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El auto parecía ir en cámara lenta por su gran desesperación en llegar ya.

Sus amigos lo calmaban y le repetían que todo saldría bien pero seguía sintiendo miedo de lo que pasaría cuando llegasen a hablar. Hyunjin apuró un poco al chófer de la familia y este obediente decidió tomar un atajo para no demorar más.

El carro ahora pasaba por una calle estrecha, sonando el claxon para avisar que iba veloz y así no atropellar a nadie.

Minho mordía sus labios por estar tan nervioso y asustado, se lamentaría por mucho tiempo el no haberlo buscado antes en caso llegaran tarde y su menor ya hubiera subido al avión. No quería perderlo, no quería que se vaya sin antes decirle todo lo que sentía.

Las lágrimas amenazaban con salir pero estaba siendo fuerte mientras practicaba todas sus palabras en la mente.

- ¡Hyung, llegamos!

Habían frenado afuera del gran aeropuerto y luego de ser llamado por su hermano salió del interior muy rápido.

Corrió a la entrada seguido por sus amigos y al ingresar miró hacia diferentes lados buscando alguna figura conocida pero habían tantas personas que era muy difícil dar con él. Fue jalado por Hyunjin hacia otra dirección, pero no dejaba de mirar a su alrededor desesperado.

- "Pasajeros del vuelo 4419 con destino a Canadá, porfavor acercarse a la cabina de entrada al avión con sus boletos [...]"

Apenas escuchó que la señorita del parlante nombró el tan amado país de Han, buscó algún cartel que indique la dirección que había dicho.

Se separó de sus acompañantes al leer un aviso con el número "4419" y corrió hacia allá. Era un espacio con separadores que creaban el camino para la fila de pasajeros, aún no se llenaba el lugar por lo que se alivió un poco.

Escuchó gritos atrás de él, Seungmin saltaba tratando de llamar su atención y al hacerle caso éste le señaló a un sitio específico.

Jisung estaba allí.

Miraba su celular y se ponía sus audífonos para escuchar algo de música que alegre su viaje, y no parecía darse cuenta de su presencia aún.

Apenas lo vio todo lo demás a su alrededor desapareció y nada le importaba más que su menor, corrió hacia él cruzando la entrada con unos guardias que quisieron detenerlo. Pero no impidieron que llegue ágilmente a su lado, con la respiración agitada y una leve sonrisa.

Extrañó mucho verlo de tan cerca por lo que se sentía feliz.

- ¿M-minho?¿Qué haces aquí?

- Debemos hablar, porfavor, no te vayas.- Le rogó.

Era un momento confuso y lleno de incertidumbre para el más joven.

- ¡Usted, no se mueva! No puede estar aquí, salga inmediatamente.

Las personas encargadas de seguridad aparecieron y lo tomaron por el brazo, Jisung intentó decirles que sólo venía a despedirse pero ellos no podían permitir su ingreso sin tener boleto.

- Tienes que escucharme... Porfavor.- Dijo mientras lo sacaban del lugar con suaves empujones.

El tono de su voz causó muchas emociones en el contrario, resistió todo lo que pudo pero terminó por seguirlo hacia afuera de aquel espacio.

Recibió una sonrisa agradecida cuando estuvieron frente a frente y apenas los guardias los dejaron solos, Han lo miró a los ojos serio.

- ¿Qué me quieres decir ahora, Minho?

#little lies ;; minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora