y todo empeoro.
–¡Reina!
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AETERNUS
FantasySon los próximos herederos. Son una profecía. Son la muerte. Obra Registrada por Safe Creative 2109039157322