Los pasadizos del castillo [COMPLETADA]

Capítulo 32

32. El regreso del dragón

Linnaea

Corro de un lado a otro buscando un buen escondite, porque sino va a atraparme.

Una vez que encuentro un buen sitio me quedo ahí muy quieta, si tengo suerte, tal vez no me ha seguido, pero no la tengo pues logro escuchar sus pasos acercándose hasta mi lugar.

Me cubro los ojos con las manos, tal vez si no lo veo no me vea a mí, aunque ahora que lo pienso suena una idea muy estúpida.

—¡Te encontré! —me carga de la cintura sin que yo pueda evitarlo y empieza a revolver mi cabello, lo cual me molesta mucho.

—¡Papáaaa! ¡Alioth me está despeinando! —grito y él me suelta riéndose, yo lo miro mal mientras trato de arreglar mi cabello.

—Llorona —se burla él.

—Alioth, te he dicho que no juegues pesado con tu hermana —nuestro padre, un hombre alto quien recientemente descubrió que le gusta dejarse una ligera barba, entró a la habitación y automáticamente hice mi mejor cara de damisela en apuros.

—Mira lo que me ha hecho —señalé haciendo un puchero.

—No le hice nada —intentó defenderse mi hermano, pero yo siempre gano en estas situaciones.

—Alioth, a tu hermana no le gusta jugar de esa manera y lo sabes —papá lo miró mal —. Ahora ve por Elliott y vengan al salón a ayudarnos.

Mi hermano me miró mal y yo le saqué la lengua, luego se fue y yo le di un abrazo a papá.

—Gracias por salvarme de nuevo —le sonreí y él besó mi frente.

—Lo haré siempre, eres mi princesita ¿recuerdas? —apretó mis mejillas y acomodó mi cabello después fuimos juntos al salón.

Hay mucho ajetreo en el castillo pues se está organizando una fiesta muy importante, mi cumpleaños número quince.

Será la fiesta más grande de todas, tendré muchos invitados y sólo tal vez, conozca al amor de mi vida.

La sola idea me hace sonreír, espero que sea como en esas historias que amo leer, donde ambos se conocen y viven felices para siempre.

Mi madre y mi padre llevan semanas organizando esto para que sea perfecto, y todos están ayudando.

Midory y yo hemos recorrido todas las tiendas hasta encontrar el vestido perfecto y lo logramos, es sumamente precioso y me queda genial.

Mamá, mi tía Darya y mi tía Eldora están escogiendo las decoraciones, y mis tíos Hughes, Landon, Camelum y Caelum están colocando todo según las indicaciones de ellas.

Y mis hermanos, bueno, algún desastre deben estar haciendo con Badir.

—¡Esto es precioso! Mañana se va a ver asombroso —le digo a mamá y ella sonríe.

—Nos alegra que te guste, es un día especial, y hay que celebrarlo por todo lo alto.

—En serio no puedo creer que le hagan una fiesta para que se consiga un novio —Alioth recuesta su brazo sobre mi cabeza, pues soy mucho más baja que él —. La fiesta de Midory no fue tan grande.

—Por supuesto, no tiene sentido hacer una fiesta así para la chica más fea del reino —agrega Elliott.

Midory, quien estaba hablando con mi tío Hughes lo mira mal, a ambos les fascina molestarla de esa manera, sobre todo a Elliott, a ella antes le afectaba mucho, pero ahora solo le da igual, sin embargo aún se enoja un poco.