Capítulo 15

27 8 9
                                    

15._ Planes

Me desperté un poco más tarde de lo que acostumbro, me di un buen baño (que por cierto el agua estaba terriblemente fría) y me encaminé al castillo para ir a ver a Emersyn.

Ahora puedes ir a verla siempre que quieras sin el temor de que el rey te corte la cabeza, ¿las cosas han cambiado mucho, no?

Sí, y para bien.

Llego a las puertas del castillo y le comunico a uno de los guardias a lo que he venido, éste asiente y desaparece tras las puertas.

Momentos después se escucha llegar un carruaje, y no tengo que pensar demasiado para saber de quien es.

Daileass abre la puerta de un golpe antes de que el paje logre hacerlo, el primero le da una mala mirada y baja del carruaje. Camina hasta las puertas justo donde yo estoy parado y ahora el otro guardia es quien recibe una mala mirada cuando no lo deja pasar.

-¡Quítate de mi camino! -exclamó embravecido.

-Lo siento mucho, señor, pero tiene que decirme a que ha venido. -El hombre casi tartamudeó, era obvio que Daileass le intimidaba mucho.

-¡Cómo si eso fuera tu maldito problema, hazte a un lado!

-Educación ante todo -murmuré, soltando un pequeño suspiro.

-¿Haz dicho algo, caballerito? -Daileass volteó a mirarme, el guardia pareció aliviado.

-Caballero, es la forma correcta de decirlo, alteza -fue mi única respuesta mientras esperaba que Emersyn apareciera.

-Te crees muy listo ¿no es cierto? Viniendo aquí, a tomar lo que no te pertenece -le interrumpí.

-Creo, que ya habíamos discutido que la princesa no le pertenece a nadie, mucho menos a usted -lo miré mal y él me devolvió la mirada.

-Vas a pagar muy caro por insultarme de esa manera, sólo es cuestión de tiempo.

-Ya veremos.

Por fin el guardia volvió a aparecer, Emersyn Landon y Darya venían con él.

-Buenos días alteza -saludé, haciendo una reverencia -, ¿Está lista para nuestro paseo?

-Por supuesto, vamos -extendí mi brazo y ella envolvió el suyo y nos alejamos del castillo -. ¿Qué te estaba diciendo Daileass?

-Bah, nada relevante -hice un gesto con la mano, restandole importancia -. Que me iba a arrepentir de haber venido y todo eso.

-¿Y no te asusta? -cuestionó Landon.

-Claro que no, eso es lo que él quiere, que me asuste y salga corriendo, pero no lo haré.

-¿A dónde vamos? -Darya quiso saber.

-Unos amigos vienen a visitarme y acordamos encontrarnos en las afueras del pueblo.

-¿Y no pueden venir al pueblo?

-No, ellos no pueden ser vistos, ya verán porque.

Nos sentamos a charlar bajo la sombra de un árbol, momentos después pude divisar a lo lejos un par de manchas blancas que tenían una mancha roja encima. Cuando estuvieron cerca, pude ver con claridad un par de lobos blancos que se acercaban a gran velocidad y sobre el lomo de uno de ellos venía una doncella de largo cabello rojo.

Mis acompañantes no se percataron de ellos hasta que me levanté para salir a su encuentro y uno de ellos saltó sobre mí y empezó a lamerme la cara.

Los pasadizos del castillo [COMPLETADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora